Es así como cerramos estas pequeñas historias que, sin dudas, sé les dejarán un aprendizaje a cada uno de ustedes.
El conocimiento popular del reino viene principalmente de experiencias que nuestros ancestros tuvieron, de las cuales siempre se trataba de aprender algo, de hacer que la historia valiera la pena lejos del morbo o la curiosidad de saber un hecho que puede tener poca o cero relación con quienes lo escuchaban.
En lo personal, creo que las fábulas contribuyen en muy buena parte a los buenos valores sobre los que está construida nuestra sociedad, y funcionan debido a que son simples, cortas y muy ligeras. Al menos yo las recordaba un poco más extensas, por lo que traté de acortarlas tanto como pude en favor de que los jóvenes puedan digerirlas de manera más eficiente y entender la moraleja de éstas. Dichas sé les serán de gran provecho a lo largo de sus vidas.
Joven ciudadano, atiende bien las necesidades del reino. Sé un buen ejemplo de los que te van a preceder en un futuro y no olvides que tu raza es muy importante. No sobrevivimos peleando entre nosotros, no conseguimos este reino gracias a las demás bestias, sólo con nuestro puro esfuerzo. Es por eso que poseemos el valor del sacrificio y se nos reconoció sobre los demás.
Es importante tener buenas relaciones con las otras razas, pero sólo eso. La amistad verdadera es entre un hermano gato y otro, no más y ciertamente no menos.
Gracias por su atención y procuren pasar este texto a los más jóvenes en su momento. Que las buenas costumbres de nuestro reino no se pierdan jamás.