Introducción a mi mejor versión (capitulo 11)

Despues de que termine con Jazmín luego de dos años, casi.
Comence a entablar algo llamado tranquilidad.
Deje de estar deseperado por buscarla, como tambien, deje que mi paciencia funcione para otras personas.
En ese mismo lapso empece a ocupar mi vida con varias actividades, no queria volver a toparmela por casualidad a pesar de estar en el mismo colegio, era como si la tierra me trago en todo el sentido de la palabra.
Un tiempo me di cuenta que si me buscaba, luego creo que se dio cuenta que no la queria ver y dejo de aparecer donde yo frecuentaba.
Me volví profesor de religión, entre a un grupo de danza, estaba concentrado en el ajedrez, empece a leer a diestra y siniestramente.
Sin limites de mi hora para llegar a casa, empece a salir desde temprano para tomar de vez en cuando clases, y regresaba cuando obscurecia.
Empece a dormir poco, de hecho aprendí que si dormía dos horas, me despertaba y dormía una hora mas. Podia engañar al cerebro, pensaba que yo descansaba.
Con el tiempo paso factura, pero no me alcanzaba el tiempo si dormía 8 horas. Aunque los fines de semana recuperaba algo de dueño porque dormia de 12 a 14 horas.
Mi semana mas pesaba fue cuando tenia un torneo de ajedrez, luego de eso tenia que ir a la iglesia ayudar porque era la semana santa, al mismo tiempo que tenia examenes, por suerte me los dejaron dar todo en un dia, para rematar en las noches practicar danza porque el fin de semana teniamos dos presentaciones y un concurso.
Al domingo llegue casi arrastrandome a la cama.
Asi nunca pensaba en Jazmin, pero mi subconsciente me traicionaba, soñaba con ella. Siempre que eso pasaba, me quedaba, era consciente de que era un sueño, tomaba su mano y caminaba. Le contaba el resumen de mi semana y ella callada no decia nada.
Solo sonreía mientras haciamos actividades de novios.
Patinando de la mano, me pregunto cuando volvería, solo negaba con la cabeza mientra en mis adentros decía que ya era suficiente.
Me levantaba y continuaba con mi vida.
Sin embargo, en el fondo lo sabía, no debo detenerme o la terminaré buscando.
Mi duelo fue siempre tener la mente ocupada, mientras mas ocupada, mejor.
Pause una vez en un evento que hubo en el colegio, era un baile por fin de año y navidad.
Estabamos en el coliseo, yo sentando, descanasando porfin, asi que volví a pensar en ella.
Recorde que ella le encantaba bailar como a mi, asi que me acerque y le pedí bailar como lo haciamos antes.
Ella estiro su mano, quería hacerlo, pero su amiga la detuvo, la regreso a ver y negando con la cabeza escuche decir no.
Mirandome a los ojos, no insistí, me di media vuelta y fui a bailar con una amiga en comun que teníamos.
Se burlo porque me rechazo, pero me abrazo, ella sabía que no la había superado.
Con el tiempo lo hice, mucho tiempo, los libros que leía en su mayoria era como tratar a una novia, describían una historia de amor.
Como se enamoraron, como el trata a ella. Como el la recupera, sus rasgos, sus muletillas, todo.
Yo absorbía como esponja, volví a interesarme en salir con alguien, no las buscaba, no tenía tiempo, pero se daba.
En ese momento sufri un triangulo amoroso, una traición a un amigo, enamore a una compañera de la iglesia, bueno, dos. Conocí a alguien fuera de todos mis circulos sociales, era bonita, fuera de mi alcance, pero con lo que aprendí, termino enamorada.

cada chica me proporcionaba una personalidad diferente, un gusto diferente, un día diferente.
No empece ninguna relacion, a toda chica que se cruzó le fui sincero, no puedo tener una relación hasta que los sentimientos que aun sentía por Jazmin no afecte a mi presente novia.

Y asi, una por una, se alejaron.

Hasta que conocí a Jael...