10. Mr.

Cillian Krane

     Termino de ponerse su perfume y, acomodo los puños de su camisa.

     Eran las seis de la mañana y el vendaval andante, acababa de entrar por la puerta principal de su departamento.    Dejo salir un gran suspiro frustrado y le dio una mirada amenazante.    

     __Deberías de tocar la puerta antes de entrar a mi habitación.    Algún día de estos me vas a encontrar en pelotas.

     _Nada que no haya visto ya.

     __¿Disculpa?

     Hannah se atoro con su propia saliva y empezó a toser.    Cillian se acerco a ella y palmeo su espalda un par de veces antes de que esta saliera corriendo de su habitación.

     _¿Me vas a decir que es lo que estoy haciendo aquí Cillian?

     Cambio de tema muy rápido, evitando cualquier tipo de confrontación.    No era nada agradable para Hannah, hablar con su hermano de sexo.   Aun cuando ella le daba entender ciertos aspectos en encuentros que había tenido.

     __¡Hannah!

  La llamo Cillian con los dientes bien apretados y conteniendo un ataque de irá.    Hannah lo conocía a la perfección, por esa razón, muy pocas veces lo hacia perder los estribos.   

     _¡Cillian!

     Contesto del mismo modo.    Mirando sus ojos de nueva cuenta.    Este al ver la determinación en Hannah, maldijo entre dientes y se alejo un poco de ella.   Tomo un par de respiraciones y se alejo de ella.    No quería llegar a cometer ni un solo error.    No quería lastimar a su hermanita con palabras hirientes.    No era una niña, pronto contraería matrimonio.    Pero no se encontraba del todo convencido con ese matrimonio tan repentino, estaba seguro de que algo le ocultaba su hermanita.    Pero no tardaría mucho en encontrar..... el asunto.

     __¿Que haz sabido de ella?

     Hannah recargo su cuerpo en la pared del lado derecho y, cruzo ambos brazos sobre su pecho.    Tomo un par de respiraciones y aclaro su garganta.

     _Se ha ido.

     __¿¡Qué?!

     _Se fue.    Le perdí el rastro.    No es fácil.

     __Mas te vale localizarla Hannah, o no hay luna de miel en Hawaii.

      Hannah se alzo de hombros restando importancia a sus palabras.    A pesar de conocer bien a Cillian, sabía a la perfección que nunca le negaría nada.    Era y siempre será la niña de sus ojos.

    Pero también le gustaba ver como ardía el mundo frente a ella.    Y Cillian era un mecha cubierta de gasolina a punto de encenderse al no poder conseguir lo que deseaba.

     _Tomo un avión a rumbo desconocido.

     Cillian la miró y dudo un poco antes de preguntar lo que tanto anhelaba.    

     __Hannah, no juegues de esa forma conmigo.

     Ella clavo su mirada en él y se dio cuenta de que no mentía.    Noto la preocupación gravada en el rostro de este.     Nunca había visto de esa manera a su hermano.   Al menos no, desde el fallecimiento de su novia.    

     Entonces, Hannah hizo un puchero imperceptible, pero Cillian lo miro a la perfección y entendió lo que se venia.    Sabia que su hermana era una niña en un cuerpo de adulto y siempre se aprovechaba de las situaciones.    Y no lo desaprovecharía esta vez. 

     _¿Qué me das a cambio de la información?

     Ahí estaba.    Ese brillo en las pupilas de ella.   Sus ojos habían adquirido un brillo mordaz.   Es como si se hubiera convertido en un cocodrilo a punto de tragarse a su presa.    Cillian trago saliva cautelosamente e hizo sus manos puños.

     __¿Qué quieres a cambio de información?

     _Me conoces a la perfección Cillian.   Sabes que soy una niña caprichosa, voluntariosa , interesada y con pésimos modales, al menos así soy con las personas que no me apetece conocer.    Soy hostil por naturaleza.    Quiero cancelar mi compromiso con Apolo.

     Pum..... Cillian abrió los ojos a mas no poder.   Pero a los pocos segundo frunció el entrecejo y achico sus ojos dejando unas pequeñas rendijas.

     __¿Qué putas pasa, Hannah?    hace poco querías ir a la playa para tu luna de miel.   Ahora quieres cancelar el compromiso.   ¿A que juegas?

     _Es como si yo preguntara lo mismo Cillian.

     Le dio una mirada de hastió y llena de resentimiento.    Cillian conocía a la perfección todos y cada uno de sus movimientos.    El tono empleado era bastante frío y sarcástico.    Apretó la mandíbula y se alejo de ella.  

     __Te ayudare.   Mas no prometo nada Hannah.

     _No me estas comprendiendo Cillian.

     __Oh, entiendo a la perfección.   Esto no es un puto juego Hannah.    No puedes llevarte entre las patas a alguien solo por tus malas desiciones.     ¿Piensas que soy estúpido?   que no me doy cuenta de las cosas que suceden a tu alrededor, pero yo lo se todo.    Se muy bien el motivo por el cual te quieres casar.    Conozco el motivo por el cual quieres deshacer este compromiso.    La única persona que no se da cuenta eres tú.

      Él, no vendrá por ti, Hannah.    No ha venido en todos estos años.   No vendrá por ti.    Tienes que aceptarlo.

     Los ojos de Hannah se llenaron de agua que se negaba a derramar por completo, parpadeo varias veces para aventar las lagrimas lo mas lejos posible.    Su cuerpo había adquirido un ligero temblor pero no estaba dispuesta a ceder. 

     Cillian se maldecía una y otra vez.     Se maldijo por no poder ayudar a Hannah, pero, ella misma lo había decidido de ese modo.    Sus secretos oscuros, son solamente de ella.    Al final había optado por la salida mas fácil y, descifrar lo que piensa hacer en estos momentos es cosa solamente de ella.   Es una hija de perra.    Pero esa hija de perra, puede incendiar todo a su alrededor para conseguir de nuevo lo que dejo ir, hace años atrás.    

     __Se que no te detendrás en absoluto Hannah.    Se que, cuando quieres algo, lo consigues sin importar las consecuencias.    Quizá hagas algo estúpido, pero, siempre estaré ahí para ti.    Solo espero que, no te arrepientas mas tarde que temprano.