Por la noche, las brujas iban de un lugar a otro, haciendo llamadas, bucando cosas, alistando pociones, y preparando su equipaje, Evie había llamado a su abuela, que con gusto llegó al castillo tan pronto supo de la cacería, llevaba en sus manos una pequeña bolsa en forma de mochila, Evie, de alguna forma, sospechaba de que se trataba, Evie se precipitó a los brazos de su abuela, ella la estrechó mientras le daba un suave beso en la frente.
—¿Es una bolsa Wuffju?
—Si, cariño, era de mi madre, espero que sepas cuidarla.
—¿Son muy caras?
—Son muy pocas, más bien, desconozco el valor que tengan, no es como si las brujas adoraran venderlas, le pertenecieron a Schilla Wuffju, una bruja china amante de la moda del siglo XXVII, dicen que tenía bolsos por montón, y que había logrado crear una planta, capaz de sintetizar goma que con un largo proceso podía convertirse en un material no sólo de muy buena calidad, si no que también tenía propiedades mágicas.
—¿Y por qué no siguen haciendo más bolsas, si han surgido de una planta?
—Schilla era una bruja muy poderosa, hija además, de un emperador, era de esperarse que muchas jóvenes brujas se sintieran seducidas por vivir en su castillo, cada bolsa Wuffju, representa una bruja muerta en la cual se encubó la planta para sacar una de sus bolsas, cuando la desaparición de las brujas fue exagerada, y el número en la región mermaba cada vez, se hicieron investigaciones, se descubrió el palacio de Schilla, y todo lo que dentro había, y todo el conocimiento se quemó, junto con la propia Schilla.
—¿Si todo se quemó, cómo se conservaron las bolsas?
—Son material útil, aunque realmente no se sabe todo lo que pueden hacer, y en memoria a todas aquellas brujas, se mantienen en muchas de las familias alrededor del mundo, gracias a Schilla, actualmente no existen brujas chinas.
—¿Acabó con todas las brujas de China?
—Ay, Dios, cariño, no. Pero su padre, ciego de la furia, realizó uno de los más grandes feminicidios de la historia, reclamando la vida de todas las brujas, o de lo contrario, seguiría asesinando mujeres inocentes, el consejo se negó, pero en un arrebato de desobediencia, las brujas chinas pusieron a salvo a sus hijas, y se entregaron.
—¿Y no era más fácil destruir al emperador?
—El emperador contaba con protección de Schilla, cuya magia, aun muerta hacia su castillo impenetrable, o al menos lo fue, hasta treinta años después, cuando las hijas de las asesinadas lo tomaron, y dieron su vida para destruirlo, junto con el emperador y toda su descendencia, conservamos los bolsos en memoria de las muertes.
—¿Me has traído entonces, abuela, de regalo una bruja muerta?
—Calla, insolente.—Jannie Grehnne golpeó a Evie fuertemente en la cabeza, Evie no volvió a responder.
—Espero que sepas apreciarlo, en tus manos no sólo llevarás a una bruja muerta, como dices, si no que llevarás su memoria, y sabrás que su muerte no fue en vano.
—Una bolsa no me parece precisamente una buena forma de ser recordada.—Evie replicó, la abuela la ignoró.
Cristine, por su parte, se encargó de buscar provisiones, una casa de campaña, linternas, muchas botellas de agua, un libro de hechizos, que dudaba les fuese útil, pues hasta donde sabía, Evie tenía poco conocimiento sobre su magia, y Katy era más bien torpe, característico de todas las brujas oscuras, también llevaba latas de comida, un cuchillo, un par de mudas de ropa, incluso se tomó la libertad para buscarle a Evie y Katy algo para llevar, agregó también algunos dulces, y algunas cosas de aseo personal, aun así, por más que agregaba cosas, seguía sin parecerle suficiente.
Por su parte, Katy, que ciertamente no tenía a quien recorrer, se pasó la noche entre libros y pociones, buscando todo aquello que pudiera buenamente servirle para mantenerse a salvo, mezcló con esperanza, pues aunque nunca había hecho aquello, tenía una extraña fé en que funcionaría.
A las 5:30, las tres chicas, estaban abrazadas a sus abrigos, en un círculo en el estadio, hacía muchísimo frío, las demás brujas estaban reunidas esperando, algunos equipos aun estaban organizándose, otros, por su parte, llevaban más tiempo esperando.
Había, ciertamente, equipos de hasta cinco chicas, pero lo sorprendente era la cantidad de brujas que habían decidido llegar solas.
Las representantes del consejo, hicieron su aparición quince minutos antes, Susie Crehwton subió a la tarima, y comenzó a hablar.
—Lamento la tardanza, mi escoba se trabó en un árbol.
Las asistentes rieron.
—Tendré que resumir las cosas, supongo.—Susie pausó su habla. —También estoy un poco mal de la garganta.
El público estaba confundido.
—Para efectos prácticos, este año tenemos la participación de veinte equipos, un excelente número, a mi parecer, contando el hecho de que varias se abstuvieron de participar. Es importante recalcarles, que el coliseo está dividido en tres partes, y tenemos una bola de plata por cada tipo de bruja, esto no quiere decir que lo que encuentren dentro sea particular para uno u otro tipo de bruja, pero sí quiere decir, que han sido colocados ahí por ellas. Una vez que crucen el portal, serán transmitidas a nuestro coliseo, en cualquiera de los 20 lugares, según el orden en que se inscribieron, se les dará un mapa del lugar, pero quiero aclararles que este, no contiene información sobre donde se encuentran los premios, buscando justicia, las 20 posiciones están a exactamente la misma distancia de estos, les recuerdo, que una vez ingresando están solas y son todas contrincantes.—Susie hizo un ademán a las dos brujas que estaban a entrada del portal, ellas fueron llamando a los equipos.—Antes de que ingresen, quiero que sepan que si una se retira, las demás participantes del equipo también lo harán, y además hemos puesto algunos regalos para ustedes, si los encuentran, podrán quedarselos, mucho éxito.
Editado: 07.08.2021