Foozle | Omegaverse | Magia

DÉCIMO CAPITULO

recompesa por esperar (tengo uno mas escrito pero se los publicare despues)

Zayn suspiro, el alfa le llevaba a un lugar y el solo seguía con la certeza que eso ayudaría al omega.

El alfa paro, un lobo color gris, grande, ojos verdosos y un aura dominante, por un minuto flaqueo pero le sacaba muchos años a ese alfa así que se recompuso.

«Se quién eres» mando a la mente del alfa

«Se a donde lo llevaron, es hora de ir por él, nosotros nos enfrentaremos a los que tengan a Niall, son cuatro luchadores expertos como humanos y lobos»

«Vamos, todo sea por el» el lobo mayor estaba feliz de que ese alfa testarudo estuviera ayudando, porque sea como sea era el mate del omega.

El lobo de ojos verdes camino y le siguieron, después empezó a correr a gran velocidad, llegaron a una camioneta donde los tres subieron, Harry volvió a su forma humana, se vistió y tomo sus armas. Se coloco un audífono y con un poco de cuidado coloco uno en Zayn para que estuviera comunicado de lo que pasaba.

La camioneta se movió, todos estaban vestidos de negro, con armas y esperando el momento, vieron como unas camionetas llegaron a la propiedad, entraron alrededor de 50 hombres, entre ellos Niall, Harry pudo sentir el temor del menor, y el otro alfa igual, pero solamente Harry podía sentir como el omega del menor le llamaba, lo pedía con todo su ser y su alfa estaba tan inquieto ante eso, necesitaba salvar al pequeño omega porque simplemente estaba enamorado del tierno chico de hermosos ojos azules.

Zayn sabía que el omega estaría pidiendo al alfa, a su mate, era algo obvio y que suponía ya que él no podía sentir eso, solo lo que el omega le dejaba ver por el lazo, un lazo que estaba un tanto débil y lo entendía, el por mas bueno que fuera jamás seria el todo de ese hermoso omega y en gran parte lo agradecía, así no se debería sentir ningún tipo de traición de él a su amado omega que le habían arrebatado muchos años atrás y el siempre lo tendría en mente, porque simplemente su alfa lo seguiría amando.

Se suponía que si algo malo pasaba a tu mate la Diosa Luna te mandaba a otro al paso de los añas, pero el simplemente había perdido la esperanza después de 116 años sin señal de que eso sucediera.

Niall sentía el fuerte olor de los alfas y lo odiaba su omega estaba llamando a su alfa, a su mate, lo necesitaba sentía temor, sus piernas apenas podían seguir el paso de esos nefastos alfas, uno de ellos le jalaba como si fuera una marioneta a su disposición, se sentía débil, a merced de cualquiera ahí, nunca había aprendido a pelear, nunca había sido bueno siquiera lanzando un puñetazo, además con Harry siempre cerca eso no era necesario ya que nadie se le acercara amenazante con Harry junto a él.

Le llevaron hasta el último piso, era una construcción vieja, en la nada, muy fea, se sorprendía que estuviera en pie por su nefasto estado, las paredes eran grises o eso deberían de ser debajo de los innumerables grafitis que tenia, nada agradables a la vista, ventanas rotas, puestas destrozadas y las escaleras estaban manchadas de sustancias desconocidas, el olor era lo peor, parecía que habían cuerpos muertos ahí.

Su cuerpo fue aventado a un colchón viejo y polvoriento en la última habitación del último piso, esta tenía una puerta más decente y fue cerrada al momento, cuatro dos alfas se colocaron frente a él amenazantemente, su labio inferior tembló y se pego a la pared, su magia aun no respondía a lo que él quería y los alfas al notar al omega querer manejar su magia rieron con gracia, el cuarto se inundo del olor asustadizo del omega, por detrás de esos dos alfas aprecio otro, sus ojos posados pesadamente en el omega.

—Cual cachorro a punto de morir, aunque bueno, a ti no te mataremos, aun no, necesitamos quitarte la magia antes —hablo imponente, sus cuerpo se estremeció.

—¡Ahora! —el grito del alga fue escuchado por sus alfas y guerreros, ellos salieron a sus posiciones, rodearon el lugar sin dar señales de estar ahí, las técnicas de supresión de olor que habían aprendido eran impecables ya que ni un solo olor de alfa había en el lugar.

Los disparos fueron poco a poco, con un silenciador cada uno de ellos, los cuerpos de los otros alfas fueron cayendo, pon un lado iban Harry y Zayn, este último en su forma lobuna, sus cuerpos se movían siendo cuidadosos de ser observados, Harry disparaba a quien estaba cerca, sus ojos verdes relucían era su alfa tomando parte al igual.

Los alfas expertos fueron matando poco a poco sin dar aviso alguno de lo que pasaba a los que tenían al omega a lo lejos se acerco la madre del omega, podía ver el revuelto, quiso ir pero sería imprudente, ella no sabía del plan y solo lo estropearía, si que cuidaría para atacar a quien llegase.

—¿Cuánto tiempo tardara la bruja? —hablo uno viendo el cuerpo del omega con lujuria.

—No mucho, no tocaras al chico hasta que le quietemos la magia, después puedes hacer lo que quieras —hablo el que parecía ser el que mandaba. Uno estaba en la puerta viendo todo solamente, era omega, lo pudo sentir estando ahí ya un rato, parecía alfa pero simplemente estaba entrenado, era un omega, uno que estaba siendo dominado por ellos, uno que estaba obedeciendo.




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