Falla de amor

El 506


Ya había llegado la tarde, la batería de mi tablet iba por el 20%, creo que debo de cargarla más seguido, generalmente no la uso tanto pero como mi laptop esta en reparación no me queda de otra.

Definitivamente necesito un descanso. No he podido estructurar todavía la primer idea de las tantas que le debo presentar a Jack en 7 días, contando el de hoy. Nunca mi mente había tenido tantos problemas para imaginar, no se que le pasaba hoy.

Deje cargando la tablet en el sofá y me fui hacia mi habitación, tenía que arreglarme un poco para estar presentable para ir donde Danna. Ella podría decirse que es algo así como mi mejor amiga desde hace un año y medio, es quien conoce mi secreto aparte de Jack y la editorial.

Todos mis lectores me conocen con el pseudonimo de lex_fear21, aunque esto hubiera cambiado y sabrían quien soy si la sección de autógrafos de hace dos meses no se hubiera cancelado.

Pero en fin, la amistad que tenía con Danna se hizo estable por que conocía mi secreto y para sorpresa mía le gustaba lo que escribia.

Fue muy gracioso cuando lo descubrió. En esta residencia toda la correspondencia llega a portería, ese día el celador le pidió a Danna que me entregará el sobre sellado que me había llegado, amablemente subió del cuarto piso a mi apartamento con el sobre, le dije que me esperara mientras le traía unas galletas que había hecho, mientras iba por ellas decídi abrir el sobre y no se si fue mi pequeño chillido de emoción o la olla que se cayó lo que la hizo entrar preocupado pensando quizá que en el sobre venía una amenaza de muerte o algo así me dijo después, el hecho fue que vio el contenido del sobre con la notificación de una posible publicación en físico de mi trilogía que iba en ascenso en ese tiempo cosa que solo sucedió medio año después, quien sabe por que.

Estando frente al 404 la puerta se abre y una chica delgada de piel trigueña ojos marrón y cabello crespo castaño me sonríe y prácticamente me jala dentro de su apartamento. Me quito la chaqueta y le paso la caja con los cupcakes que había comprado para ella. 


—Feliz no cumpleaños —le digo en un tono burlon.

—¿Cuando vas a dejar de decirme lo mismo cada vez que vienés acá? - me reprocha.

—¡Fácil! Hasta que dejes de pedirme que te traiga cupcakes de presente cada vez que vengo —le respondo fácilmente mientras me siento en una de las sillas que esta rodeando la mesa.

—Sabes que puedo traerte otra cosa, ¿verdad?

Mi amiga deja la tetera en el centro y empieza a acomodar los cupcakes. 

—Sabes que para mi los cupcakes son los que mejor combinan para mi fiesta de té junto con las galletas que trae Mary. —toma asiento mientras ve la hora en su reloj de mano.

—Si... Creo que no te lo he dicho, pero cada vez que vengo me siento como si estuviera en la fiesta de te del sombrero —ella me mira y se ríe suavemente.

—Pues en ese caso pido ser Alicia —su voz alegre resuena en el lugar.

—Ese papel va para el último en llegar, en tu caso serias el sombrerero ya que eres la anfitriona de la fiesta. 

No se dice otra palabra ya que el timbre ha sonado, debe ser Alicia que llega para unirsenos.

En realidad hay más de una Alicia, junto con Mary mi otra amiga, llegan otras dos chicas del edificio, así completamos el quinteto que se reúne cada fin de mes en la casa de Danna.

Es una rutina a la que me uní meses después de volverme amiga suya. Los temas a tratar eran variados y se ponían según la urgencia del asunto, aveces se hablaba de problemas entre vecinos, falta de algún servicio básico, eventos a realizar y cualquier otro que se presentase, pero el que si están de ciento son los chismes.

Aunque mi personalidad es más reservada nunca me aleje de estos encuentros, era la forma en la que más interactuaba con alguien fuera de la editorial.

Ya llevaban una hora hablando sobre un pequeño evento de San Valentín que harían para ahorrar fondos y mejorar el jardín y área verde de la residencia y si que le hace falta.

Culminados los últimos detalles y una de las chicas que llegó con Mary toma la palabra para iniciar la sección de chismes del día.

—¡Chicas!, a que no saben quien es el nuevo inquilino del edificio —habló emocionada. 

Por "nuevo" podría decir que no hablan de mi piso ya que allí llegó fue una mujer y no un hombre, así que descartando tendría que ser alguien en el segundo o sexto piso ya que son los otros donde hay apartamentos libres. 

Mi teoría queda falsa cuando la morena continúa después de que Danna le pidiera los detalles.

—Es un bombom, si tan solo lo hubieran visto esta madrugada a eso de las 6 am que llegó, aunque por la chaqueta y gorro que llevaba no se podían ver totalmente sus atractivos, les aseguro que guapo es poca palabra para el. Ahh estoy tan celosa de Alexa

Aunque lo que dijo no era para tanto, mi reacción si lo fue. 
—¡¿Como?! —fue lo primero que dije

—Que eres una suertuda Alexa, el bombom se mudo al apartamento que está junto al tuyo. 

Eso no podía ser, si lo que yo vi fue una mujer y no un hombre, a menos que..., claro debe ser una de esas pocas personas que existen con manías raras, si puede ser, quizá en el día se viste de mujer y en la noche de hombre, pero.. no, este debe ser un caso distinto. Supongo que estar imaginando y estructurando tanto para mis nuevas historias me está sacando de onda. ¡O si!, esto quizá me servía para una idea de las que tengo que presentar a Jack, si la arreglo bien puede funcionar.




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