Capítulo 12 - El Forastero -

Los días pasaban enfrente de mí, como una ráfaga de viento tan rápido y sin notar como desaparecía. Extrañaba esos momentos cuando descansaba en el gran campo verde.
Después de lo sucedido con la Señorita y el Caballero Andris, mi hermano no paraba de practicar en la casa desde que llegamos, les platico a nuestros Padres y a las demás personas que conocía lo que había sucedido.

- ¿Y qué pasó después? - (Niña)

- Si cuéntanos más - (Niña)

-¿Acabaste con todos ellos? - (Niña)

- Eso es obvio mi hermano es fuerte - (Sophia)

- Es súper fuerte ¿Verdad que si? - (Matías)

- Ya déjenlo contar la historia - (Lucía)

-Bueno el enemigo me tenía acorralado, el caballero no podía hacer nada y la señorita se encontraba detrás de mí para que la protegiera...

Estuvo así todo el día, no paraba de hablar de ese momento, tanto era así que en las noches Gray no paraba de decir:

- Señorita... Qué bonita... Cabello bonito... - Espero que yo no me haya escuchado así, es vergonzoso.

A la mañana siguiente fuimos Gray, Padre y yo a la Santa Sede, Gray tenía que ver al caballero de nombre Andris y Padre quiso acompañarlo para ver y hablar con él caballero también, yo igual quería ir pero tenía que ir a trabajar con él viejo Aldous, por lo que me perdí todo lo que sucedió en ese momento.

Cuando llegue a la casa, mis padres y Gray estaban hablando de la plática con el caballero, pero cuando llegué solo alcance a escuchar a Padre decir:

- De acuerdo hijo, entonces guarda tus cosas pero... Solo lo esencial - (Padre)

Después de decir eso, Madre estalló en llanto, debió ser duro para ella saber que Gray se irá antes de tiempo.

Todo fue muy raro, Gray no me habló toda la noche, quizás también estaba triste de dejar a la familia pero tenía que cumplir su sueño.

Fuimos a los límites del pueblo a despedir a Gray, ahí ya lo estaba esperando el caballero Andris para llevárselo.

- Gray puedes despedirte antes de que nos marchemos - Dijo Andris, a lo que Gray pasó con cada uno a despedirse.

- Cuídense mucho Matías y Sophia, no peleen y ya dejen en paz el cabello de Lucía ¿Está bien? - (Gray)

- No prometemos nada, pero lo intentaremos - Los dos hablaron al unísono y abrazaron a Gray, una escena muy tierna.

- Lucía trata de disfrutar más tu infancia y divierte más, aun eres una niña no lo olvides ¿de acuerdo? - (Gray)

- Lo entiendo hermano, lo haré, en serio - Con lágrimas en sus pequeños ojos, Lucía abrazo a Gray.

Después de terminar con ella se dirigió conmigo, no sabía cómo reaccionar después de que no me hablara anoche.

- Hermano... - Hubo un silencio por un momento, los dos no sabíamos qué decir.

- Cuídate mucho, ahora eres el mayor de la familia, cuando no este Padre, tú serás el responsable de ellos - No sabía que decir, ahora de un momento a otro siento que estoy a cargo de algo mucho más importante que mi propia vida.

- Lo haré no te preocupes - (Katsuo)

- Prométemelo... Por favor - Al ver la urgencia de Gray al decir esas palabras, comprendí que algo iba mal, ese algo me decía que tal vez no lo volvería a ver... Me aclare la garganta y dije con toda seguridad...

- Lo prometo... Hermano - Al cabo de decir eso, Gray me abrazo, no era como cualquier otro abrazo, este se sentía especial por alguna razón.

- Recuerda lo aprendido hijo, nunca distraerse en una batalla, no voltees atrás y con la mirada en alto, sigue tu camino - (Padre)

- Lo haré Padre, no lo olvidaré - (Gray)

Padre coloco ambas manos en los hombros de Gray, y con una mirada y una pequeña sonrisa se despidió de él.

- Te extrañare mucho hijo - Madre de inmediato abrazo a mi hermano y le dio algunos besos... No podía dejar de llorar y no podía soltarlo.

- Yo también Madre, te extrañare mucho - (Gray)

- Ahora que estarás allá... come bien... cuida tu limpieza personal y... Disfruta las pequeñas cosas de la vida... aunque sean insignificantes... por favor hijo nunca olvides que te amamos... pase lo que pase - Madre apenas podía hablar sollozaba entre sus palabras.

Inmediatamente después de que se despidió de Madre, Gray se dirigió con él caballero Andris para así irse con él.

- Gray... Si tienes algo que decir o quieres llorar, este es el momento de hacerlo - (Andris)

-..... - (Gray)

Después de ese corto silencio, Gray dio la media vuelta y corrió de vuelta con nosotros.

- ¡Lo siento mucho! ¡Los amo a todos! - Gray gritaba mientras su rostro se convertía en un río de lágrimas, a lo que nosotros contestábamos y respondíamos a aquellos sentimientos que teníamos. No sé cuánto duramos así, Andris solo espero y no dijo nada, era como si supiera que necesitábamos este momento en familia.

Después de todo lo anterior, vimos las siluetas de Andris y Gray desvanecerse poco a poco mientras continuaban su camino.
..............

Ya habían pasado dos años desde que Gray se fue de la casa, la vida seguía normal aquí en el pueblo, nada había cambiado, al igual que antes cada cierto tiempo bandidos nos atacaban, pero Padre siempre los alejaba, habíamos tenido suerte de que no hayan atacado mientras Padre estaba enfermo. Debido a esto Padre poco a poco comenzó a enseñarme lo básico para poder defender al pueblo.

- Levanta más la guardia, ponte más erguido, el brazo derecho sostenlo un poco más donde lo tienes, los pies no tan separados - (Padre)

Era algo estricto con sus enseñanzas y me hacía repetirlo varias veces en el día. Cada vez que terminaba mis labores con Aldous, mi papá me entrenaba, si lo comparó a como entrenaba a Gray, conmigo era un poco menos duro.

- Vuelve a repetir los movimientos - (Padre)

- Si - (Katsuo)

- Woao ¿Cómo hacen esos movimientos? - Detrás de mi sonó una pequeña voz, era Maira quien acababa de llegar con nosotros.

- Oh hola Maira ¿Cómo estás? - (Katsuo)

- ¿Vienes a ver a Lucía? - (Padre)