Fragil

¡¿alguien ha visto a los novios?!

Se escuchaba a lo lejos esa frase.
Sentado en una recepcion, mientras me tomaba un wisky observe como una pareja estaban en los columpios que eran para los niños.
Conversaban o eso es lo que parecia ya que la chica movia los labios y se mecia, mientras que el chico la observa con ternura.
Todos siguen buscando a los novios, temprano habia sido la misa y ahora los estan buscando para dar el primer baile juntos.
Mientras muestro una sonrisa pícara a la chica que esta a mi frente, muevo la cabeza hacia un lado para que pueda divisar lo que yo veo.

- Una pareja enamorada.

Sale de su voz temblorosa. A lo que replique.

- si, una pareja enamorada.

Me levanto de la silla y me dispongo a salir de ese lugar. Habia ya cumplido mi promesa, estuve ahi el dia de su boda, vestido formalmente y sonriendo para que no se arrepienta.
Que les podria decir sobre este suceso, fue maravilloso, no me queme en la iglesia, escuche lo que me convenia, muchas lagrimas.
Demasiadas lagrimas...
Por suerte no fue de tristeza esta vez, fue de felicidad. No mia, pero si de los demas a mi alrededor.
Caminaba despacio mientras todos estaban alborotados porque no sabian donde estaban los novios, yo los habia encontrado sin querer y señale a la chica que estaba a mi frente, pero, en vez de pronunciar algun aviso, comenzo a seguirme hasta la puerta. Donde algo incomodo y molesto le pregunto.

- ¿Porque me sigues?.

Ella apenada aun, me responde.

- Nos debemos un baile.

Vizualizo la salida, no muy lejos veo mi moto, podria decir que quiero huir como la mayoria de veces, sin embargo...

- Te hare caso por esta ocasión, Jaz, te recuerdo que solo sera un baile.

- Es lo unico que deseo...

Temprano en la misa la había vizualizado, diría que estaba emocionado por volverla a ver, pero, la verdad es que no sabria que hacer si se me acercara o peor aun si ella me empezara hablar. Sin darme cuenta, ella ya me tenia en sus ojos y mis pasos en dirección a ella, quisiera decir que me detuve, que me senté con algun conocido de la novia, que ya estaba haciendo ojitos con alguien que no conozco para quedar en la noche. Pero les falle queridos lectores.
No como persona enamorada, pero si como persona que se ha superado asi mismo por años.
No cruzamos palabra, nuestro brillo en los ojos decian mas que suficiente. Proseguimos a sentarnos juntos, escuchamos la misa agarrados de la mano. Nos hacian parar, sentarnos, arodillarnos, inclusive orabamos, no obstante, jamas solte su mano.
Jugueteaba con ella cuando me aburria, la acariciaba si me emocionaba algo y le agarraba fuerte cuando hablaban de amor.
Solte su mano el momento que estaba listo para irme. No queria ir a la recepcion, de hecho, ir a una boda no era de mi agrado. Pero, se lo prometí a mi mejor amiga.

-¿Eso es todo?

Sono de ella, no preguntamos de nuestro pasado, no nos reclamamos por las desiciones que tomamos, no preguntamos en que nos hemos convertido.
Intrigante, pense que podria decir algo que me haga volver con ella, sin embargo, solo buscaba huir nuevamente.

- Gracias.

Sono de mi, tenía miles de oraciones en mi cabeza, dispuestas hacerle de todo aquella persona que mas ame en su momento. Creo que "gracias" fue peor que cualquier oración salida de mi voz.
Aun brillaban sus ojos como el dia que supe que me quería, diria que se fue apagando ese brillo mientras pasaba el tiempo, pero no.
Continue diciendo con un tono de dulzura y añoranza.

- Te amo. Te veo en la recepción.

Asintió la cabeza mientras observaba como me alejaba para irme en mi moto.

Prendió, meti primera y sali de esa escena mientras en las escaleras de la entrada de la iglesia cruzada de brazos la vi sonriendo y por lo visto aun esperandome...




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