Jimin.
—Oye... ¿No tienes algo que confesar pequeño prepago?— nunca pensó en cuanta comida le saldría de la boca, de lo sorpresiva que pudiese ser una sola frase para él.
—¡¿Qué cosas dices?!— ¿A qué se refería? No sabía a qué venía eso.
—Acaso ya no tomas notas por comida, sino que le das besos, eres una zorra astuta— era un hijo de puta, un completo hijo de puta. —Auchh creo que se rompió mi tabique— otra vez tenía el ceño fruncido, estaba algo molesto, ese imbécil le había visto besarlo.
—Oraré mil veces porque así sea— el rubio tomó su refresco y se puso de pie. —Ya con esto debes saber que debes decir y que no debes decir en frente de mí y peor si eso implica mencionarme, a veces creo que la vida te trata demasiado bien—
—Pero mira y opina...— mencionó Jin con una sonrisa. —¿No es tu Jeon con una chica?— había acertado. —¡Oh por Dios! ¿Estás viendo eso? Enrollo su brazo con el de él, ¿te vas a quedar ahí parado mientras te roban a tu hombre?— su ceño estaba fruncido, ¿Por qué debían molestarle ese tipo de cosas? No le interesaba en lo absoluto, no eran nada.
—No es de mi incumbencia, ahora dame permiso... iré por un poco de agua— por alguna razón sentía una presión muy molesta en su pecho.
Finalmente, el receso, a lo lejos, le pudo ver de pie solo. —¡Jung...!— ahí estaba esa chica de nuevo, ¿Que era lo que quería? —¡Jungkook!— ¿Acaso era ella Jeon? Se estaba acercando mientras Jungkook seguía su camino.
—Así que tú eres el famoso Jimin— inconscientemente había asentido, con que le habló de él. —Pero qué incompetente— ¡Que! Le había sacado la lengua. —Espero que no te moleste nuestra cercanía ¿Sabes? Me gusta Jeon, tenemos mucho en común, viendo desde mi punto tú tienes todas las de perder— ¿Qué? ¿Acaso estaba declarándole la guerra? No, por supuesto que no, porque él y Jeon no tienen nada, no debería importarle, inclusive no le interesaba.
—Mocosa insolente, quédatelo al cabo ni me interesa— ¿Por qué rayos sonríe? Qué cínica.
Estaba hecho, le iba a ignorar, no iba a hablar nuevamente con Jungkook. —¡Jimin!— ¿Por qué ahora? Huir. —¡Park!— le tomó del hombro dándole un giro completo. —¿Hice algo mal, Por qué siento como si me ignoraras?— y lo preguntaba? No, no le interesaba, no estaba celoso ¿O sí?
—¡¿Qué? ¡Por supuesto que no!— exclamó y Jeon se echó a reír.
—Estás muy nervioso hoy, quería ver sí... podríamos comer juntos— acaso... ¿Se había sonrojado? No seas una niñata Jimin.
—¿Qué tiene de malo comer con esa insolente? — señaló hacia donde estaba la enana mocosa.
—Ah, ¿Grace? Ah... eso es lo que te molesta, déjame explicarte. Conocí a su tío en una feria para personas con discapacidad auditiva entonces nos hicimos amigos y me pidió el favor de ayudarle al ingresar a la universidad, Grace al igual que yo sufro del oído y estamos en la clase de señas, de hecho tenemos mucho en común— el estaba sonriendo al hablar de otra persona... ¡Vamos Jimin no te interesa en absoluto!
—¿Por qué comer conmigo y no con ella, sabes? Creo que son muy compatibles, deberías invitarla a salir, ella es muy bonita y es una chica, tienen mucho en común— bravo Jimin, quitaste su sonrisa ¿Ahora cuál era el puto problema?
—Pero quién me gusta...— no podía oírle, corre Jimin, corre todo lo que puedas, pero no podrás escapar por más velozmente que lo hagas.
—¡Nos vemos en la fiesta de mitad de año universitario!—