-Diciembre 2017
Elisa, 15 años.
Me encontraba sentada dentro de mi tina que se llenaba de agua mientras escuchaba una de las mil peleas que mis padres tienen día a día, ni siquiera se daban cuenta de que yo también vivo en esta casa y que sus peleas me han estado afectando emocionalmente al igual que sus comentarios sobre mi cuerpo y su falta de amor.
La tina ya estaba casi llena así que tome la navaja y empecé a cortarme, deje caer mis brazos en el agua y yo cerré los ojos poco a poco, por un momento pude imaginarme una vida totalmente a la que he tenido. Pude imaginarme como mi padre me daba tanto amor, me imaginé una vida sin que mi madre me regañara por cualquier cosas, me imaginé un vida sin que mis padres me dijeran que estaba gorda, pero lamentablemente eso no pasó.
Editado: 22.09.2021