Prólogo.

La avaricia humana es algo que no conoce de límites, de excesos. Cuando obtienes un poco de poder, luego quieres más y más, hasta llegar a un punto en el que te conviertes en  un adicto de el.

Y te olvidas de todo, de lo que está bien y de lo que está mal, del dolor, de la empatía hacia quienes te rodean. ¿Los lazos afectivos? Se convierten en un estorbo, en un recuerdo sepultado en lo más profundo de tu memoria.

Es así como la vida humana que conocíamos acabo, por la avaricia.

La tercera guerra mundial, llego de a poco. Como una mancha de humedad en tu pared, que va creciendo sin que te des cuenta por dentro de esta y para cuando quieras darte cuenta, una gran mancha oscura aparece en esa pared, sin que tu puedas haberlo previsto.

El gobierno de los Estados Unidos no pudo evitarlo, no lo vio venir, pero en su círculo de confianza grietas comenzaron a crearse y los traidores se reprodujeron como termitas, superando casi en su totalidad a quienes siguen del lado de su Presidente.

Para principio de 2030, se realizó un golpe de Estado, sin que las fuerzas leales pudieran hacer frente y resistirse; y fue así como la mano derecha del Presidente Sloan se posicionó como la líder, como el poder supremo.

La familia presidencial fue exiliada  junto con todos sus seguidores, al igual a la población que se encontraba en contra del nuevo mandato.

Los cambios fueron drásticos, las golondrinas - como se los denominó- fueron forzados a vivir fuera de las ciudades importantes de cada estado para luego ser bombardeados y así eliminar a una gran cantidad de estos.

 Mientras que en las ciudades se vivía con lujo y comodidad los exiliados se la rebuscaban para sobrevivir. 

A partir de ese entonces se vivía con miedo ya que acabar en manos de la ahora nueva gobernante Cleveland era un destino incierto. Quienes desaparecian a causa de las patrullas constantes que se realizaban eran considerados muertos, no se volvia a saber de ellos.

Corría el rumor de que los poderosos realizaban experimentos con ellos, para “mejorarlos”, destruirlos; para quitarles todo lo que alguna vez habían sido. Era allí, en donde dejaban a la vista todo el morbo que les generaba aquello, la destrucción de a quienes no consideraban imprescindibles.

A las afueras de ese macabro mundo,se armaron resistencias, diferentes grupos de exiliados con sus propios líderes que velaban por su seguridad y la prosperidad en sus territorios.

El expresidente Sloan, ahora líder de una resistencia, se esforzaba día tras día para evitar que la historia volviese a ocurrir y para proteger a aquellos que lo había seguido hasta allí.

Su hija Giselle, de apenas cinco años, no comprendía que ocurría solo sabía que ruidos fuertes se habían escuchado, personas gritando la habían rodeado y que ahora debía vivir junto a su padre en ese feo lugar.

Pero, con el paso del tiempo esa niña se convirtió en una adolescente hermosa, con un corazón demasiado bondadoso, dispuesta a ayudar siempre que pudiese. Es por eso que se había capacitado y ahora formaba parte del equipo de rastreo, ellos se encargaban de buscar provisiones, ropa, alimentos y de vez en cuando auxiliar a quienes lograban escapar de ese régimen de maldad - sin importar que esas personas les hubieran dado la espalda hacía años, ellos no conocían el rencor- muy pocos llegaban a tierras de las golondrinas a causa de que eran exterminados antes de pisar esas tierras, Cleveland no aceptaba desertores.

Se las arreglaban para sobrevivir.

 Todo parecía marchar bien, hasta que un día en uno de los rastreos, camionetas negras aparecieron frente al grupo. Intentar defenderse fue en vano, ellos tenían un solo objetivo.

Y las personas de trajes negros que bajaron de allí, fueron a por el.

En julio del 2040, se le dio a Henry Sloan la peor noticia que le podrían dar a un padre.

Giselle Sloan de tan solo 15 años, había sido capturada por las fuerzas de Cleveland cuando esta se encontraba, junto a su grupo, en una patrulla en busca de alimentos.

Su equipo se encontraba frente a ese padre devastado, equipo que no habia recibido mas que solo unos golpes leves para lograr que estos evitaran el secuestro de la joven.

El rumor se esparció a la velocidad del viento en medio de una tormenta, pocas horas después todos los grupos de la resistencia esparcidos a lo largo del país se enteraban de lo sucedido, lágrimas eran soltadas al igual que gritos de agonía y furia, hasta por aquellos que no la había conocido; a causa de que era de conocimiento público, que Giselle Sloan era una de las personas mas hermosas que jamas podrian existir en este podrido mundo.

Ella nunca perdía las esperanzas, siempre tenía una palabra de apoyo y era por esa razón que entre los grupos de resistencia se la llamaba Hope.

Pero ahora, Hope ya no estaba.

Cleveland les había arrebatado algo esencial para ellos, les había arrebatado la esperanza.