Felicity: Una Niña Maravillosa

El Inicio del Fin

Abrió sus ojos llenos de lágrimas, el cuerpo le dolía debido a que había permanecido en el suelo. Se levantó aún con su uniforme de la escuela completamente desconcertada, no sabía que había ocurrido, como había llegado a casa… no entendía nada.

-Felicity mi amor, es hora de cenar- por la puerta entró su madre

-¡MAMÁ!- sonreí y corrí a ella a darle un abrazo- Eres tú, estás viva… te puedo sentir mamá te extrañé muchísimo

-Felicity, ¿De qué hablas?

-Mamá estuve en un lugar muy extraño, no vas a creer que soy Princesa en un reino llamado Andarg. Yo tampoco pude creerlo cuando llegué ahí pues todo parecía imposible… pero después conocí al Rey Dalkar que en realidad era mi tío, pero para ser sincera se parecía muchísimo a Papá, hasta en cómo me miraba y me hablaba.

Ahí mis verdaderos padres estaban muertos, la reina Xoxnet era igualita a ti mamá y mi padre por como lo vi en la enorme pintura del castillo era igual que papá.

-Felicity, solo fue un sueño no digas tonterías…- Su madre la miró extrañada y un poco asustada

-No mamá no es una tontería, ahí conocí a Peé, era una criatura del bosque, se supone que no era una niña ni un niño- comenzó a reírse fuertemente- en realidad yo tampoco lo entiendo.

Había una mujer la reina Armeris, nunca esperamos que ella fuera la sobrina de Zerrel, luego te contaré esa historia mamá pero ella quería matarme… incluso me hizo daño pero al final en la guerra que hubo salió corriendo con su verdadero amante, me hubiese gustado matarlos. Ella es una porquería de persona mamá, mira lo que me hizo- Felicity se subió la manga de su blusa y le enseñó la cortada que había realizado la reina Armeris en su mano

-¡Dios mío!- Sara Field se tapó la boca con ambas manos mientras de sus ojos caían lagrimas

-Ya se mamá es horrible, pero la señora Harshen me curó y me ayudo siempre, los moretones también me los curó

 -¿De qué moretones hablas Felicity?- Sara la tomó del brazo y alzó su playera

Ahí vio los moretones los cuales ya se veían entre morado y verde, como si acabaran de hacérselos.

-¿QUÉ TE HICISTE FELICITY?, ¿DIME QUÉ INTENTABAS HACER?- comenzó a gritarle mientras la tomaba de los dos hombros y la sacudía

-Mamá yo no fui, te estoy diciendo que fue la reina Armeris…

-Sara la tomó del brazo y bajaron las escaleras, ella no podía dejar de llorar… todo parecía indicar que Felicity había intentado suicidarse y hacerse daño. La señora Field estaba preocupada y lo único que pensó en ese momento fue llevarla con su psiquiatra el Dr. Bennet.

El doctor Bennet dio la última palabra, parecía ser que Felicity estaba presentando signos de locura e ideas suicidas así que decidieron internarla en un hospital Psiquiátrico hasta que presentara una mejoría en las alucinaciones que está teniendo.

Aquí el problema Dra. Ingrid es que ella se niega a hablar con nosotros, nos contó toda la historia pero después de cierto tiempo dejó de hablar… parece ser que está molesta pues no le creemos y pensamos que está loca…- Pronuncio el Sr. Johnson uno de los involucrados

-Es decir que ella se niega a hablar, pero sigue segura de que todo lo que ocurrió fue real- contestó la doctora mirando la historia clínica de Felicity 

-Creemos que si una mujer le atiende puede tener un poco más de confianza podemos seguir avanzando… ya llevamos casi 2 años con ella y su tratamiento.

-Me resulta un caso complicado, me gustaría poder verla, poder hablar con ella y saber cuál es esa historia que tanto repite, ¿Qué hay de su madre?

-Ella sigue visitándola siempre, la señora  Sara Field se está muriendo de tristeza de ver a su hija así. No ha tenido avances durante estos dos años y ella está desesperada… Imagínese su esposo murió en la guerra y su hija está internada, pobre mujer…

-Muy bien, entonces me acompañan a ver a la paciente, quiero conocerla.

-Por supuesto

El Dr. Johnson y la doctora Ingrid se pararon de las sillas y caminaron por los pasillos blancos del hospital, llegaron a una puerta de madera y entraron a una pequeña oficina, esto no era ni más ni menos que una cámara de Geselle en la cual se encontraba Felicity sentada.

-Hola Felicity, soy el doctor Johnson, te quiero presentar a una amiga mía, ella es la Dra. Ingrid y hoy vino a platicar un poco contigo.

Felicity ni siquiera volteo a mirarlos, con su cabeza gacha y su cabello tapándole el rostro tarareaba una melodía, era una especie de canción que nunca había escuchado ni el doctor ni la doctora ya que esa era la canción de la reina Xoxnet.

-Las voy a dejar solas, cualquier cosa estaré afuera- el Dr. Johnson salió de la habitación y cerró la puerta lentamente

-Hola Felicity… ¿Cómo estás?- ella tomó asiento en la silla frente a Felicity

Nuevamente Felicity no contestó, no se sabía si era porque no quería o simplemente porque se encontraba demasiado drogada con los medicamentos que le suministraban.

-Me contaron que te pasó algo increíble, que en realidad tú eres una princesa de un reino muy lejano a Inglaterra, ¿Es cierto?



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En el texto hay: fantasia, magia, amistad

Editado: 19.07.2021

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