Flor de infierno

Una decisión para arrepentirse

Washington, Estados Unidos.

Flor roja

Continuo corriendo por el espeso bosque, no se cuánto llevo corriendo, solo se que lo hago desde que escape de las garras de la bestia; estoy segura de que estoy lejos del lugar donde me encontraba privada de mi libertad, pero igual, no encuentro final, una carretera o señales de vida humana, parece que no tuviera final. Estoy toda ensangrentada, por el contrario, eso no es lo que me asusta, porque sé que la sangre no es mía y ese es el problema y lo que más escalofríos me da, no sé de quién sea la sangre encima mío. A lo lejos vuelvo a escuchar la misma melodía, es él, silba esa canción que ya me sé de memoria "heathens" . Aumento mi paso, rasguñándome en el proceso.

Querida Dalia canta No tendrás escapatoria.

Su voz hace que me distraiga y tropiece cayendo al suelo. Me voy a levantar cuando siento unas grandes manos rodear mi cuello. El escalofrío me recorre el cuerpo, nunca había sentido tanto miedo como lo he sentido ahora, siento la muerte respirar, literalmente, en mi cuello. La oscuridad que nos rodea, no me permite observar con claridad el rostro de la bestia, lo único que puedo observar son sus ojos café oscuro que te hacen temblar de miedo.

Mi hermosa Dalia, creíste que te podrías escapar de mi Saborea cada centímetro de mi cuello Estás condenada a mí, nunca te alejaras de mi.

Me despierto llena de sudor a consecuencia de la pesadilla que he tenido. Por eso no me gusta ver películas de terror en la noche, todas esas escenas quedan grabadas en mi cabeza haciendo que me den pesadillas, por otro lado, no quería dejar a mi pequeña hermana, sola viendo la película.

Me levanto de la cama directo al baño, pero antes miro que tenga buen tiempo para organizarme. Salgo de la ducha Díez minutos después, fresca y oliendo a fresas, busco algo muy formal para la ocasión, así que optó por unos pantalones beige tipo old, y una camisa blanca manga larga de botones; no acostumbro a vestir de esta forma, soy más de vestido florales, y ropa como la que se usa en el campo, aunque hoy es diferente, tengo una cita de trabajo, de esas que son sumamente confidenciales y que no te dicen nada al respecto. Lo único que sé, es que tiene que ver con lo que me dedico, psiquiatría, y claro no puedo olvidar; mi tía fue la que me recomendó.

Termino de ponerme mis tacones saliendo de la habitación, con mi bolso en mano; cuando llegó a la cocina me encuentro con mi madre haciendo huevos con tocino, los favoritos de mi hermana. Saludo a mamá cómo es de costumbre, con un beso en la mejilla y un abrazo de oso, desde que murió papá trato de que mamá o Emilia, no se sientan tan vacías, mamá me dice que mi desayuno ya está en la mesa, huevos con queso, pregunto por la pulga, pero mamá dice que todavía no se ha levantado, así que le digo que le dé un beso de mi parte cuando se levante.

Término de desayunar, tomo mis cosas, me despido de mamá y salgo. Pido un taxi con dirección a mi destino.

El taxi para en uno de los restaurantes/hoteles más elegantes y costosos de Washington, The blue diamond , normalmente verás a celebridades, políticos, empresarios, personas que sólo pueden pagarse este lujo. Llegó a la recepción donde digo mi nombre, luego llama a otro de sus compañeros, este me lleva al tercer piso donde ya me están esperando los franceses.

–Señorita Hall – se levanta dos hombres y una mujer al verme.

–Un gusto Por Fin conocerla en persona –dice uno de los hombres marcando su acento francés.

–El gusto es mío – digo sería.

–Bueno señorita Hall, como se lo informamos por teléfono– comienza a hablar la mujer –Su trabajo, obviamente si lo toma, será hacer que Simón Smith confiese el asesinato de Violetta Evans.

Me entregar una carpeta con los datos de Simón, doy una ojeada rápida a los documentos y dos cosas me llaman la atención: la primera, es que está en un hospital psiquiátrico y no en una prisión, la segunda, que es mucha coincidencia, es el día en que murió Violetta; 23 de septiembre, día de mi cumpleaños.

–¿Por qué está en un hospital psiquiátrico y no en una prisión, si es considerado tan peligroso?– pregunto.

–Ese es uno de los hospitales psiquiátricos más seguros y protegidos de todo Estados Unidos, pero usted ya debe saber eso, su tía es la directora – ahora el que habla es el hombre que está a mi izquierda –Además, con a podido ver, él es de Frances, aunque sea el asesinato fuera de su país, mientras se da la extradición a Francia estará en el hospital.

Un hombre considerado peligroso, ha asesinado a una joven, que en vez de estar en una prisión de máxima seguridad, como debe de ser, está en un hospital psiquiátrico, solo por su alto nivel en psicopatía. Alto no me cuadra en todo esto.

–Porque me han elegido si yo todavía no he terminado la especialidad– apenas voy por mi segundo año de psiquiatría, después de terminar la carrera de medicina que me exigieron para poder graduarme.

–Eso lo tenemos muy presente, pero también sabemos que eres una de las mejores en tu clase– habla la francesa.

–Además, si buscamos a otro doctor psiquiatra, lo más probable es que la prensa quisiera saber que pasa. Queremos tener esto lo más reservado posible.

Claro, buscan a la novata que nadie conoce en vez del doctor licenciado que sí sabe.

Los agentes me miran a la espera de una respuesta de mi parte.

–La verdad... Necesito pensarlo.

–Tienes hasta mañana para darnos tu respuesta – dicen cuando ven que dudó.

–Mañana tendrán su respuesta – nos despedimos sin más.

🥀

El olor a pollo frito inunda mis fosas nasales cuando llegó a casa, me encuentro con mi madre en la cocina como siempre, cocinando para despejar todo incluido el dolor que siente por la pérdida de su esposo.

Hola - dejo el bolso en la mesa.



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En el texto hay: misterio, psicologico, mentiras

Editado: 02.02.2025

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