Génesis

CAPÍTULO V: Soluciones

La estrategia para desviar la atención fue todo un éxito, Zach ha presentado el informe a la junta y nuevamente atribuyendo el mérito a Jane. Decide hacer una propuesta para desafiar a Arthur y Mattsson, quiere a Jane como co-directora, expone que sin ella el departamento de publicidad caerá, es joven, fresca y muy inteligente, con mucha innovación, la necesitan para su siguiente lanzamiento. Con susurros la mayoría de la junta acepta, entre ellos Marc y Roman. Por otro lado Arthur se opone a darle tanto poder a Jane. No confía en ella y deja ver la decepción que siente por Zach al no poder ser capaz de manejarlo por sí solo. Pero Zach insiste en que le den una oportunidad y una nueva imagen a la compañía, será visto con buenos ojos por la nueva generación, Arthur ineludible por los presentes, acepta con la condición que el próximo lanzamiento supere las ventas anteriores o Jane tendrá que irse. Zach acepta el reto y sale en busca de ella.

Jane está en el baño de mujeres hablando con Perla, quiere que ayude a Lottie a adaptarse rápido y pidiendo disculpas anticipadas por su comportamiento, recibe un mensaje de Noah, quiere verla en la noche con urgencia, no da mucha importancia, de seguro es el viaje que están planeando desde hace dos semanas. Cambia el tema rápido por saber más acerca de la relación con Roman, que sigue negándose a terminar el compromiso con la otra mujer y formalizar todo con ella. Jane la siente desanimada, sabe que el único camino es dejarlo y seguir adelante, aunque eso signifique dejar el trabajo e incluso la ciudad porque Roman jamás la dejará en paz. Perla se encuentra en una encrucijada entre su bienestar y el amor no correspondido, Jane la abraza para intentar calmarla.

Nuevamente en la oficina, encuentra a Zach husmeando en su escritorio, esto provoca que la adrenalina recorra todo su cuerpo, sin dar una oportunidad para explicarse, alza la voz y lo acusa de intentar sabotear de nuevo su trabajo:

- Esta vez no le voy ayudar a quedar bien con la junta, ¡Aléjese de mis ideas!

- Jane uno, cálmate. Dos, déjame explicarte que estoy haciendo y tres ¿Por qué me habla de usted?

- Uno, no me pida que me calme. Dos, sé qué haces y esta vez no saldrá igual y tres porque no somos cercanos, solo conocidos.

- Esto - Zach enseña un documento donde está escrito el nuevo nombramiento de Jane Paulis como co-directora - es lo que vine a dejar en su escritorio, felicitaciones puede ir a celebrar con su novio y amigos.

Zach deja caer la hoja y abandona la oficina antes de decir más cosas que no quiere, Jane lo mira perpleja, recoge el documento, lo lee y no puede creerlo, queda más confundida que antes, la situación con Zach parece un yoyo, agarra el teléfono y llama a Marc para contarle. Ellen pasa por la oficina y escucha la cálida conversación con Marc, los celos se le suben a la cabeza y sale en busca de algo para vengarse de Jane.

Marc, Roman, Perla, Lottie y Noah esperan a Jane en el bar de siempre, celebran su nuevo nombramiento. Lottie puede notar el rostro preocupado de Noah, ha llegado a conocerlo mejor y sabe que algo se tiene entre manos. Noah indica que algo extraño sucede en la compañía, la ha estado investigando en los últimos días y solo quiere que Jane se aleje antes que sea demasiado tarde. Lottie se enoja por su comportamiento, piensa que son más celos por Zach que preocupación por Jane y él lo niega cambiando el tema y preguntando por Jane que aún no aparece.

Jane llega en un taxi al apartamento de Zach, se ha torturado pensando en lo pesada que ha sido, él solo ha intentado redimirse y ella se lo ha negado, ahora solo quiere disculparse por haber sido grosera en la mañana. Al bajarse del taxi, ve saliendo del parqueadero a Arthur, la duda y desconfianza con Zach aumenta, no entiende qué relación tiene con el gran jefe. Espera unos segundos a que desaparezca y sube al apartamento, toca y un Zach con el torso desnudo y una cerveza en la mano la recibe. Jane queda enmudecida, sus músculos apenas perceptibles y su abdomen bien formado bloquean su mente y por unos segundos olvida para que fue hasta ahí. Zach la saca de ese estado y la hace reaccionar, sonríen y la invita a seguir. Él está estupefacto, es la visita que más espera y la que menos podría darse y aun así ahí la tiene en la sala de su hogar:

- ¿Qué hace aquí?

- Vine porque quiero… porque quiero… no, quiero saber qué pasa con el señor Turner.

- ¿Por eso? Mmm… no es de su incumbencia.

- ¿No? Porque es la persona que más me detesta y tiene una carpeta con su nombre y ahora viene a visitarlo en horas no laborales, ¿es algún complot?

Zach ríe como nunca lo había hecho, no puede creer lo paranoica que está siendo Jane, pero sabe que debe dar una respuesta rápida o esta vez si no podrá recuperar la amistad que por idiota perdió:

- No tiene nada que ver con la compañía, mucho menos con usted, son asuntos personales… con mi familia.

- ¿Me estás diciendo la verdad?




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