Capítulo 6

Así pasó el tiempo, Ita convivía a diario con Bel por las clases que le daba, de lunes a sábado, aprendiendo mucho de sus habilidades, defensa personal, hasta nuevos idiomas, matemáticas, geografía, a disparar, aprendió también mucho armas y la creación de ellas. Convirtiendo su “cuarto seguro” en un gran almacén de armas, zona de entrenamiento y por qué no, también una zona donde podía ir a despejar su mente y descansar. 

en un día “”normal”” Ita se levantaba a las 11am, se vestía y en la ventana notaba un cuervo albino que la estaba observando

Ita: Wow, que hermoso~ -se acercaba a la ventana pero antes de abrirla apreciaba unos segundos la belleza del cuervo y miraba sus azules ojos casi quedando hipnotizada- Espérame aquí, No te vayas, te voy a traer algo~ -la chica salía de su habitación, corría a la cocina, tomaba lo primero que miraba con lo que creía que podía alimentar al cuervo. regresaba corriendo a su habitación pero el cuervo ya no estaba- Ah, bueno. 

Decepcionada la chica terminaba de arreglarse, poniéndose su mejor blusa, pantalón y tenis. Cepillaba su pequeño cabello,

Y como ese día amaneció sintiéndose hermosa, solo ponía algo de brillo en sus labios, mientras lo hacía, pensaba en aquella persona que le acelera el corazón y se sonrojaba pensando si le iba a gustar. salía de la habitación y trataba de controlar sus sentimientos de amor, pues le daba vergüenza que la vieran así.

Ita: Ya me voy Ma’! -decía feliz y emocionada por ya irse porque sentía que era un buen día- 

María: ¿Al entrenamiento con Belzebú? Solo cuídate, sí? No quiero que vuelvas a llegar herida o me va escuchar ese hombre -decía la mujer monstruo, tejiendo en la sala de la casa. Pues la casa ya estaba más habitable a comparación del primer día que llegó Ita ahí. Ya estaba limpia la casa, las paredes construidas y los muebles no eran los mejores pero Ita trabajaba para remodelar eso. Ya tenían donde cocinar, bañarse y una mejor habitación con más privacidad- 

Ita: Esta bien -se despedía de ella dándole un beso en la frente y desaparecía de ahí para aparecer en su dimensión, que parecía ser una gran casa moderna.- Bel? 

lo buscaba en la cocina, pues a Bel le gustaba tomar un café antes de empezar las clases. extrañada al no verlo iba a buscarlo a la habitación de entrenamiento, en la sala de estar y al llegar al taller de armas, miraba que en la mesa había un post it azul con una nota que decía “Feliz cumpleaños, hoy no quiero molestarte con las clases. Mejor diviértete”

Ita: Mierda, molestarme? Pero a mí me gusta verte -decía son un rubor en sus mejillas. decepcionada por que no iba a verlo, miraba la nota y sin arrugar el post it lo guardaba como si fuera un tesoro valioso- Por que mi cumpleaños tenía que ser en sábado? Mañana tampoco lo voy a ver -decía enojada, sacaba su celular que le había regalado Azazel en sus 15 años y hacía una llamada- hey, en dónde estás? ….. Ah, okey, voy para allá….. No, hoy no tengo clases.… Sí, nos vemos! -al colgar la llamada miraba un mensaje que le había enviado una persona con la que casi no convive mucho- Mmm, que raro. 

salía de su dimensión para después irse a un parque con una gran y hermosa plaza. Donde estaba aquel hombre pelirrojo cantando, pues su pasatiempo era cantar en público, a veces Ita lo acompañaba, pero ella solo tocaba la guitarra acústica o hasta a veces eléctrica y bajo. se quedaba mirándolo hasta que este terminaba la canción, le aplaudía al igual que el resto de personas que estaban mirando e iba con él

Ita: Enserio cantas hermoso~ -orgullosa de él le sonreía levemente- 

Azazel: Lo sé querida, dime algo que no sepa~ -decía bien diva el hombre que ya tenía una apariencia de 23 años-

Ita: algo que no sepas? Mmmm, que en una hora y media tengo una cita con Astaroth en un lugar muy elegante y probablemente muy costoso. hasta me envió una caja muy elegante con ropa de marca que quiere que use. 

Azazel: Que?! Y por que no me dijiste?! -sorprendido por las palabras de la chica y a la vez algo enojado, pues ya sabía las intenciones de aquel hombre con ella- 

Ita: Ni yo sabía, apenas me mandó un mensaje antes de que llegara aquí. Dice que es por mi cumpleaños. pero suena aburrido 

Azazel: Qué?! Tu cumpleaños? Ya estamos a 22 de noviembre?! -decía aún más sorprendido- 

Ita: Idiota, lo olvidaste? -le daba un golpe no tan fuerte en el brazo- 

Azazel: -reía juguetón por el golpe- claro que no, cómo lo voy a olvidar?. Es más, tengo una reservación en un club nocturno y con zona vip~ 

Ita: ¿en serio?! Al table dance?! -lo miraba con sus objetos brillosos de felicidad ya que estaba súper emocionada por ir- a que nos bailen~ -decía casi babeando tan solo pensarlo-

Azazel: Ay, no le digas así, suena más decente Club Nocturno~ -los dos pervertidos reían como los enfermos que son- nada más no le digas a María, se va a infartar y me va a matar por llevarte. -empezaba a guardar sus cosas en su mochila- ahorita que quieres hacer? 

Ita: Mmm, en realidad no sé. Pensaba en ir por un helado mientras miramos las tiendas, perder tiempo de aquí hasta… que… sean. -se desconcentraba de lo que iba a decir, pues miraba que un grupo grande de personas venían- espera -se acercaba al gran grupo de personas que parecían ser turistas, se metia entre la multitud como si fuera una persona normal solo queriendo pasar- me dan permiso por favor, permiso -ya que atravesaba la multitud, iba de nuevo con el pelirrojo y le mostraba con una sonrisa orgullosa 5 carteras que había robado de manera ágil y rápida- nadie me vio ni se dieron cuenta