Experimentos Proyecto Virtud

VI

Supongo que eso ya aclara muchas cosas Cole quedó sorprendido, ahora que por fin teníamos una idea de lo que podrían estar tratando de hacer conmigo. Y qué tanto te duele la cabeza.

“Demasiado” en cuanto abrí los ojos sentí un profundo ardor “Te lo juro, siento como sí una bomba hubiera estallado en la cabeza”.

Por favor, Doce. No seas tan dramático.

“A qué te refieres” 

Sí eso hubiese pasado ya estarías muerto y ahora resulta que Cole también sabía cosas del cuerpo pero eso no importa. Por ahora necesito que me digas qué otra cosa más recuerdas.

“Nada”

Cómo que nada.

“A que no puedo recordar otra cosa” me era difícil pensar en algo, teniendo ese dolor de cabeza. “Siento que todo está en blanco”.

Eso no suena bien, Cole reflejó un pequeño detalle de empatía, en sus palabras, como sí pudiera entender todo lo que estaba sufriendo por culpa de este odioso dolor que no me permitía recordar más.

En cuanto abrí los ojos oí la voz de Cole en mi mente; dejé de sentir el ardor de la herida, suspire y al ver mejor mi entorno sentí como los recuerdos de esa simulación entraron en mi mente junto con ese insoportable dolor de cabeza. 

Todo eso respondió a la pregunta con respecto a lo me había inyectado antes de desmayarme. Y Cole dijo que descubrió el efecto de la primera droga que me inyecté luego de ver un detalle en mi que yo note al ver mis manos, las cuales ahora estaban sanadas, como sí nunca me hubiese cortado con el cuchillo que ahora permanecía en el suelo sobre un charco de sangre. 

"Esto es imposible" al sujetarlo lo observé detenidamente, como sí fuese un nuevo juguete "Es hermoso”. Era más grande que el que tenía en La Jungla, su navaja al igual que el mango eran de color negro y no llevaba algún numero grabado “Les molestará si me lo llevo" 

En ninguna parte dice que no puedes.

"Genial, ahora tengo un arma" aunque no podía decir lo mismo “Oh rayos” de la chaqueta que me dieron.

Relajate la chaqueta ahora estaba cubierta de sangre coagulada y polvo. No creo que la necesites.

“Sí, pero tenía estilo”

Quizás después te den otra.

“Sí es que logró salir de este infierno”

Me temo que así son las cosas Doce, pero dime cómo te sientes.

“Qué quieres que te diga”

Aun te duele la cabeza 

“No mucho” el ardor bajó en cuanto ví el cuchillo, como sí el verlo hubiese distraído mi mente del dolor que parecía no tener fin. Y después de haberme quitado la chaqueta ya no lo sentía de la misma forma. 

Eso es bueno Cole anhelaba respuestas que yo no podía darle porque no podía recordar más, como sí hubiese algo en mi mente que me impidiera hacerlo. Y aunque pudiera recordarlo no tenía tiempo para darle importancia a eso ahora que tenía delante de mí el camino que debía continuar Sí quieres podemos hablar de otro tema, relacionado con eso.

“Como gustes” Tal vez no era una plática perfecta, pero al menos fue un entretenimiento básico mientras recorría los cavernosos pasillos. 

Cole y yo estuvimos hablando sobre los posibles efectos secundarios que ahora podría estar experimentando, debido a que probablemente la droga podría tener resultados similares a los de la sustancia de Xavier, que era capaz de devolvernos la memoria; era por esa la razón que Cole estaba interesado en todo lo que pudiera recordar, incluso las sensaciones. 

Eso sí podía recordar, pero no quise entrar en detalles específicos porque me era difícil explicar con palabras esas extrañas, confusas y aterradoras sensaciones que comenzaron en cuanto desperté dentro de un cilindro y ví a la mujer que volvió de los últimos años de mi vida un infierno, contemplando mi persona, como sí fuese una cosa que estuviera fabricando; eso superó cualquier otro daño que La Zona me hubiese hecho, porque se relacionaba más con el pasado que ellos me habían arrebatado.

Cuando el proyecto EXPERIMENTOS aún no existía. 

Y quieres hablar más de eso. O simplemente pudieron ser mentiras, como siempre. 

“La verdad no” 

No hay problema.

“Estás seguro”

Por  supuesto. Entiendo que esto puede ser difícil para tí, porque tu mente está tratando de procesar lo nuevo y no te sientes capaz de aceptarlo.

“Pero por qué pasa eso”

No sé mucho de psicología, Doce, pero por tus reacciones yo supongo que eso puede ser una parte de tí que no quiere aceptar la verdad.

“Y cual es esa parte”

El miedo.

“¿El miedo?”

Así es.




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