Un hijo después de una separación? Pues si, eso le paso a mis padres. Soy Mia y esta es mi historia.
Desde pequeña supe que mis padres no estaban echos el uno para el otro, siempre los oía discutir por cualquier cosa, yo era tan pequeña que por mi cabeza nunca pasó que eso podía llegar a mayores. Un día como cualquier otro, después de haber jugado con mis vecinas, recogí mis juguetes y fui a la habitación para ver mi programa de televisión favorita "Soy Luna", mis padres estaban allí también hablando, o eso supuse yo. No recuerdo muy bien de que hablaban, llegaron al punto de empezar a gritar, mis nervios se dispararon pero los disimule como siempre; me quede callada en la cama simulando ver mi serie, pero sus gritos se hicieron más y más fuertes, nunca pensé que lo que iba a pasar en poco marcaría mi infancia para siempre.
Vi a mi madre caer al suelo de la manera más fea posible y luego levantarse para caer y golpearse la cabeza con un escalón en la entrada de la habitación, luego sin pensar dos veces mi padre se acerco y empezó a presionar su cuello fuerte, yo estaba de pie en la cama con las manos en mi boca, estaba en shock, asustada de lo que estaba viendo, sin saber como grite:
-¡SUELTALA!- dije con mi voz entre cortada y mis lagrimas bajando
Fue ahí cuando la soltó, dejandola en el suelo recuperando la respiración, me acerque rápidamente para ayudarla a levantarse, tenia miedo de que no estuviera bien, tenia seis años en ese entonces y fue la primera vez que vi a mi padre golpear a mi madre de esa manera tan feroz, a partir de ese momento empezaría mi infierno y mi infancia se iría al demonio.
Pasaron los años y a los nueve nos mudamos para Colombia, en busca de mejores oportunidades, porque si, somos de Venezuela.
Al llegar aquí pensé que todo cambiaría, que equivocada estaba, empezaron las peleas por infidelidad por parte de mi padre, volvieron las discusiones constantes y nuevamente los golpes, gracias a eso deje mis emociones a un lado, guarde mis sentimientos y mis lagrimas, no eran importantes, eso me hizo madurar a tan temprana edad.
A los casi diez era lo suficiente madura para entender que no era un buen ambiente para un niño de mi edad, donde existía la violencia y ellos creían que con tener intimidad todo se solucionaba, pero no entendían todo el daño que me causaban.
Actualmente estoy viviendo en algún lugar cálido de Colombia, siento paz por no tener que escuchar cada uno de sus gritos y sobre todo ahora...
A los quince años me entere que mi madre estaba embarazada,fue la mejor noticia de mi vida, siempre desee un hermanito y me alegraba que ahora lo iba a tener, pero no solo por eso, si no que también porque no iba a nacer en un ambiente contaminado como lo viví yo, iba a nacer en un lugar lleno de amor, felicidad y sobre todo respeto.
Cuando mi padre se entero del embarazo de mi madre le dijo:
💬: "Voy a viajar para estar con ustedes"
Cualquier otro niño se emocionaría porque tendría a su familia unida, pero yo no, me llene de impotencia y le dije a mi madre:
-No, no mamá, ese bebé no va a pasar por lo mismo que yo, el si merece un infancia que recordar-
Mi madre se me quedo mirando perpleja, pero después de una conversación le dijo a mi padre:
💬: "No te preocupes, no es necesario que viajes para estar aquí, decidí seguir con el embarazo normal pero el bebé nacerá en un ambiente sano"
💬: "Pero amor, el bebé tiene que nacer y estar los dos juntos"
💬: "No le vamos a generar la misma inseguridad que le generamos a Mia, ella fue la que más sufrió en todo esto"
Mis padres siguieron hablando de cosas para el bebé y me sentí bien porque a pesar de esto, mi pedacito de amor iba a nacer en un ambiente sano.
Editado: 28.12.2025