Fuego en la sombra

Capítulo 2 --- Recados, cigarros y silencio

El primero encargo serio no fue drogas ni armas fueron dos cajetillas de cigarros y una coca bien fría.

---pero sin gas,¿Eh? Que no se te olvide --- dijo el Neto

Tirado en un banquete con los ojos medios cerrados y un gallo en la mano ---. Si llega con gas,te lo metes por el culo.

Santiago asintió sin decir palabra, camino tres cuadras,entro ala tienda, compro lo pedido, se lo entregó y se fue sin pedir nada. Al día siguiente, Neto lo llamó de nuevo. Está vez fue una bolsa sellada con cinta gris.

---Esto lo vas a dejar en la casa de la doña que vende menudo,pero no le digas nada.Nomas se lo das y te vas. ¿Si entiendes?

---simón---- respondió

Así pasaron semanas,encargos simples,pequeños.pero cada uno le dejaba un billete doblado que no venía de su madre, Santiago lo guardaba sin alardear,sin gastarlo ñ. Lo que más le importaba no era la lana,sino lo que estaba construyendo: respeto, silencio, confianza.

Los morros de la cuadra empezaron a mirarlo distinto. No se metían con él,pero tampoco lo invitaban a jugar. Los adultos bajaban la voz cuando pasaba. Su jefa no decía nada, pero a veces lo miraba con una tristeza que no se aprecia a nombrar.

---¿Y ese billete,de dónde lo sacaste? --- le pregunto un día.

---Ayudé l carnicero a cargar unas cajas ---mintió sin parpadear.

Doña Irma suspiró,como si quisiera creerle.No insistió.

Santiago seguía sin saber qué llevaba exactamente en esas bolsas,ni para quién. No preguntaba ya entendía que en su "mundo",hacer preguntas era peligroso... Y responderlas,todavía más.

Una tarde,el Neto le lanzó una mirada distinta.

---Tú aguantas vara, morro. Me gusta eso. A ver si no te quiebras cuando te toque algo más pesado.

Santiago no respondió,solo asintió.por dentro algo se movió




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