CAPÍTULO 17 - El castillo Oscuro -

        El dolor aun, le causaba agonia a Max. Se desperto con mucha preocupacion, deseaba saber que pasaba con los demas. 

    Pues los problemas aun no habian sesado. Se levanto estando solo, Busco con al mirada en todos lados. 

       Pero no encontro ni una sola señal de vida. 

          - !Nick! - !Diana! Gritaba en busca de que alguien le respondiera. 

      Un ruido el cual provenia de la afuera del lugar, lo dejo paralizado.  Sigui con la busqueda, y a los pocos segundos encontro algo medio peculiar. 

           La reyna de la esfera del Phenix se encontraba hablando con Nick. A Max, le parecio sospechoso aquel instante. 

     - ¿Se supone que me perdi de algo? Dijo Max con precausion. 

           - Bueno, ya desperto, dijo Nick, en voz alta como si deseara que los demas oyeran sus palabras. 

     Max aun parecia no enter la situacion. Era como si todo hubiese cambiado repentina mente. 

       - ¿Acaso es un sueño? Dijo Max. 

       - Claro que no tonto. La señorita Yun. Nos ayudara. Ella es la princesa de la esfera del Phenix. 

        Las palabras de Nick lo despertaron al instante. Entonces estaba claro que Aquel ser rojo era dueño de la esfera del Phenix. 

      Yun se acerco a Max. Lo observo en todas direcciones. 

           - Vaya al menos tienes amigos Guapos. Dijo Yun mientras se acomodaba el pelo. 

       - ¿Oye y donde esta Diana?. 

            - Ella esta vijilando la entrada. Supongo que regresara despues. 

       - Yo...yo la ire a ver a hora. Dijo Max como si quisiera gritar. 

          Al salir de la pequeña casona, se dirijio a la parte mas oscura del lugar, al parecer conocia muy bien a Diana. 

    Apenas la vio se acerco lentamente. 

              - Diana. Susurro. 

        - Dime. ¿Paso algo?        - No exactamente, ¿pero no quieres entrar? Dijo delicadamente. 

          - No te preocupes, yo estoy muy bien aqui afuera.         - No lo creo, esta haciendo mucho viento... 

      Diana giro la cabeza para ver directamente a los ojos de Max. Lo miro como si quisiera decirle algo. 

        - ¿Acaso te preocupo?.           - No... no es tanto eso, tu sabes que es peligroso quedarse aqui afuera.

          - Claro, claro...Em....¿Oye al ver a esa mujer, que se te paso por la cabeza? 

      - La verdad, no penze que fuera a estar de nuestro lado, al principio la vida peleando con Nick, entonces supongo que deve haber pasado algo inesperado. 

      - Jsjs, claro. Desde que nos conocimos, jamas me di el tiempo, para entender por que te aprecio mucho. 

        - Yo me decidi a buscarte aquel dia, pero al principio no me di cuenta...No queria creerlo. Por ello jamas dije nada. 

      Diana se acomodaba el cabello tranquilamente. Su delicadeza parecia resaltar a cada segundo. A Max le parecio agradable el momento. 

      ¿Pero que tendrian en comun ahora, una Dibrex y un Dex? 

         Quisas solo era una ilucion. Max se sento al lado de Diana, esta se encontraba parada, asi que tomo la decicion de hacer lo mismo. 

       - Bueno, entonces conversemos un poco, ¿te parece? Dijo Max con una leve sonrisa pasmada en su rostro. 

        - Bueno, ya que. 

    Al mirar el cielo la noche parecia haber comido las nubes y la luz por completo, tanto asi que parecia que jamas iba a volver el día. 

         - El mundo parece ser corto. Pero en realidad todo va mas haya de nuestras perspectivas. 

       - Pues, nick me enseño que todo depende del pensamiento.     - ¿Tu crees que sea cierto? 

        - Pues claro. ¿Por que no? Dijo Diana feliz.

                   - Ademas, no depende de creer, depende de sentir, nuestras opciones, depende de nuestra forma de ver las cosas. El mundo jamas dejara de existir. Pero las generaciones tendran que cambiar para que el mundo y el universo sigan su camino. 

       - Ok... Oye tu que opinas de los paises. Como china, Italia, Perú o Brazil. 

          Estos paises, estan empezando a viajar. Quisas en algun momento los veamos diambulando pro hay. 

     - ¿Por que no les compartimos nuestro conocimiento?.         - Hay querido Max. Durante decadas lo hemos hecho. El punto es que lamentablemente la humanidad primitiva jamas quiso escuchar ni entender ni buscar.  Ellos solo se aficionan con respuestas que no estan a el alcanse basico de su entendimiento. 

         - ¿Tu crees?.. Comento Max, nuevamente.  Diana se acomodo y le cogio la mano. 

        - Dime lo que sientes. Dijo mientras lo miraba a los ojos. 

                - Yo...yo siento tu mano, que más. 

              - ¿Pero que sensacion te hace tener?. Pregunto traquilamente. 

                  - Pues, ¿me puse nervioso y algo feliz?. 

            - Ese es el problema, muchas veces lo inesperado solo es algo inesperado, ¿pero que pasa si nos pasa algo que ya conocemos? 

        - Si fuera asi, el mundo pudo haber cambiado hace mucho tiempo. Solo nos dejamos llevar por nuestros instintos, y nuestra base material. Sin darnos cuenta que todo lo que sentimos en realidad es algo crado por nosotros, algo que nos ciega con el paso del tiempo. 

      - ¿Y todo devido a que no nos ponemos apenzar en la razon real?. Dijo Max mientras esperaba una respuesta rapida de Diana.     - No exactamente, todo empieza desde nuestra niñes, al acostumbrarnos a una cosa, nos acostumbramos a penzar en lo que creemos conocer correctamente. Pues si es algo que no conoces o entiendes por más que te pase acada rato, jamas podras acostumbrarte, jamas te gustara, jamas sentiras y jamas conoceras la verdadera razon del por que. 

     - Entonces, por conclusion, todo base empiesa desde el no conocer, y evoluciona con la investigacion. Los resultados pueden ser muchos, pero jamas seran exactos, ya que mientras busquemos respuestas a csoas que no entendemos, deveremos pasar por todo ello, para recien tener un concepto real de lo que es realmente ello.