Esa chica

"Solo un momento  basto para enamorarme  de esos ojos marrones  y ese cabello rubio  quien diria que ella se convertiria en mi perdicion"

Hey Renne vamos rápido antes de que venga el señor Scott – Jason hablo mientras jalaba la sudadera de su mejor amiga para salir de la parte trasera de la escuela, donde ellos se encontraban fumando marihuana, salieron de ahí pero alguien había logrado verlos… -

Mierda Jason el señor Scott –Rio Renne mientras esta era jalada por su mejor amigo, mientras el viejo gordo los intentaba alcanzar, ellos tiraron el bote grande de basura impidiéndole más el paso, ellos dos rieron hasta llegar a sus bicicletas-

Eso estuvo estupendo Renne viste su cara de enojo –Su mejor amigo soltó una carcajada- le llevara horas limpiar todo eso –De reojo Renne lo veía pensando cómo podía ser el su mejor amigo, si a veces era una idiota-

Tu tuviste la culpa, por querer poner “la escuela es una porquería” –Lo regaño su mejor amiga, Jason paro la bicicleta-

Lo sé soy un genio, no creo que eso lo pueda limpiar para mañana, ven fumemos un poco.

Jason y Renne se detuvieron en un parque estaba oscureciendo, el saco un par de cigarros, aun que ella casi no lo hacía, no le molestaba, en cambio el sí, lo hacía a diario el decía “Un cigarro mata un mal momento, mientras te mata a ti lentamente”, en ese momento que ellos fumaban, ella la vio, a pesar de lo oscura que estaba la noche, su piel blanca resaltaba entre tanta oscuridad, esos ojos azules como el mar, su cabello rubio cayendo desde los hombros hasta las caderas, era una diosa, una princesa hecha y derecha, quien diría que una chica como ella había flechado el corazón de Renne con solo verla, R no veía una simple chica, ella veía un ángel pasar.

La chica de los ojos azules había notado que ella la veía, le dio una tierna sonrisa al pasar, cosa que le encanto mas a R, se miraron por unos segundos, su amigo vio ese flechazo en las dos, pero negó, al ver que la linda chica rubia, iba acompañada de un chico, algo grande y corpulento, de cabello rizado y ojos verdes, el sintió que en ese momento habría problemas…

¡La viste Jason, la viste! –Grito emocionada, sacudiendo a su amigo, acomodo su gorro que casi se le caía- Es realmente preciosa…-Susurro dejándose caer en la banca, sonriendo y viendo la luna en la oscura noche-

Si, si la vi –Jason mientras se acomodaba la ropa.- También viste a su novio verdad – La miro serio y severamente-

¿Novio? No ella no venía con nadie, venia sola, con esos hermosos ojos y su hermoso cabello rubio –Suspiro ignorando la mirada de su amigo-

Jason negó ante la reacción de su amiga, ignoro toda esa escena al fin sabía que no la volvería a ver jamás…. ¿O eso creía?

Vámonos Renne ya es tarde y tenemos que llegar a literatura a la primera hora. –Asintió tiro la colilla de el cigarro, para montarse en su bicicleta, tan contenta por a ver visto esa noche a la chica más hermosa del mundo, la persona que sería su amor y su más grande perdición, en unas cuantas calles más, ellos se separaron como siempre, acordaron encontrarse en el lugar de siempre en la mañana, fue a su casa, entro por la ventana, ya que no quería despertar a sus padres, quito su gorro y chaqueta, tomo una ducha de agua fría, sin duda ese ha sido la mejor noche de su vida, R no podía dejar de pensar en esos hermosos ojos, salió se coloco solamente una polera, para poder dormir, pensando en su hermosa princesa… si así la consideraba ella ahora, su princesa, por que cueste lo que cueste seria suya, solo suya.