Una casa abandonada,
de esas que guardan historias entre sus paredes viejas
y leyendas ajenas a la realidad.
De esas que observan en silencio cómo jóvenes curiosos
ingresan en busca de aventuras,
y se alejan a las pocas horas.
De esas que habitan labios de extraños por una noche o dos,
y jamás vuelven a nombrarla.
De esas que el desamparo y el olvido la dejó en el pasado,
y nunca supo cómo volver