Después de que Damián se fue solo me quedé viéndolo de lejos cuando de repente escucho que me estaban gritando.
– ¡DAMARIS! Que alivio por fin te encontré, ¿y puedo saber en dónde andabas? Te busqué por todos lados pero hasta apenas tuve éxito.
Damaris: Oh... Je hola profe, ¿qué pasó? ¿Para qué me estaba buscando tan desesperadamente?
Profesor: Me dijeron por ahí que estuviste organizando esto, ¿de verdad lo hiciste todo tu sola? Vaya que sí es impresionante para una joven de tu edad, pocos son las personas que se animan a una responsabilidad así de grande.
Damaris: Muchas gracias, aunque no todo lo hice sola, recibí un poco de ayuda así que... No me llevo todo el crédito.
Profesor: Mmmm... Ya veo pero en fin, a lo que venía realmente, en unos minutos van a activar el micrófono y usted señorita como organizadora debería de dar unas palabras y si dice que lo hizo con alguien más pues deben de pasar ambos. Anda, reuna a su compañero.
Damaris: La verdad... No lo veo desde hace unas horas así que deberían de dar ya el anuncio o de mínimo hacerlo un poco en voz alta, un llamado mejor dicho.
Profesor: Tienes razón Damaris hay que hacerlo con un llamado, tengo la solución perfecta.
Damaris: A ver dígame.
– En eso el profesor se acerca al equipo de sonido agarrando el micrófono.
Profesor: Muy bien muchachitos como pueden ver necesito de su atención para darles un comunicado. Necesito a la señorita Damaris aquí conmigo.
– Trágame tierra– Pensaba al momento. No tuve opción así que fui con él.
Profesor: Esta señorita muchos la conocen y otros no, pero deben de saber que ella junto con su compañero organizaron este bello e inigualable evento así que... Debe de dar unas palabras pero no lo hará hasta merecer muchos aplausos ¡BRAVO!
– En eso escucho las palmadas que daban mis demás compañeros hasta que me tocó pasar al frente a dar unas palabras.
Damaris: H-hola compañeros, sé que no me conocen mucho porque no convivo con ustedes pero la manera que los intente hacer fue por medio de organizar este evento junto con mi compañero de clase, lamentablemente no está en el escenario conmigo aún así merece el aplauso por su total esfuerzo como dedicación a esto que actualmente ustedes están disfrutando hoy. Muchas gracias a todos y sigan disfrutando.
– ¡MOMENTO POR FAVOR!
– Escuché que alguien gritó entre la multitud.
Oscar: Dame permiso por favor Damaris, también debo de dar un pequeño discurso. – Dijo con una mirada sería.
Damaris: D-de acuerdo – Dije nerviosa.
Oscar: Hola muchachos, no me conocen mucho porque hace poco tiempo ingresé a esta linda escuela, me alegra poder haber participado junto con mi... Compañera Damaris en organizar este evento, sinceramente tardamos un poco porque estábamos atareados entre el evento y nuestras clases pero gracias a nuestros profesores por darnos la orientación y el apoyo suficiente para que esto haya salido a la perfección, merecen un aplauso ¡BRAVO!
– En eso se escuchan los aplausos.
Oscar: Pero oigan también deben de darle un aplauso a Damaris por ser ¡LA MEJOR MALA AGRADECIDA DE TODOS!
– ¿Qué está diciendo? – Pensaba.
Oscar: Damaris es la persona más mala agradecida que he conocido. Ella se enamoró de información muchacho que tan sólo ha conocido un par de horas atrás, mientras que yo me he esforzado, la he defendido, apoyado y darle todo lo que estuvo a mi alcance pero ella no le importó, solo fui una pieza más de su juego, ¿qué significó todo? ¡SOLO FUI TU BURLA! ¿Fue eso Damaris? ¡DILO!
– ¿Qué hago? ¿Qué digo? ¿Cómo se supone que deba de tomar esta situación? – pensaba angustiada.
Oscar: Tu silencio hace confirmar todo.
– ¡CALLATE MALDITO IDIOTA!
¿Eh? - Miré confundida al público.
Damián: Estás muy mal, Damaris te rechazó porque vió el verdadero ser que eres, ¿qué pretendías con ella? Por lo que veo prefieres vivir en un engaño que aceptar la realidad, además ella te siguió ofreciendo su amistad contigo pero la rechazaste y te fuiste son decir más, ¿ya te viste? Hiciste un ridículo. Te humillaste.
Oscar: Por lo que veo el príncipe anda defendiendo a su "princesa" Que hermosa historia de amor, por lo que veo soy yo el villano, ¿verdad? Por obligar a la supuesta princesa del engaño y la traición.
Damián: Debo recordarte que te dejó muy en claro lo que sentía por ti y eso fue una amistad, ahora estas quedando como un perdedor por no aceptar una respuesta, debes de madurar y aceptar que en la vida no todo saldrá con esperabas. También... Si es necesario defender a la princesa yo lo haré aunque esté lejos.
Oscar: Me estás dando asco con esas miserables palabras, no te preocupes anda con ella y ofrecele todo. Al fina te dejará marcado.
Damaris: Yo.... Yo no te mentí, tú hiciste tu propia historia pero al no esperar el final que esperabas soy la villana, ¿en que momento te mentí? Te dije que te veía como un amigo nada más. Damián... Hizo algo que jamás pudiste.
Oscar: ajá, ¿y qué fue eso?
Damaris: Enamorarme con su mirada, dicen que los ojos son la ventana del alma y te puedo decir que él tiene un brillo que jamás tendras tú. Así que sí, lo admito para que estés feliz y me odies con provecho toda tu vida. ¡ME ENAMORÉ DE DAMIÁN AUNQUE NO HAYA HECHO ESFUERZO A COMPARACIÓN TUYA! Si sigues así te quedarás como el día que llegaste aquí.
Oscar: ¿Y cómo supone que llegué aquí para ti?
Damaris: Solo...
Oscar: Eres una.... – En eso veo los ojos de Oscar llenándose de lágrimas, cambiando una mirada desafiante a una de tristeza, sin decir nada dejó caer el micrófono, me miró y se fue así dejando el escenario.
Damián: Vaya chico, sí que hizo un escándalo pero dime tú Damaris, ¿te pasó algo?
Damaris: Estoy bien... – Me quedé mirándolo perdidamente. T-te veo después... Te quiero llevar a un lugar donde me pueda perder profundamente en tus... Ojos, te buscaré después ¡ADIÓS! – Salí corriendo dejando también el escenario.
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Editado: 19.07.2024