Te he amado desde que teníamos 18

3:45 am

Un piano resonaba en el cuarto donde se encontraba Erick, era él quien lo tocaba Lo había aprendido de su padre, era su forma de desahogarse junto con una copa de Whisky, pero se encontraba tan frustrado que se equivocaba en cada nota. La puerta principal sonó era Jone, había llegado borracho, Erick se paró con una expresión de alivio.

—Llegaste. —Hablo Erick.

—Llegué — Respondió Jone con una sonrisa, tumbándose en sus brazos.

Erick quería preguntar muchas cosas, pero al sentirlo en sus brazos se sentía tan aliviado, sentía que era suyo.

—Jone.

—¿Mm?

—¿Qué sientes tú por Alexa?

Jone se sorprendió por esa pregunta, se alejó de Erick para mirarlo a los ojos con una expresión confusa.

—¿Por qué la pregunta?

—Solo responde — Erick respondió con rudeza.

—Alexa para mi es solo una amiga, la veo como una hermana, a veces siento que la conozco desde hace mucho tiempo, como si estuviéramos conectados es algo raro, pero es solo eso. Solo una amiga más, como pequeña hermana que nunca pude tener.

Los ojos de Jone brillaban cuando hablaba de Alexa, y sonreía de una forma hermosa como si estuviera describiendo a un ángel. Las inseguridades de Erick incrementaron, se sentía demasiado celoso, quería reclamar, quería exigirle que se mantuviera alejado de ella, pero sabía que no podía hacerlo, hace mucho tiempo que Jone no se encariñaba así de una persona, sus amistades son muy superficial, era la primera persona con la que se abría desde aquel incidente, no podía quitarle a su amiga, él no iba hacer un estorbo para su felicidad ni mucho menos para su vida.

Pero tal vez no lo podía separar, tal vez no le podía exigir que se alejara de ella, pero si podía hacer algo y era seguir luchando por su amor. Aunque a su corazón le pertenecía él, así como su cuerpo, no iba a dejar de seguir luchando por su amor.

—Prometo luchar por tu amor toda la vida — Respondió Erick con una sonrisa, Jone se extrañó aún más, estaba muy raro pero aquellas palabras lo hicieron feliz.

—¿Estaremos juntos por siempre? — Pregunto Jone.

—Hasta que la muerte nos separe — Respondió Erick sellando el juramento en sus labios.

La noche se hizo día, las horas pasaron y Erick y Jone se encontraban en un yate rumbo a su destino que era un pueblo en una isla, era como su escape para los dos de la realidad, los dos se encontraban más que felices, conversando y riendo recordando sus vidas.

—Erick, ¿Cuándo te enamoraste de mí? — Preguntó Jone con entusiasmo mientras jugaba con los dedos de la mano de Erick.

—Mm, creo que desde que tenía 18, te he amado desde que teníamos 18. — Respondió Erick mirando los ojos de Jone fijamente. La tensión se rompió cuando Jone rio ante el comentario de Erick.

—¿En serio? Yo pensé desde que teníamos 8.

Erick también sonrió.

—¿Fui tan obvio?

—Un poquito.

Los dos sonrieron mientras se besaban.

—Tienes razón, te he amado mucho antes de que los dos pensáramos lo mismo. —Hablo Erick.

—Lo único que puedo decir es que estos brazos fueron hechos para abrazarte. —Respondió Jone.

Erick acariciaba el rostro de Jone mientras su corazón palpitaba como loco, peinaba su cabello y besaba cada rincón de su cara, cada peca escondida en su rostro, mordiendo levemente sus mejillas.

—Jone siento que este es el momento perfecto.

—Claro que lo es, el atardecer es hermoso, el viento, la vista y porque estoy contigo todo es perfecto.

—Y se puede volver aún más.

—¿Aún más?

Erick sacó un anillo de su bolsillo, arrodillándose ante Jone, el sol que se escondía se reflejaba en los ojos de Erick, un cielo pintado de púrpura y estrellas que empezaban a salir fueron testigos de una propuesta.

—Jone ¿te casarías conmigo?

Te he amado desde que teníamos 18

Fin

Música: One Direction - 18