Martes 4 de Enero.
Gran imperio de Fiore.
Bosque de la región.
8:30 de la mañana.
Un nuevo día llegaba como de total costumbre a las hermosas y misteriosas tierras del remoto imperio de Fiore, provocando a su vez con este simple hecho que el brillante sol estuviera poco a poco pasándose sobre el ligeramente nublado cielo de la región, brindando al mismo tiempo un ambiente completamente agradable en todas las diferentes zonas del enorme bosque verde.
Mientras tanto, después de haber descansado profundamente durante toda la larga y placentera noche, los actuales monarcas tanto de Arendelle como de Romalia se visualizaban ahora mismo recorriendo las profundas tierras del gran bosque de Fiore, siendo una acción que los cuatro jóvenes reales habían comenzado a tan solo pocos minutos de haber despertado totalmente.
Este pequeño y arduo viaje por las profundidades del enorme bosque de la región no había tardado demasiado tiempo en complicarse sumamente, ya que estos mismos jóvenes no sólamente buscaban la manera de salir de la desesperante zona boscosa, si no que también estaban tratando de encontrar lo más rápido posible a sus demás compañeros perdidos.
Naruto: Sinceramente se me están cerrando los ojos.
Comentó el joven pelirubio con un tono ligeramente cansado en su voz, para después sólamente lanzar un pequeño y profundo bostezo.
Sasuke: No pudimos haber dormido tan siquiera algunos minutos más.
Dijo el pelinegro con notable cansancio en sus palabras mientras caminaba justo a un costado de su compañero de intenso cabello rubio, provocando a su vez con esta graciosa escena que tanto Elsa como Sakura comenzarán a reír con una suma diversión en sus respectivas miradas.
Elsa: Ya han dormido lo suficiente.
Sakura: Así que no sean tan perezosos.
Dijeron las dos hermosas reinas con demasiada diversión en sus palabras, con esto sólamente logrando realizar que un aura depresiva envolviera totalmente el cuerpo de sus respectivos esposos elementales de Althohalla.
Sasuke: Ya nadie nos respeta.
Naruto: Este es el terrible precio por ser hombres de bien.
Pronunciaron ambos espíritus guardianes antes de simplemente seguir caminando por las profundidades del enorme bosque de Fiore, aunque a su vez siendo seguidos desde unos cuantos sentimientos más atrás por las dos flamantes reinas, la cuales solo continuaban conversando entre ellas de una forma sumamente tranquila.
Sakura: Si logramos salir de este inmenso bosque, ¿de casualidad sabes como lograr llegar a la gran ciudad de Magnolia?.
Preguntó la pelirosa con un poco de duda reflejada en su mirada, ocasionado a su vez que la reina de Arendelle sacará inmediatamente un pequeño papel doblado de uno de sus bolsillos, para después simplemente desdoblar este mismo papel y revelar lo que parecía ser un simple mapa.
Elsa: Este mapa me lo otorgó Juvia justo antes que nos marcharamos de Arendelle, pero hasta ahora yo no lo quise utilizar, ya que primero quería lograra encontrar a los demás,
Contó la joven pelirubia mientras seguía caminando tranquilamente con el pequeño mapa entre sus manos, mismo que contenía toda la información sobre cómo llegar a la gran y misteriosa ciudad de Magnolia.
Naruto: Quieres decir que tuviste este mapa durante todo este tiempo y nunca no lo mostraste, pudimos haber salido completamente de este miserable bosque desde hace mucho.
Habló el espíritu del viento con un ligero tono de molestia en su voz, provocando que una gotita de sudor comenzará a resbalar ligeramente por la frente de Sasuke, ya que este mismo tampoco sabía absolutamente nada sobre la existencia de ese pequeño mapa.
Sakura: Naruto cállate.
Regaño la pelirosa a su amado esposo de ojos azules con una mirada totalmente aterradora, logrando hacer con esta acción que Naruto comenzará a temblar ligeramente debido al gran miedo que sentía en ese precisó momento.
Sasuke: Qué patético, el gran espíritu del viento temblando por los regaños de su esposa.
Se burló el pelinegro con un ligero toque de arrogancia en sus palabras, ocasionado a su vez que un inmenso enojó invadiera rápidamente en su totalidad la mente del ojiazul.
Naruto: Eres un miserable.
Mencionó el pelirubio con un gran enojo antes de empezar únicamente a tronar sus nudillos.
Sasuke: Y qué harás ahora, golpearme?, inténtalo si puedes perdedor.
Pronunció el poseedor del elemento rayo con una clara burla en sus palabras antes de salir corriendo rápidamente en dirección a la espesura del bosque, siendo seguido de una forma inmediata y a toda velocidad por el actual monarca del hermoso reino de Romalia.
Sakura: Ese par de idiotas, pasan los años y al parecer nunca cambiarán.
Dijo la joven de ojos color esmeralda al momento de seguir caminando mientras llevaba posadas sus dos manos sobre su esbelta cintura.
Elsa: Pero aún así los amamos.
Decía la pelirubia mientras apreciaba como ambos jóvenes elementales corrían rápidamente hacia las profundidades del gran bosque.
Sakura: Tienes toda la razón.
Fue lo último que comentó la reina de Romalia con un inmenso amor reflejado en su mirada, para después ambas mujeres sólo comenzar a reír con una suma diversión mientras que a su vez continuaban caminando tranquilamente por las profundidades del enorme bosque de Fiore, aunque sin saber en lo más mínimo que sus demás compañeros perdidos se ubican ahora mismo demasiado cerca de su zona actual.
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Gran imperio de Fiore.
Ciudad de Magnolia.
9:00 de la mañana.
En el tiempo actual, una gran cantidad de personas se visualizaban ahora mismo recorriendo tranquilamente las concurridas calles principales de la inmensa ciudad de Magnolia, mismas personas que simplemente se apreciaban yendo y viniendo mientras que a su vez realizaban sus respectivas labores del día, tratándose de un simple hecho que se llevaba a cabo con una suma normalidad durante casi todas las bonitas mañanas del misterioso imperio de Fiore.