CAPÍTULO 2: TRAGEDIA

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Milosh sabía lo que se avecinaba, aún siendo pequeño para "entender" lo que estaba pasando con la señora Mary, él se sentía triste, porque Grace pronto perdería a su madre, Grace perdería a su única familia en éste mundo. Milosh trataba cada día de hacer felíz a Grace mientras esta vivía agena a la tragedia que se avecinaba. Él sentía que tenía que protegerla, no porque fuera una obligación, sino porque ella se había convertido en parte de él.

Los ánimos del señor Osiris estaban por el suelo, ya no sonreía tan amenudo como lo hacía de costumbre, la señora Emilia estaba agena a lo que le pasaba a la señora Mary y eso hacía sentir a Mary aliviada por un lado, porque cuando ésta quisiera enterarse ya ella no estaría presente, pero por otro lado su alma sufría con la pena de partir a destiempo, porque era una mujer joven que dejaría a su pequeña hija en la orfandad por segunda vez y no podía hacer nada para impedirlo.

Fuera de la gran casa o más bien mansión se encontraba Milosh y Grace junto a Natacha y Royel Alejandro Almirante, niños vecinos de la familia Adams, estos eran también de una familia de renombre en toda Umbrella. La niña Natacha tendía a ser irritante y envidiosa, a ella le molestaba que Milosh le prestara más atención a Grace, ella no entendía el comportamiento de Milosh, pero era muy pequeña para poder interpretar lo que Milosh sentía por Grace. Royel era un niño muy bromista, pero sus bromas llevaban maldad, éste solía carecer de respeto por las personas o cualquier cosa que tuviera vida a su alrededor, pero esto no impedía que los niños se deleitaran jugando en el jardín de la mansión mientras que la señora Mary contemplaba con nostalgia desde dentro de la casa a su amada niña Grace.  

Grace se detuvo de jugar al ver que su madre los observaba jugar y corrió a los brazos de ella, al llegar Grace ante su madre la abrazó, tal fue el momento que el sentimiento de dolor embargó a Mary que sus lágrimas comenzaron a brotar y el nudo en su garganta no se hizo esperar, al notar la pequeña Grace que su madre lloraba empezó ella también a llorar, pero ella no entendía por qué su madre lloraba, dolor y más dolor era lo que la señora Mary sentía. Grace tomó en sus manos el rostro de su madre e inició a acariciar su rostro y habló.

ㅡNo llores mami  ㅡle decía su pequeña hija acariciando su rostro.

La señora Mary sonrió con pesar al ver la inocencia de su pequeña Grace y la envolvió en un fuerte abrazo y susurró un te amo hija mía en su oído izquierdo. Grace volvió a salir en dirección hacia donde se encontraba antes de entrar a la casa, pero ya Natacha y Royel no se encontraban, sólo estaba Milosh sentado en una piedra con la cabeza gacha, Grace terminó de acercarse a él y colocó una de sus manos en el hombro derecho de Milosh y éste se enderezó y al verla sonrió dulcemente, la tomó de su mano derecha y corrió con ella por los campos verdes de Umbrella.

Cuando llegaron a una pradera se recostaron en ella y mientras admiraban el cielo Milosh conocer los pensamientos de Grace.

ㅡ¿En qué piensas? ㅡtrata de indagar Milosh observándola de lado.

ㅡLas nubes son tan hermosas, esa tiene forma de corazón ㅡdice Grace y señala una nube que se puede apreciar en el cielo.

Milosh al escuchar lo que dice Grace se queda sumido en sus pensamientos y se pregunta como puede ayudar a Grace y a la señora Mary, el buen corazón de éste niño era sin duda alguna uno de los mejores que tenía Umbrella. Al momento Grace se pone de pie y comienza a corretear sintiéndose libre, ella sueña con ser un alma libre, viajar y conocer lugares físicamente, porque con sus pensamientos viajaba fuera del universo, Grace ya sabía leer  y esto es gracias a que fue instruida en la lectura por su amada madre, leer era uno de los legados que su madre le dejaría, su madre le decía que Amar la lectura es más que ver diez, cientos y miles de palabras que encajan a la perfección, amar la lectura es poner tu imaginación a volar, amar la lectura es poner tu corazón a sentir cada gota de sentimientos derramadas en dicho escrito, amar la lectura  es adentrarse en aquellas palabras que te hacen cambiar de percepción, amar la lectura  es ser el personaje principal y amar a cada uno de los extras por igual, amar la lectura es llegar a odiar al malvado del escrito como que si tu fueras el mismo personaje principal encarnado, la lectura es conocimiento, es vida, es paz, es curiosidad, pero sobre todo es amor a cada verso o prosa que lleva un mensaje no sólo de amor.          

Milosh se deleitaba viendo a Grace, él se sentía alegre al saber que Grace era felíz, él también se puso de pie y comenzó a corretear con Grace compartiendo la alegría que sentían en ese momento. El día empezó a tornarse oscuro y era la señal de que una fuerte lluvia se aproximaba, así que corrieron por la pradera a fin de llegar al camino y regresarse a casa, cuando estos venían en el camino que los llevaba a casa, pasó rápidamente un carruaje y luego otro carruaje más, Milosh y Grace se aorillaron al ver la velocidad que estas llevaban, esto a Milosh le impregnó un mal presentimiento y tomó de la mano a Grace y corrió junto a ella lo más rápido que pudo para llegar a la casa y ver que pasaba, él no quería imaginarse lo peor, él trataba de bloquear esos pensamientos. Cuando llegaron al frente de la casa efectivamente estaban los dos carruajes en frente de ella, cuando de pronto se escuchó un estruendoso llanto proveniente de dentro de la casa, Grace y Milosh corrieron dentro llenos de curiosidad.

Al estar dentro vieron que todo el personal de la mansión estaban en un sólo lugar, la habitación de la señora Mary, Grace al ver esto se soltó de la mano de Milosh y entró a la habitación de su señora madre y ella.

Grace quedó en un estado de shock, pero unos segundos después reaccionó y se abalanzó sobre  el cuerpo inerte de su madre que yacía en la cama, Grace lloraba a gran voz sin poder creer que había perdido a su tesoro aquí en la tierra, los presentes al oír el llanto de Grace lloraban por el dolor que estaban experimentando en aquel terrible momento, Grace lloraba amargamente pidiendo que vuelva, que no la dejara sola, que la llevara con ella, que sería una mejor hija, que ya no sería tan extrovertida, que sólo ella pedía que volviera, que a quién llamaría madre, que a quién abrazaría si ella no estaba, que con quién hablaría de su día, que quién hablaría sobre chicos, que a quién le contaría sus secretos si no era a ella, que ella no la podía dejar como lo hizo su papá,  al escuchar esto los presentes lloraban aún más porque Grace tenía razón. El  señor Osiris ese día no estaba en casa y cuando llegó se encontró la muerte de su amado primer amor, éste lloró como nunca lo había hecho, posó sus manos en el rostro ya palideciente de la señora Mary y lloró, lloró amargamente, el dolor que sentía era incomparable, Osiris abrazó a Grace y ambos lloraron como padre e hija que habían perdido al ser más amado en este mundo, una madre, un primer amor.