Perdón

Al despertar al día siguiente me dolía un poco la cabeza, así que pedí una medicina a mi abuela. Luego de tomarla le pregunte si ella había visto mi osito Ozil. Trato de hacer memoria, luego de peguntarme si era azul y gris, a lo que conteste que sí. Me dijo que estaba en las cajas con las cosas de mi madre.

Sin perder tiempo me encaminé al lugar donde estaban y comencé a buscar hasta que lo hallé. Me encerré en mi cuarto y comencé a examinarlo, creo que estuve media hora en eso. Cuando ya me había dado por vencida, lo agarré por la oreja y ahí lo sentí. Enseguida busque un hueco o algo y logre sacar un chip, sin detenerme lo coloque en mi pantalla, había varios archivos.

Abrí el primero.

—Hola, hija, si ves esto es porque estoy muerta, obvio. —Comenzó a reír algo histérica—: Perdona, pero los nervios me atacaron, es que es difícil todo lo que debo contarte. Te haré un resumen y luego tú decidirás si quieres seguir viendo los demás videos, si debes compartir o no la información. Sé que, aunque implore perdón, eso no va a resolverlo, aun así… —Comenzó a llorar—. Que sepas que me arrepiento de todo, no quise hacer daño, solo quería que la humanidad tuviese una oportunidad en este mundo, aunque no nos la merecemos. —Se limpió el rostro luego de beber agua y respiro—.

>> Okey mi niña empezaré, desde que comencé a estudiar genética molecular, tenía la inquietud de que si los seres humanos podíamos volver a comunicarnos con los animales evolucionados. Claro, lo sé, no es que en tierra antigua se hubiesen logrado comunicar con ellos. Aunque ahí es donde está el misterio que más elevó mi curiosidad, solo Kim sabe esto, pero encontramos archivos antiguos en una investigación de la pretérita tierra. En donde una civilización antigua de antes de cristo, se comunicaban con los animales. —Mis ojos se abrieron de par en par—. El lugar era conocido como la Atlántida y decía que podían comunicarse, con muchos tipos de animales.

>> Podrás imaginar cuanto me emociono y si, sé que pudo haber sido seudociencia, pero los documentos fueron analizados y sin duda pertenecían a esa época. En fin, esa habilidad se perdió en las futuras generaciones, aunque se dice que hubo familias alrededor del mundo que aun podían hacerlo. Ahora más que nunca necesitábamos de esa habilidad, ya que nuestros animales son el doble de lo que eran antes.

>> Muchos creían que estaba loca, nadie compartía mi idea que no era otra que crear modificaciones genéticas en seres humanos con genes de animales. Ya sé que está prohibido y quizás era algo aberrante pero la idea me perseguía, aunque deje de hablar de ella. Luego de 6 años tuve la oportunidad de trabajar con genetistas en los hospitales, tenía acceso a las embarazadas. Así que se me ocurrió que era el momento de probar mi teoría. Decidí escoger cuatro sujetos, uno de cada colonia.

—¡¡¡¿Qué?!!!

Sentí que el aire se me iba.

—Claro, no todos fueron al mismo tiempo, los sujetos se llevan entre un año o dos, pues la preparación del cóctel de genes, por decirlo de una forma que entiendas, no era sencilla. De hecho, fue difícil escoger los genes que deseaba y de qué animales hacerlo.

>> Al final lo logré, escogí cinco animales, delfín, camaleón, lobo, chita y águila. Luego escogí los sujetos de prueba, dos masculinos y dos femeninos para que continuarán extendiendo los genes. Así que agregue el gen de los delfines de reconocer solo una pareja de por vida y modifique sus hormonas de forma tal que la atracción entre los escogidos fuera única y exclusiva. La intención es que sean capaces de coexistir y convivir en el exterior sin ser devorados.

>> Uno de los posibles problemas es que realmente no sabemos si desarrollarán las características programadas solamente o si serán distintas, además de posibles habilidades extras. —Volvió a beber agua, creo que en algún punto deje de ver esto como un vídeo de mi madre, para pensar que era una película de ciencia ficción—: Mi primer sujeto fue una embarazada de Asia, su nombre Sun Hee, gestante de ocho semanas. A la cual le fue aplicada varias dosis en distintas etapas gestacionales. El bebé fue de sexo masculino, con un peso normal, buen tamaño, sano, sus datos están en los demás vídeos. Nombre… Lee Yoon.

El mundo me dio vueltas, sentí que caería al piso por lo que me sujete fuerte.

—¡Por las colonias! ¡No puede ser!

Una lágrima rodó por mi rostro, lo primero que pensé fue que mi madre era una loca criminal y lo segundo fue, Lee tiene un alma gemela. El corazón se me estrujó por ese pensamiento. La grabación continuó.

—Segundo sujeto con un año de diferencia entre ellos, gestante de seis semanas de la colonia latina, varias dosis aplicadas. El sexo fue masculino, buen estado al nacer, de hecho fue un macrofeto. El nombre te lo diré después, continuemos al tercero, una gestante de ocho semanas, de la colonia africana. Nombre de la madre Kumun Dahal, le fue aplicada varias dosis y su bebé fue de sexo femenino. Buen estado de salud, nombre de la nena Anjil Duran. —Mi boca se cerraba y abría como pez fuera de agua—. Cuarto sujeto gestante de cuatro semanas de la colonia europea, nombre… Alin Meyer. —Supuse que sufriría un infarto por lo rápido que bombeaba mi corazón, al final tenía razón, yo era una aberración—. Hija tú eres el cuarto sujeto, yo… Le mentí a tu padre, lo hice sabiendo que venías en camino, de hecho, me embaracé a propósito.

>> Pero te juro que, cuando naciste me arrepentí de todo mi vida, cuando te vi tan pequeña, me decía que era un demonio y solo pedía a Gaia porque no te hubiese hecho daño. —No sé cuál de las dos lloraba más—. Pero yo fui más allá, Kim era quien te hacia los análisis y tu padre no fue el único al que engañé.