10 - La tristeza de dos reinos.

Gran bosque de Arendelle.

1:30 de la madrugada.

Pocos segundos habían transcurrido lentamente desde que la espíritu del viento oscuro desapareció del escenario junto con el antiguo príncipe de las islas del sur y los dos pequeños infantes reales, de esta simple manera dejando detrás las nevadas tierras del hermoso reino de Arendelle, aunque a su vez con esta acción dejando también a los lastimados jóvenes elementales en un completo estado de shock.

Pues dos de ellos habían presenciado totalmente el inevitable secuestro de sus respectivos y amados hijos, siendo un hecho demasiado doloroso que sería prácticamente imposible de superar, ya que esos dos pequeños infantes reales eran lo más importante de sus vidas, mismas vidas que parecían haber sido destruidas completamente debido a este terrible incidente.

Por otra parte, un viento realmente frío comenzaba a circular en gran medida por toda la zona del antiguo campo de batalla, provocando al mismo tiempo que los enormes pinos se tambalear terriblemente de un lado a otro, dando a entender con este hecho como si la enorme región de Arendelle estuviera sufriendo también la pérdida de los dos pequeños niños.

Juvia: Greige.

Susurró la peliazul con una gran tristeza en sus palabras al momento de haber logrado salir del inmenso shock antes recibido, a su vez que también unas gruesas lágrimas comenzaban a resbalar lentamente por sus mejillas.

Mientras tanto, Natsu y Gaara comenzaban a levantarse con mucha dificultad del frío suelo del nevado bosque de Arendelle, aunque sólamente para poder apreciar el devastado escenario de batalla, además de poder notar también a la hermosa espíritu portadora del elemento agua, la cual se visualizaba en este preciso momento en un completo mar de lágrimas.

Natsu: Ju...Juvia.

Habló el pelirosa con preocupación en su voz antes de salir corriendo velozmente en dirección a su amada esposa, dejando detrás a su querido compañero pelirrojo quien simplemente miro al actual rey de Arendelle, mismo que a su vez se lograba apreciar con su mirada completamente baja.

Natsu: Mi amor.

Pronunció el espíritu del fuego al momento de estar justo enfrente de su amada esposa, la cual sólamente pudo abrazarlo con mucha tristeza reflejada en su mirada, siendo inmediatamente correspondida por el joven de intenso cabello rosa.

Juvia: Se...se lo llevaron.

Decía la hermosa mujer de ojos azules con un tono casi inaudible en su voz al estar liberando aún más de sus lágrimas, ocasionado a su vez que un mal presentimiento inundara rápidamente el corazón del pelirosa.

Natsu: A que te refieres con eso, a quién...a quién se llevaron.

Preguntó con miedo en sus palabras mientras miraba directamente a su esposa a los ojos, los cuales no paraban de fluir cada vez más y más dolorosas lágrimas.

Juvia: A Greige, ellos se llevaron a nuestro hijo, yo...yo no fui capaz de impedirlo.

Respondió con un claro dolor en su voz antes de ocultar su triste mirada en el cuello se su esposo, mismo que simplemente se quedó mirando a la nada por unos cuantos y largos segundos, ya que verdaderamente el pelirosa necesitaba procesar toda esta terrible información.

Por su parte, el actual rey de Arendelle continuaba con su mirada completamente baja, aún sin poder creerse todo lo que había sucedido hace tan solo unos cuántos minutos atrás, pues este mismo perdió terriblemente a su hijo sin poder hacer absolutamente nada para salvarlo, siendo un hecho que a su vez le causaba una tremenda vergüenza hacia su persona.

Sasuke: Owen...Owen...Owen.

Mencionó en repetidas ocaciones mientras un par de gruesas lágrimas se formaban en sus ojos negros como la noche, al mismo tiempo que también una potente aura eléctrica de color azul cubría por completó todo su cuerpo, de esta manera llamado la atención de los tres espíritus elementales restantes.

Sasuke: MALDITOS.

Gritó repleto de completa furia al momento de liberar una tremenda cantidad de su impresionante poder eléctrico, ocasionado con esta acción que la tierra del bosque temblara brutalmente en toda la nevada zona, incluso provocando que los tres miembros de Fairy tail tuvieran que protegerse debido a esta enorme liberación de energía pura.

Cuando la enorme expulsión de poder eléctrico por parte de Sasuke terminó completamente, los tres jóvenes elementales pudieron apreciar como este mismo respiraba de una manera sumamente agitada, para después sólamente ver como el pelinegro se desplomaba pesadamente sobre el frío y nevado suelo del bosque.

Sasuke: Elsa yo...lo lamento.

Susurró para sí mismo antes de quedar totalmente inconsciente, ocasionado a su vez que sus tres queridos compañeros decidieran acercarse inmediatamente hacia su persona.

Gaara: Sasuke.

Llamó con una suma preocupación al momento de arrodillarse justo en frente del cuerpo de Sasuke, pudiendo notar que este mismo sólamente se encontraba completamente inconsciente.

Natsu: Creo...creo que es mejor regresar al castillo, así podremos pensar mejor toda esta situación.

Propuso el espíritu del fuego mientras sujetaba fuertemente la mano de su esposa de cabello azul, la cual todavía permanecía con una expresión repleta de profunda tristeza.

Gaara: Entonces regresemos de inmediato, debemos informarle todo esto a la reina.

Decretó el actual consejero real de Arendelle antes de cargar cuidadosamente a Sasuke sobre su espalda, a su vez que recibía rápidamente un pequeño asentimiento de aprobación por parte de sus dos queridos compañeros.

Sin nada más que hacer en este pequeño y oscuro claro en el bosque, los tres miembros de Fairy tail comenzaban a caminar de regreso al enorme castillo de Arendelle con todos sus ánimos destruidos, pues este mismo reino había sufrido nuevamente una enorme pérdida como en su momento también lo fueron las muertes del rey Agnarr y la reina Iduna.

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