Experimentos Proyecto Revelacion

Capitulo XXXIV La Variante

Trent

Era oficial ahora yo era él nuevo Doce. Un bobo obligado a permanecer en silencio. Y todo porque le tenía miedo…,

—¡Ahí está! — …al impredecible comportamiento de Dae-hyun— ¡Lo encontré!.

Ahora estaba feliz, luego de haberme hablado como el agente Clint solía hacerlo. 

Ya puedes ir, sí lo deseas Trent y Cero por fin me dio la señal que había esperado.

Quería ayudar, a pesar de que todo mi ser me rogaba por que me alejara del tipo que ahora actuaba escandalizado por algo que en cuanto lo vi no supe cómo tomarlo porque no se trataba de algo que no había visto en todo el tiempo que he vivido en La Jungla. 

—No puede ser —el solo verlo me provocaba sentirme confundido— ¿Pero qué rayos es eso?

—Nuestro boleto de salida.

Era imposible de creer que Dae-hyun no estuvo picando un pedazo de roca, sino más bien anduvo raspando cuatro líneas que juntas formaban la figura de un rectángulo. 

—¿Y todo eso estaba debajo de las cosas de Scott?

—De su manta, para ser exactos.

—Por eso eligió ese punto —Tenía demasiadas dudas, pero Dae-hyun no parecía estar interesado en seguir respondiendo. 

Él estaba tan concentrado en ver ese punto que no se dio la libertad de mirarme, al momento que me habló, o siquiera enfocar su atención en el hecho de que la cueva comenzó a temblar, lo que trajo consigo un ligero desmoronamiento.

—¡Cuidado! —Afortunadamente atrapé una roca, de diez centímetros, que estuvo a punto de golpear su cabeza—. Casi —Pensé que me lo agradecería.

Pero su mirada seria hablo por si sola.

—¿Qué? —Un rostro, incapaz de reflejar el sentimiento de empatía.

—La roca —pero yo me dispuse a responder—. ¿No lo viste?

—¿De qué hablas?

—Esta roca estuvo a punto de golpearte en la nuca. 

—¿Y? —su mirada se volvió más fría, como sí no estuviese esperando a que yo lo ayudara.

—¡Mira! —pero en cuanto estuve a punto de golpearlo noté que otra roca más iba dirigida a él.

¡Trent! la cual atrapé…

—De nada — …a pesar de que no escuché la palabra “gracias”.

Dae-hyun me miró durante unos cuantos segundos más y después volvió a concentrarse en el rectángulo, como sí se tratase de alguien incapaz de agradecerle al compañero que evitó dos rocas…

¡Trent! …quiero decir que tres rocas le fracturaran el cráneo Sabes, mejor deberías vigilar.

—Está bien —Quién diría que así es como lograría hacer algo distinto.

Por fin tenía una idea de lo que estaba ocurriendo, pero no podía hacer otra cosa porque Dae-hyun era él único que entendía todo lo que estaba ocurriendo, o al menos eso parecía. 

Durante casi diez minutos él se mantuvo en silencio, mirando el rectángulo, sin darle importancia a lo que ocurriera en nuestro entorno; acto segundo tomó el cuchillo de Scott y lo enterró sobre la línea horizontal que estaba delante de su pierna derecha, después lo empujó en sentido contrario para impulsar la piedra, como sí fuese una palanca, logrando así quitar la pieza que protegía una pequeña compuerta.

—No puede ser —Era difícil de creer.

Scott había escondido una compuerta debajo de su manta. 

Una abertura cubierta de tierra, con una gran caja de madera en el centro.

—¡Lotería! —eso trajo de regresó al Dae-hyun feliz… 

—¡Por el amor de Dios! — …y al Trent dudoso…— ¿Pero qué demonios es eso?

—Una escotilla.

—¿Cómo que una escotilla…?,  ¿Acaso es una salida?

—Así es.

—Pero sí eso es imposible.

—Dicen que nada es imposible.

—Esto sí…, dime de donde rayos salió. 

—Siempre ha estado ahí, Trent.

—¿Y por qué nunca lo vimos?

—Scott debía cubrir la tapa y mantenerla alejada de nosotros, por esa razón nos dijo que en caso de que alguien desapareciera nosotros debíamos honrar su memoria manteniendo sus pertenencias en el lugar que eligió colocarlas.

—Esto tiene que ser una maldita broma —Mientras que Dae-hyun continuó sonriendo yo me sentí sorprendido porque esto era diferente a todo lo que ya conocía.

Nadie me había hablado sobre esto.

Ni siquiera Scott.

—¿Y al menos funciona?

—Eso creo.

—¿A qué te refieres?

—Primero debo quitar la caja que cubre la cerradura.

—¿Acaso necesitamos una llave?

—No, por la forma que tiene supongo que debe ser un volante o quizás alguna palanca, como quiera primero debo retirar todo el polvo para asegurarme de que no esté oxidada.



#2533 en Ciencia ficción
#7085 en Thriller
#2752 en Suspenso

En el texto hay: misterio, dinosaurios, nieba

Editado: 26.06.2024

Añadir a la biblioteca


Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.