Puedo escuchar algo a lo lejos de la habitación; era una melodía. Se escuchaba triste y melancólica. Me recordaba a ella, con su mirada neutra y sin vida, ella era triste y melancólica.
Se escuchaba extraña la melodía. Sonaba y retumbaba por las paredes. Sonaba y retumbaba como lo estreñidos sonidos que emitía su degollada voz.
Ella era cómo aquella melodía, tan hermosa y triste. Ella estaba rota por dentro, no tenía arreglo.
Ella era como aquella melodía que sonaba y retumbaba. Ella era la melodía rota. Ella era mi tormento. Ella era mis lágrimas amargas. Ella era hermosa y melancólica.
Ella era la peor pesadilla que podrías tener. Y sin embargo, la amé, y ella... Ella se desvaneció como el humo.
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Editado: 13.11.2024