Tienes unos ojos que conocen la verdadera soledad, ojos que saben que la soledad es el peor dolor del mundo, te lo dije con mucha anterioridad, tienes mis mismos ojos, ojos que buscan poder y que están llenos de odio e instinto asesino, igual que los míos, tienes ojos que están deseando matar terriblemente a aquél que te puso en ese maldito infierno llamado...soledad.
Gran imperio de Fiore.
Bosque de cristales.
Poco tiempo había transcurrido desde qué la hermosa fémina de intenso cabello plateado decidió marcharse junto con los tres pequeños infantes reales a través del brillante escenario boscoso, de esta difícil y dolorosa manera dejando poco a poco detrás a aquél joven hombre poseedor de unos inigualables orbes color azul turquesa, mismo espíritu guardián perteneciente a la lejana región de Althohalla que todavía continuaba observando fijamente a los dos individuos portadores de la terrible oscuridad.
Mismos jóvenes oscuros que aún se podían visualtrucoserriblemente encerrados en aquel grueso ataúd formado totalmente de arena por nuestro querido protagonista de intenso cabello rojo, el cual a su vez simplemente se apreciaba sumergido en un profundo y absoluto silencio mientras que también se encontraba cruzado sumamente de brazos, de esta simple forma esperando pacientemente el devastador contraataque por parte de sus dos malignos contrincantes.
Gaara: ( Tengo que lograr distraerlos el mayor tiempo que pueda ser posible, no debo permitir en lo más mínimo que estos malditos sujetos alcancen a Yukino ).
Pensó mentalmente el joven pelirrojo mientras todavía mantenía una expresión sumamente seria adornando su intimidante mirada, al mismo tiempo que no podía dejar de pensar tanto en su amada compañera de lindos ojos cafés cómo en los tres inocentes infantes reales, los cuales ya posiblemente se podían visualizar ubicados en una zona totalmente segura del hermoso y brillante bosque repleto de mágicos cristales.
Por otra parte, no había transcurrido demasiado tiempo para que aquél grueso ataúd formado completamente de energía elemental fuera destruido por completo de una manera sumamente fácil, ocasionandose a su vez con este descomunal acontecimiento que una tremenda cantidad de arena quedará totalmente esparcida por todo el bellísimo y brillante escenario boscoso, de esta simple forma revelando la silueta de dos jóvenes que al mismo tiempo se encontraban observando terriblemente al actual espíritu de Althohalla.
Mismo joven elemental originario de la misteriosa región de Fiore que no parecía estarse dejando intimidar en lo más mínimo por los dos individuos poseedores de la terrible oscuridad, de esta valiente manera logrando demostrar una enorme voluntad y determinación reflejada en su fulminante e intimidante mirada.
Kagura: Espero no hayas pensado que realmente no sabías derrotado.
Hans: Ya que eso sería una tremenda e inmensa estupidez de tu parte.
Dijeron los dos poseedores de la inmensa oscuridad con un tono sumamente burlista en sus respectivas palabras mientras todavía continuaban observando fijamente al joven de intenso cabello rojo cómo la espesa sangre, mismo espíritu guardián perteneciente a la lejana región de Althohalla que sólamente permanecía pensando en una estrategia para lograr vencer a sus dos terribles adversarios.
Kagura: Bien, creo que es mi turno de atacar, así que prepárate idiota.
Habló la hermosa fémina de intenso cabello púrpura con una notoria seriedad reflejada en su mirada antes de decidir alzar y dirigir una de sus suaves manos en dirección al individuo de inigualables ojos color azul turquesa, provocando a su vez con éste acontecimiento que el actual poseedor del devastador elemento tierra no dudará en adoptar inmediatamente una clara posición defensiva, de esta manera el joven pelirrojo permaneciendo sumamente preparado para poder afrontar cualquier ataque que pudiera recibir directamente por parte de sus dos terribles contrincantes oscuros.
Kagura: Kaze Oi Ya ( Flechas Perseguidoras De Viento ).
Pronunció la terrible espíritu oscuro con un inmenso odio en su voz antes de que una intensa aura de color púrpura comenzará a envolver por completo todo su hermoso cuerpo, para después proceder a crear lo que parecían ser tres medianas e imponentes flechas formadas totalmente de viento, las cuales a su vez se podían visualizar desprendiendo una tremenda cantidad de completa energía elemental.
Gaara: Esas simples flechas de viento desprenden un increíble poder mágico, tengo que tener demasiado cuidado.
Susurró ligeramente el actual consejero real perteneciente al nevado reino de Arendelle al momento de estar observando las tres medianas flechas formadas totalmente de energía espiritual, mismas flechas que al parecer se apreciaban siendo controladas por la mano que la fémina de hermosos ojos púrpura todavía mantenía apuntando en dirección al joven espíritu guardián de Althohalla.
Hans: Será mejor que te prepares, ya que estas a punto de morir en este miserable lugar repleto de vegetación.
Decía el antiguo príncipe de las lejanas islas del sur con una expresión sumamente burlista en su mirada mientras se encontraba ubicado de pie justo a un costado de su maligna y hermosa compañera, misma fémina de intenso cabello púrpura que simplemente se apreciaba observando fulminantemente al flamante poseedor del increíble elemento tierra, el cual a su vez se podía visualizar completamente preparado para poder continuar con la devastadora e inevitable confrontación.
Kagura: Muere espíritu guardián.
Mencionó la maligna mujer portadora de la devastadora magia elemental antes de proceder a lanzar sus tres inminentes flechas formadas totalmente de viento en dirección a su poderoso contrincante, mismo espíritu guardián perteneciente a la lejana región de Althohalla que simplemente se podía visualizar observando cómo aquellos terribles ataques producidos por parte de la enfurecida pelipúrpura se dirigían velozmente contra su persona.