Punto de vista de Irisha Helkar
Pero… ¿Qué fue lo que viste hijo? Pensé preocupadamente, después del intercambio de palabras que tuvieron Zoe y mi esposo dentro del quiosco que teníamos en el bosque, cerca de nuestra casa.
Queriendo saber si estaba bien o no, extendí mi mano para tocarlo, pero fui interrumpida por Kadian, que la interceptó y agarró para llevarme con un poco de fuerza afuera del quiosco.
"Irisha, haremos algunos cambios en su prueba." Dijo seguidamente, alejándonos cada vez más de Drake y Zoe.
¿Pero qué le pasa? ¿Por qué me saca de esa manera? Molesta, por no poder comprobar el estado de Drake, decidí escucharlo.
"¿Cambios? ¿Pero qué cambios? Pensé que ya habíamos establecido lo que se haría en cada una de las pruebas." Pregunté, ajustando mi velocidad a su paso.
"Tienes razón, pero en esta última prueba hubo algo que me inquietó." Continuó, mientras yo pensaba y deducía a lo que se refería.
Es verdad… no fue algo normal lo que pasó con Drake. Pensé dentro de mí, antes de recordar los minutos previos a sus convulsiones.
Drake, a lo largo de su prueba estaba tranquilo, con una sonrisa que reflejaba el pronto éxito de su prueba, hasta que repentinamente su expresión había cambiado a una de incomodidad, para que después su respiración se agitara, mientras que de sus ojos empezaban a salir algunas lágrimas, antes de que su cuerpo empezara a reaccionar violentamente.
En aquel momento pensé que era algo pasajero, algo que habíamos previsto que podría pasar, pero cuando se intensificó, me asusté.
"Sé que tú no tienes la habilidad para sentir el maná de otras personas, pero en aquel momento, cuando Drake se alteró, expulsó un maná distinto al que suele tener, uno que reconocí inmediatamente." "¿Qué? ¿Pero de qué hablas?" Pregunté confundida, ante esas preocupantes afirmaciones.
"Como lo oyes, el maná que expulsó fue el mismo que tenía, el del Dios Dragón."
¿Qué? Pero eso es imposible….
"Espera Kadian." Dije, agarrando esta vez a Kadian para detenernos en medio del bosque. "Eso no puede ser posible, tú mismo me dijiste en varias oportunidades que él no podría acceder a ese maná hasta llegar al rango Semi-Dios."
"Sí, lo sé, pero parece que el Fragmento está actuando de una manera distinta dentro de él, porque además de esto, su núcleo pasó del rango Avanzado a Experto en solo 13 años, algo que no tendría que pasar."
Sintiéndome un poco perdida por las palabras de Kadian decidí tomar un segundo aire para relajarme.
"Entiendo, ¿pero por qué estamos yendo a casa? ¿Qué tienes en mente ahora que sabes esto?" Pregunté, antes de que Kadian se pusiera de nuevo en marcha, obligándome a seguirle.
"Es para traer un artefacto mágico que me ayudará a confirmar si Drake está usando el fragmento o no, quiero buscarlo, ya que no lo he usado desde antes de venir a esta casa, y la verdad no sé muy bien dónde está."
¿Desde antes de venir a Birton? Pe-pero sí nunca me mencionó algo parecido. Pensé, siguiéndolo en silencio hasta llegar a casa.
Una vez llegamos nos pusimos a buscarlo, entre el almacén, la oficina de Kadian, y otros lugares de la casa.
Después de buscarlo por más de 4 horas, por fin pudimos encontrarlo en el sótano de la casa.
"Excelente, ahora tendré que revisarlo para saber si aún funciona." Comentó Kadian, antes de transmitir maná sobre él. Al mirar el artefacto, noté que era un pequeño tarro de vidrio con un cristal blanco en medio, rodeado por decenas de lo que parecían ser cabellos dorados, que lo jalaban por todos los lados, impidiendo que el cristal se moviera del centro.
Cuando el maná entró dentro del tarro, este comenzó a brillar con un tono amarillento, indicando que aún funcionaba correctamente. "Sí, si sirve, porque la naturaleza del maná de mi raza es dorado."
Después de que también yo probara el artefacto y viera que el color de mi maná era rojo, Kadian me dijo lo que cambiaría para la cuarta prueba del augurio de Drake.
"Irisha, quiero que para la cuarta prueba batalles contra Drake en vez de Zoe, como lo teníamos planeado antes." "¿Eh? ¿Pero por qué yo?" Pregunté sin entender sus intenciones.
"Porque Drake no conoce tus habilidades, y quiero que lo presiones con los distintos hechizos que sabes, para ver si usa nuevamente el maná del Fragmento en un momento de estrés."
"Entiendo, pero… no sé si pueda lograrlo, no quiero lastimarlo." Respondí a Kadian, antes de que el ambiente cambiara al presente, en donde estaba recordando aquella frase que le había dicho, de no lastimar a mi hijo.
"Magia de nivel Leyenda, Tempestad." Pronuncié con las manos levantadas, después de sentirme obligada a usar más maná de lo que lo había estado haciendo.
Tengo que ser cuidadosa y usar todo el potencial de este hechizo. Repetí varias veces dentro de mí, antes de hacer caer algunas agujas de hielo enfrente de Drake, como advertencia de lo que se venía.
Drake, al notar el peligro en el que se encontraba rápidamente se envolvió en una cúpula de piedra, que lo protegió de las miles de agujas que empezaron a caer desde el cielo, exactamente al otro lado del río.
Su defensa es muy pobre. Pensé, al darme cuenta de que podría derribarla fácilmente con la otra parte de mi hechizo, que consiste en lanzar truenos desde el nublado cielo.
Después de unos pocos segundos, la defensa de Drake se empezó a agrietar, por el constante impacto que recibía por las agujas, haciendo que me pusiera en un dilema de si detener mi hechizo o no.
¿Qué hago? Si esto sigue….
Aun con las manos levantadas, decidí detenerlo, pero, al notar cómo Drake se había dado cuenta de que pronto estaría desprotegido, continué con mi hechizo.
Drake, cambiando su agarre de mano en la espada que le habían regalado, empezó a crear una barrera de fuego afuera de su cúpula, para después salir de ella justo a tiempo antes de que esta se derrumbara por completo.