Flor de loto

Capítulo 3: Pétalos caídos

Diez minutos después de que desaparecio kou)
En una pequeña casa viejita, con muchas plantas creciendo sobre ella, el techo casi destruido, la puerta rota, era la casa donde se crió Mi y Kou. Entro en ella Kou con lágrimas en los ojos, sabia que definitivamente esas personas que los adopto no se merecían aver muerto de esa forma, no se podia imaginar el miedo y preocupación que sintieron cuando aquellas malas personas entraron a la casa, sin saber que serián de sus hijos, dio algunas vueltas recoriendo toda la casa mientras recordaba los pocos momentos que tenian, recogió un par de cosas y se las guardó.
-Kou,¿ que haces aqui?
-Lo siento no creí que tardaria mucho, solo vine por unas cosas.- Bien, pero es momento de ir nos, el capitan dio la orden de una retirada pero como desapareciste fueron a buscarte.
- Oh. Esta bien solo ¿me dejarías ir a verlos?. No esta lejos.
(Unos minutos después)
Mientras tanto el capitán y los dos soldados ya habían dado toda la vuelta sin encontrar a nadie, hasta que se encontraron con la casa abandonada. Revisaron pero la casa estaba vacia,  en eso el capitan miro hacia el suelo, desesperado y cansado, vio  un dibujo que estaba tirado parecían ser de unos niños pequeños en el habian los nombres de Kou, Mi y otros dos nombres que eran ser sus padres. Ahora ya todo tenía sentido, el porque habia desaparecido uno de sus soldados y ya tenía una pista ah donde pudo aver ido y se marcharon lo más rápido posible. 
(En ese mismo momento)
Mientras caminaban Xindeg y Kou se encontraron unas flores muy bonitas de color blanco y en el centro rosado, así que corto unas cuantas.
- ¿Se las llevaras a tu hermana?
- No a mis padres, te conte la primera vez que nos conocimos que la única razón por la cual me hice un soldado fue para proteger a las familias, a personas inocentes, no fue porque buscaba venganza.Quiero llevarles estas flores y decirles que su hijo creció bien, agradecerles por darnos a Mi y ami una oportunidad de vida, sin ellos no estaríamos aquí.
Xindeg solamente le sonrió y empezó a caminar un poco más rápido dejando a Kou atrás, se empezaron a escuchar ruidos, creyó que habían sido unas ardillas pero enseguida vio como los pájaros huían, voltio rapidamente y asustado a ver a Kou. Y ahí estaba el enemigo sosteniendo a su mejor amigo con un cuchillo en la garganta. 
- Dime de ¿donde vienen?. Contesta rapido y con la verdad o tu amigo ya no la contará.

- Venimos del noreste, solamente somos campesinos en busca de comida y recordamos que personas muy sercanas fallecieron aqui, venimos solamente a ver una sepultura.
- Respuesta equivocada, lo vimos asercarse a nuestro campamento y tomar nota. Sabemos que vienen del sur del pueblo por el que venimos a conquistar.
- No hemos hecho tal cosa, por favor.- dijo mirando a Kou muy desconcertado.
- Huye Xindeg! Protege a Mi.- Dijo Kou con lágrimas en sus ojos pero con la mirada bien en alto. Sabía que si no lo mataban a  él, matarían a su amigo, el sujeto era más fuerte que él.
- No tienes porque huir, necesito que des este mensaje a su general.
Las flores que había cortado Kou cayeron al suelo junto con algunos petalos manchados de sangre. Impotente Xindeg se lanzó sobre aquel sujeto dando inicio a una batalla de golpes el cual fue derrotado. Cayó al suelo desmayandose ya sin energía, y con un vacío en el corazón.
- Xindeg despierta, ¿Que ha pasado?
- ¿ Donde esta Kou?
- Aqui está, hay que irnos antes de que algo más pase. ¿ Puedes caminar? Xindeg solo acertó con la cabeza y empezó a caminar, estaba muy mal herido pero le dolia mas no haber podido hacer nada para salvarlo, como podría cuidar de Mi, si no pudo salvar a su amigo.



#12972 en Otros
#1018 en Novela histórica
#21189 en Novela romántica

En el texto hay: historia amor, ceo y empleada

Editado: 23.05.2023

Añadir a la biblioteca


Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.