2 El primer baile.

Noah era bastante buena en eso del ejercicio, y se lo había tomado muy enserio, trotaba más rápido que yo, en pocos meses había bajado esos kilos de más y el cambio era bastante notorio, antes me parecía una chica hermosa pero ahora lo era aún más.

-Noah, espera!.-Dije deteniéndome para respirar.

-Si no puedes trotar más, está bien, podemos caminar.

-por favor.

Habíamos trotado todo el puente de Brooklyn por supuesto que no podía trotar más. Noah miro hacia la nada y miro todo la ciudad.

-Cuando me propongan matrimonio, quiero que sea aquí.-Dijo con la voz fatigada del cansancio.

La mire extraño.

-¿En un puente?

Ella asintió.

-No en cualquiera, en este puente, mientras se esconde el sol, eso sería fantástico.

-Que rara…no prefieres no sé, en Time Square, o en central park o mejor en privado?.-Dije.

-Eso sería muy cliché, la mayoría lo pide en esos lugares, no he visto muchas personas que lo hagan aquí.

-¿y qué tal a tu futuro esposo no le guste la idea?

-A mi futuro esposo le tiene que gustar la idea, si no, no lo será, además tu eres el encargado de decirle a mi futuro esposo que si se quiere casar conmigo tiene que pedírmelo aquí, así sería una sorpresa para mí.

-claro y yo sostendré el violín y tendré que tomarles fotos y además de eso grabar tu reacción, que más pide señorita?

-también serás el niñero de mis hijos.

-Muy chistosa. Pero no tendré tiempo, creo que quiero ser un gran empresario.-Dije hablando enserio, había querido hablar sobre el tema con Noah, tenía grandes ideas sobre alguna empresa, pero al mismo tiempo el miedo de fracasar.

-¿empresario? ¿De qué?

-No lo sé, aun no lo he pensado pero, si quiero ser mi propio jefe, y tú que quieres?, solo nos faltan dos años en high school y entraremos a la universidad.

Su rostro cambio.

-No lo sé, aun no lo he pensado, es que me gustan muchas cosas. Aún hay dos años para pensarlo ¿no? Además es obvio que tendré más dinero que tú, yo soy más lista.

Me reí.

-Si claro, ¿quieres apostar?.

-Apuesto cinco dólares a que tendré más dinero que tú.

-Entonces acepto.

Nos fuimos a casa riendo.

En su cumpleaños número dieciséis efectivamente sus padres le dieron un auto y a los pocos meses su licencia. Las demás personas notaron el cambio de Noah, ahora era la envidia y al mismo tiempo el deseo de toda la escuela, era una de las chicas más populares, y ¿Cómo no? La pubertad la volvió más bella de lo que estaba.

NOAH:

Había varios cambios en mí, pero jamás me uniría al equipo  de porristas y mucho menos me consideraría popular, me preocupaba el estudio y pasar a una universidad. Era extraño porque incluso Jake y Megan me miraban de otra forma, ya no burlonamente, ahora los había dejado callados.

Dos años después

-Hey Willows.-Dijo Andrews, el chico que hace dos años me había comenzado a gustar.

-Hola.-Dije nerviosa.

-No está por aquí tu amigo la goma de mascar cierto?

Negué con la cabeza.

-No le digas así, ni siquiera esta gordo.

-No es por eso, crees que no noto el palo andante que es? Lo digo porque siempre está pegado a ti.

-Es obvio, por algo somos mejores amigos.

-No lo sé hermosa Noah, creo que tu amiguito está enamorado de ti, es que se nota.

-¡¿Qué?! Por supuesto que no. Me trata de la misma forma en la que yo lo trato.

-Osea que también te gusta él?

-NO! Me gusta otro chico.-Dije sonrojándome. Él sonrió.

-Ah sí? Quién?

-No te lo diré.-Dije cerrando el casillero.

-Crees que ese chico se enojaría si te pidiera que salieras con migo?

Mi corazón dio un vuelco y voltee nerviosa y le sonreí y él hizo lo mismo.

WILL:

-¡¿OLIVER ANDREWS?!

Sentía el calor de la rabia subir por todo mi cuerpo, y ni yo mismo sabia por que, el chico no me caía mal pero tampoco me caía bien, me daba un presentimiento raro.

-Nunca me dijiste que él te caía mal.

-No es eso Noah, es solo que, acaso no sabes lo que se rumore de él? Dicen que él tiene una libreta en donde apunta con cuantas chicas se ha acostado. ¿y si te quiere en esa lista?

Ella rodo sus ojos.

-Son solo rumores Will. Gracias por preocuparte pero por primera vez un chico se fija en mi.

Por alguna razón eso me dolio.