—¿Por qué lo miras de esa forma? —preguntó Yixing a su rubio amigo.
—Se ve realmente guapo, ¿ya viste el color de su cabello?
Lo cierto es que Suho observaba a Chanyeol como si la vida le fuera en ello, después de no verlo durante unos días en los que el orejón no había asistido al colegio, podía asegurar lo mucho que le gustaba.
—Uhm... es un color no muy común —soltó el chino, porque sí, Yixing era chino—. Pero se le ve lindo, Junmyeon —Suho puso sus ojos en blanco al escuchar al castaño llamarlo por el nombre que estaba escrito en su acta de nacimiento, básicamente su nombre real aunque todos —menos Yixing está claro— le dijeran Suho por petición de él mismo.
—Me gusta, Chanyeol —admitió derrotado.
—A mí también, es buena persona —realmente Junmyeon se preguntaba por qué había elegido como mejor amigo a ese torpe chico, probablemente todo era culpa de ese hermoso hoyuelo y la sonrisa que por ende lo acompañaba o tal vez la inocencia que emanaba de él.
—Me refiero a que me gusta de una manera... más bien... amorosa; creo.
Yixing pareció comprender por fin ya que sus ojos se abrieron grandes. Suho estaba más relajado.
—¿Y por qué no te haces su novio? —el chino se encogió de hombros mientras hacia un avioncito de papel con un folleto que había encontrado en la mesa de la cafetería en la que ahora almorzaban.
—No es tan fácil como crees, unicornio, a él le gusta alguien más, además ya me ha rechazado varias veces, sólo me queda mirarlo desde lejos.
Yixing contuvo las ganas de reír ante el apodo que se le había puesto tiempo atrás, él no era un unicornio pero no pensaba discutir, por otro lado no tomó muy enserio la historia de su mejor amigo, el chino podía ser despistado, olvidadizo, un poco ingenuo y hasta algo tarado pero conocía muy bien a Junmyeon, ese "me gusta" se le pasaría en cuanto alguien más que llamara su atención apareciese.
—Pues entonces fíjate en alguien más, en eso eres muy bueno —Zhang Yixing miró orgulloso el perfecto origami entre sus manos, ahora tenía que probar si volaba.
—¿Debería fijarme en ti? —soltó coqueto el rubio teñido, sabía que ese tipo de cosas ponían nervioso a su amigo y para Suho, ver a su unicornio nervioso era la mejor vista.
—N—No, claro que no, yo n-no me refería a eso —el efecto del coqueteo de Suho estaba siendo evidente al ver las mejillas sonrojadas de Yixing, la vista del chino se posó en el brazalete que el mismo Junmyeon le había obsequiado para el día de los enamorados pero no se confundan, Suho le había dejado muy en claro a su amigo que era sólo porque sabía que el castaño no recibiría nada.
La campana que indicaba que el descanso había terminado sonó obligando así a que el par de amigos se separan, el unicornio iría a un aula de un grado inferior mientras que Suho se quedaba en la misma que su querido Yeol.
—Ya, sólo bromeo, Zhang, te veo después de clase —con esto Suho tomó la barbilla de su amigo para despedirlo con un beso de lengua que a Yixing se le antojó delicioso. Se preguntaba por qué dejaba que el rubio lo tocara y besara de esas formas si ellos sólo eran mejores amigos, no se suponía que los amigos tuvieran sexo casi todos los días y se besaran en cada rato que tenían libre, no se suponía que el chino sintiera mariposas en su estómago cuando Junmyeon lo follaba.
—Estoy frito, Yixing —se quejó Suho mientras miraba acostado desde la cama del chino como este se desnudaba y se colocaba su pijama con dibujitos de pandas. Como casi todas las noches, el rubio se encontraba en casa del castaño, se preparaban para dormir después de haber pasado la tarde ayudándose el uno al otro con sus tareas.
—¿Por qué dices eso? —Yixing se acostó junto a su mejor amigo mientras apagaba la lámpara que tenía al lado.
—Bueno, si no me equivoco, a Chanyeol le gusta el estúpido de Baek —se giró para quedar cara a cara con el "unicornio".
—Oh, bueno, supongo que eso es algo malo —Zhang (al contrario de Junmyeon) se giró dándole la espalda a su rubio amigo, estaba listo para descansar y preparase para otro atareado día de escuela.
—Ajá —el mayor se acercó por detrás a Yixing, rodeándole la cintura con su brazo y hundiendo su nariz en la curvatura de su cuello—. Te necesito ahora —susurró para después soltarle un beso en el cuello, Yixing frunció un poco el ceño, él realmente quería dormir y estaba bastante cansado.
—¿Tiene que ser ahora? ¿No podemos dejarlo para mañana? —murmuró.
—Ahora, bebé —susurró en respuesta el rubio colando su mano a la entrepierna del chico castaño.
Junmyeon no entendía lo que le sucedía con su amigo pero le deseaba como un drogadicto a la cocaína, todo había empezado desde la primera vez que habían dormido juntos, desde ese día a Suho se le había hecho casi imposible contenerse, la única vez que intentó no llevarse al chino a la cama, bueno, terminó causándole un dolor de caderas increíblemente fuerte y casi insoportable al chico debido a la fuerza de las embestidas pero, es que estar una semana sin tener a Zhang le había sido una tortura.