Cillian Krane
__¿Cuanto mas estarás así?
La mujer vestida elegante y con la mirada mas fría que el ártico mismo, tomo asiento frente a él. Lo único que los separaba era su mesa de trabajo, una que lo hacia ver encantador y a la misma vez..... inalcanzable.
_Por favor, deja el drama ¿Quieres?
La mujer cruzo una pierna sobre la otra y bufo, llevo su cabello detrás de la oreja y lamió sus labios, ignorando el tono de voz empleado para dirigirse a ella.
_Mejor dime ¿Qué es lo que quieres Hannah?
__¿Por qué supones que quiero algo?
Le dio una mirada penetrante y Hannah se removió en su lugar. Cerro sus ojos y dejo salir un suspiro pesado, dejando atrás a la mujer segura, fría y calculadora que siempre dejaba ver a todos.
Cillian dejo todo lo que estaba haciendo y se concentro en Hannah, quien tenia un ligero temblor en el cuerpo. Abría y cerraba su puño, como si eso fuera un mantra. Solo hasta que abrió sus ojos se dio cuenta de lo gravedad de la situación.
Dejo todo lo que estaba haciendo y tomo asiento al lado de ella, posando sus brazos en sus hombros y dejando un beso en la frente. Solo cuando hizo ese pequeño gesto, Hannah se desmorono de inmediato, dejando salir todas las lagrimas que llevaba guardando consigo desde hace mucho tiempo.
_¿Qué fue lo que sucedió?
Entre hipidos y palabras entre cortadas, Hannah solo dijo una sola palabra.
__Apolo.
Cillian apretó la mandíbula hasta hacer rechinar sus dientes y maldijo una y otra vez.
Cada vez que Hannah perdía de ese modo, tanto, como para mostrar sus sentimientos era, porque algo malo había sucedido con su maldito novio.
Dejo salir un suspiro cansado y la abrazo con una fuerza descomunal.
_¿Te puso una mano encima? y no mientas nanah.
Esta negó. Hubiera querido decir que sí, que Apolo le había golpeado pero, sería mentir. Cillian sintió como dejo salir el aire que estuvo conteniendo ante su negación. Aunque también estaba seguro de que Apolo jamás le pondría una mano encima.
_¿Qué es?
__Es que, es que, no quiere llevarme de luna de miel a Hawaii, quiere ir a México, a ver las pirámides.
Cillian apretó los labios en una línea recta, conteniendo la gran carcajada que iba a salir de su boca, aclaro un poco la garganta antes de hablar. Esta era su hermanita, quien hacia desplantes cuando no conseguía lo que quería.
_¿Y adonde quieres ir tú?
__A la playa, a mostrar toda mi colección de bikinis, a modelar todos mis babydoll que he comprado para.....
_¡Basta Hannah!.
Se puso de pie de inmediato y se alejo de ella. Paso ambas manos por su cabello y comenzó a reír como un loco.
_Si no ha pasado nada grave, es mejor que te vayas de mi oficina y, vayas directo con Apolo. Arregla tu desorden nanah.
Quito su saco gris y lo colgó en el perchero al lado de su mesa de trabajo, hizo lo mismo con la camisa de manga larga, se fue directo al armario y tomo una camisa de manga corta de color negro, con la palabra <Security> escrita en la parte frontal y la espalda, peino su cabello y se hizo una coleta en la parte baja de la nuca.
Su hermana pequeña le iba a sacar canas verdes o, mas bien, un día de estos lo haría matar a su novio por una idiotez como la que acaba de hacer.
__¿No te atrevas a abandonarme en un momento tan crucial como este, Cillian?
Se levanto de su asiento y llego hasta él. Lo tomo de la camisa con ambas manos y le hizo retroceder.
_Eres una mocosa que solo quiere llamar la atención Hannah. Llama a Apolo, conociendo como es, ha de estar buscándote por todo lados.
Hannah mostró un brillo en su mirada ante la mencionado por Cillian.
__No soy una mocosa.
Hizo un puchero para luego, abrazar a su hermano. Siempre era lo mismo.
_Es mejor que te vayas. Esta noche, voy a trabajar.
Eso llamo la atención de ella ¿Trabajar? si era el dueño del lugar.
__No me pienso ir. Me quedaré solo un momento mas.
Cillian asintió y dejo un beso en su cabello y salió de la oficina.
Su hermana lo hacia perder la paciencia. En cualquier momento la agarraría por el cuello y la estrangularía hasta hacerla perder la razón. Al llegar a la entrada de la discoteca, tomo asiento en el banco y, encendió un cigarrillo. Nicolas lo saludo de inmediato. La noche era bastante movida y, eso lo sabía con tan solo ver a toda esa gente esperando por entrar a la discoteca. Esa noche era especial, en el fondo sentía que era especial.
Estaba terminando de fumar su cigarrillo cuando, un trio de mujeres llegaba a la entrada. Frunció el ceño cuando llegaron con Nicolas, este tomo la lista dorada y verifico los nombres. Una de ellas tenia un listón grueso rojo <Novia> y una tiara con un velo del mismo color. La sonrisa de ella era hermosa, hipnótica..... abrazadora y cálida. Su corazón palpito de nuevo como no lo había hecho en años. Al menos no, desde que ella dejo este mundo para siempre. Cuando su novia de juventud partió de este mundo, dejándolo solo y, hundido en su miseria y, en un gran pozo sin fondo.
Cillian poso su mirada en ella, haciendo que se ruborizara al instante. Cillian sonrío por dentro mas no mostró ninguna reacción visible.
Desvistió a la mujer frente a él con la mirada, quito una a una las prendas que portaba. Ese vestido largo de seda en color blanco entallado, tenia una abertura bastante pronunciada, mostrando toda su pierna derecha, dejando visible la media blanca a media pierna, sostenida por un pequeño cinto negro. Un gruñido de garganta salió de Cillian en el preciso momento en el cual, la mujer entro por la puerta de la discoteca. No era suficiente la abertura pronunciada en la parte frontal, no, ella tenia que rematar con el escote en su espalda.