Organización Andrómeda 5.

Un fuerte impulso obligo a mis sistema nervioso a reaccionar, de lo primero que me percaté al abrir los ojos fue que recibí un baldazo de agua helada; la segunda cosa de la que me di cuenta fue que me encontraba atada a una silla, pies piernas ajustadas con fuerza a las dos patas delanteras y mis brazos amarrados a los apoyabrazos de la silla.

Intente forcejear en un intento de liberarme, pero fue completamente inútil, las sogas habían sido muy bien ajustadas con más de un nudo para retenerme. De todos modos, ese no era un problema, el físico nunca fue mi fuerte ya que me concentre en lo mental y su control.

Cerré mis ojos y centre mi habilidad en utilizar la línea Majino para acceder a la mente de las personas, realice todos los cálculos a la perfección como lo había hecho cientos de veces en el pasado, pero en esta ocasión nada sucedió. No podía sentir la presencia de ningún pensamiento.

Volví a abrir mis ojos y una irritante risa de placer pudo escucharse a mis espaldas, me molestaba tanto escucharla que si no estuviera atada me levantaría a darle una cachetada al responsable. Acompañando ese desagradable sonido podían sentirse pasos en un piso de piedra –Oh señorita Mountbatten-Windsor ninguno de sus trucos funcionara contra nosotros – una voz masculina dijo mi apellido a mi oído por detrás. Logre sentir una mano tocar mi hombro y luego esa persona apareció delante de mí.

Al utilizar mi habilidad estrella no sentí la presencia de ninguna persona en el lugar, no me sorprendí al observar a esa persona y el motivo de porque mi poder era inútil. Un hombre alto, diría que alrededor de los 30 años, se paró delante de mí; vestía ropa algo sucia, un pantalón, una remera y una larga campera. Pero la prenda que más sobresalía era el casco que cubría su cabeza, este tenía pequeños botones a los costados sobre una superficie plateada mientras que toda la sección de la cara solo mostraba un cristal presurizado de color negro.

-¿Te gustan? – Quiso saber aquella persona en un tono de burla al observar mi cara de desagrado –Son el último modelo fabricado por la Fundación S.P. Veras, nosotros, el grupo Andrómeda te hemos estado observando por un tiempo señorita, y vimos pertinente robarnos un par de estos dispositivos para anular tu control sobre el Teorema de la línea Majino.  No podrás controlar ni meterte en la cabeza de nadie, señorita.

Había sido secuestrada por una organización criminal de las profundidades de la ciudad, lamentablemente debía decir que estaba tan acostumbrada a estas cosas que no sentía miedo, desesperación o ansiedad. Lo que sentía en mi cuerpo era más molestia por tener que perder el tiempo con otros idiotas de nuevo.

Deje salir un frustrante suspiro –Dígame señor representante de Andrómeda ¿Cuál es el motivo por el que llevo a cabo esto? ¿Quiere pedirle dinero a mi familia como recompensa? ¿Le hice algo malo en el pasado y va a vengarse violándome o torturándome? Su carta no lo especificaba.

-Oh jajajajaja no podía esperarme una reacción diferente de usted señorita – el horrendo hombre comenzó a acercarse a mi lentamente –Pero no la llamamos aquí por nada de eso, nuestros motivos son diferentes – aun teniendo a ese tipo muy cerca de mi rostro no era capaz de ver su cara detrás del vidrio del casco.

-Dijo que me estuvieron observando ¿Usted conoce de que trabaja mi familia? Creo que no querrá meterse con mi hermana mayor, la líder de nuestro clan. Vera nosotras somos cercanas y nos molestamos mucho cuando lastiman a la otra.

Aun así, aquella persona ni se inmuto, o tal vez sí lo hizo y no pude percatarme por el casco –Oh, pero claro que estamos enterados sobre eso, pero una vez que usted decida colaborar con nosotros, una de los tres líderes del culto de la ciencia no hará nada contra nosotros.

Desde lo más profundo de mi interior no pude evitar reírme al escuchar lo que este imbécil me decía –Ay discúlpeme, es que en serio fue gracioso lo que dijo ¿Por qué yo colaboraría con ustedes?

De una manera que me molesto mucho ese extraño sujeto comenzó a acariciar mi cabello como si fuera algún animal, mis impotentes ganas de golpearlo o escupirle en el rostro incrementaron demasiado –Pues vera señorita, nos imaginamos que usted querría colaborar con nosotros por el bienestar de su amiguito.

Ambos nos encontrábamos en un lugar completamente oscuro, nuestra única fuente de luz provenía de una pequeña lámpara sobre mi cabeza. Pero eso cambio cuando otra lámpara se encendió por encima de la cabeza de alguien más, a mi lado se encontraba otra silla con otra persona atada. Un chico pellirrojo e inconsciente estaba ahí, el suelo que lo rodeaba está cubierto de sangre, pude observar cómo algunos de sus dedos estaban quebrados y su rostro estaba hinchado y con grandes moretones de un color violeta muy oscuro. En su ropa también llena de sangre, parecía haber pequeñas piedritas blancas, solo rogaba que no se tratara de sus dientes.

-¡Que enfermo hijo de puta que eres maldito mierda! – esa no era la reacción que quería tener, pero fue la que surgió de mi interior.

-Debo admitir que nos sorprendió mucho la lealtad que este Nebula Trail le tenía a alguien como una escoria del sistema de capacidad 2. Le hicimos muchas preguntas sobre usted y siempre contestaba que no lo sabía, ni la tortura hizo mucho efecto y termino desmayándose por la pérdida de sangre.

-Ya me entregué así que libérenlo ¡YA! Él no tiene nada que ver con esto.

-Me temo que él tiene mucho más que ver con esto de lo que usted piensa señorita.

Utilice toda mi fuerza para intentar soltarme de mis ataduras, aunque fue completamente inútil –Está bien, está bien ¿Para qué mierda me necesitas pedazo de enfermo?

-Vera señorita, varios de los miembros de nuestro grupo dirigen residencias estudiantiles de Nebulas Trails. Nosotros requerimos su voluntaria participación para que nos ayude a someter a aquellos que no estén tan en concordancia con los ideales de nuestro grupo.