Tienda de Noctis y Prompto.
Después de apagar la fogata y acomodarse en sus tiendas, el campamento quedó envuelto en un silencio que solo rompían los sonidos nocturnos de la naturaleza. Prompto se tumbó boca abajo sobre su lona, aún con la energía y la inquietud que lo caracterizaban. y empezó a flexionar su brazo derecho.
Quería retomar la práctica de flexionar el bíceps (una rutina que había comenzado más temprano, pero que el peluche interrumpió abruptamente). Necesitaba despejar su mente y concentrarse en algo tangible.
Noctis se acomodó a su lado derecho, encogiéndose un poco.
—Yo paso, fue un dia largo —murmuró—. Mejor dejo eso para otro día.
 Noctis se durmió.
 Solo cuando la respiración de Noctis se hizo profunda y regular, Prompto se movió. Con sigilo, sacó de su mochila una bata de laboratorio blanca ¿de dónde la sacó? nadie lo sabe, ni siquiera él y se la puso con un floreo dramático.
 Luego, se enrolló la manga de su brazo derecho, como un cirujano preparándose para una operación delicada.
 Se colocó un par de lentes de seguridad y obviamente falsos, y finalmente, sacó una plaquita brillante de su bolsillo, que sujetó con orgullo. En letras grandes, decía: 
 Doctor Prompto Argentum.
 Abajo, en letras más pequeñas, añadió con un rotulador:
 Especialidad en Hipertrofia Bíceps Mágica y Flujo Afectivo.
 Con su nuevo atuendo completo, Prompto volvió a tumbarse boca abajo sobre su lona.
 En ese instante, Prompto se giró ligeramente, y por un microsegundo, su mirada pareció conectar directamente con el lector, un brillo travieso en sus ojos detrás de los lentes falsos. 
 Murmuró con una emoción contenida:
—¿Listos para el experimento?
 Prompto respiraba profundamente mientras abría un libro que Ignis había dejado con tanto cuidado. La luz de la linterna iluminaba las páginas
 Reglas básicas para la activación y control del músculo mediante canalización mágica...
Murmuró para sí mismo:
—Bien, parece que debo mantener la mano en contacto con el músculo mientras ejecuto la contracción... Pero... ¿qué pasa si la mano no está en el lugar correcto?
Con un movimiento cuidadoso, movio su mano izquierda y tomó la mano dormida de Noctis, que descansaba a su lado, y la colocó sobre su bíceps derecho. Sentía el calor de la piel y la ligera presión.
—Según esto... la mano debe permanecer firme, pero sin apretar. Hmm, Noct, espero que no te importe ser mi conejillo de pruebas.
Sonrió entre dientes y bajó la voz para no despertarlo:
—Vamos, no te muevas... solo un poco más acá... perfecto.
Luego volvió a leer en voz baja:
—“Para una mejor respuesta, flexione lentamente y sincronice la contracción con la canalización mental...” Eso suena muy fancy, pero básicamente significa... flexionar y pensar en hacerlo bien.
Se concentró, sintiendo el músculo tensionarse bajo la palma de Noctis.
—¿Lo sientes? Sí, se contrae. Bien, bien... eso es todo, amigo.
La respiración pausada de Noctis apenas cambió, pero Prompto pudo sentir cómo se relajaba poco a poco.
—Uf, estás más pesado que un chocobo dormido, ¿sabes?
Se permitió una sonrisa mientras continuaba flexionando, y con la mano libre sostuvo el libro abierto frente a él, murmurando:
—Ahora, dice que... “mantener la postura sin rigidez para evitar fatiga...” ¿Eso significa que no puedo ponerme demasiado intenso? Vale, vale.
Mientras flexionaba, sus ojos iban saltando entre las líneas, tratando de absorber cada detalle.
—Esto es más complicado de lo que creía, pero si me sale, quizá hasta pueda impresionar a Cindy.
Se detuvo un momento, mirando la mano de Noctis sobre su bíceps.
—Aunque tú probablemente prefieres que no te use de soporte para mis prácticas... pero gracias, igual.
Sin embargo, el cansancio se fue haciendo notar y su voz bajó hasta casi un susurro.
—Voy a intentarlo un poco más... y luego me toca soñar con con el ejército de Carbuncles...
La noche avanzaba lentamente. Todos dormían… menos Prompto.
Tendido boca abajo sobre su lona, con el libro abierto frente a él y su bíceps derecho ligeramente flexionado, seguía murmurando en voz baja mientras ojeaba con atención:
—"Mantener contacto constante con la palma del sujeto secundario…” Ajá, eso eres tú, Noct. “Evitar interrupciones súbitas de flujo afectivo”… ¿flujo afectivo? ¿Esto es magia o una telenovela?
Con una sonrisita cansada, miró de reojo a Noctis, quien dormía a su derecha, completamente ajeno a que su mano estaba siendo utilizada como equipo de laboratorio muscular.
—Tranquilo, príncipe. No es nada comprometedor… solo ciencia avanzada y un poquito de vanidad.
Flexionó el bíceps con cuidado, como si estuviera en una exhibición de gimnasio para fantasmas.
—¿Lo sientes, Noct? ¿Sientes la fibra activándose bajo tus dedos? ¿La tensión armónica del poder oculto? ¿El arte milenario de los gains?
Noctis murmuró algo ininteligible, giró apenas, pero no se despertó.
Prompto, emocionado, hojeó otra página.
—"Para mejores resultados, el sujeto secundario debe estar emocionalmente cercano al canalizador principal"... ¡¿QUÉ?! ¿Eso quiere decir que...
Lo pensó un segundo. Luego lo descartó.
—Bah!, somos bros. ¡Somos lo suficientemente cercanos para esto! Flexión científica, no afectiva, señor libro. No se haga el dramático.
Siguió unos minutos más, leyendo frases cada vez más raras como:
 La mano también puede reposar suavemente sobre el deltoide anterior como zona opcional de anclaje afectivo.