Grace Hopper.
Hoy es el cumpleaños de los gemelos, así que eso quiere decir, ¡Fiesta!
James y Liam siempre se lucen en su fiesta de cumpleaños, invitan a todos y digo todos los del instituto.
Bajo las escaleras con una bolsa de Adidas y otra de D&G, entro a la cocina donde mis dos hermanos están desayunando acompañados de mi madre.
Están de espaldas así que voy y los abrazo haciendo que las bolsas golpee sus caras.
- ¡Feliz cumpleaños James! -le doy un beso en la mejilla - ¡Feliz cumpleaños James dos!¡Digo Liam!
Los gemelos se paran y me devuelven el abrazo, como lo imaginé mamá estaba sacando fotos de cada movimiento que hacíamos.
- Espero que sepan apreciar mis costosos regalos.
Le entrego sus regalos, a James le doy la bolsa de Adidas le había comprado unos hermosos tenis negros con rayas blancas a los costados y a Liam una chaqueta verde militar de D&G.
Escucho que tocan la puerta así que voy ya que los gemelos están probando sus regalos.
Abro la puerta pero no veo a nadie, seguro fueron niños. No le doy mucha importancia y cierro de nuevo.
No doy ni cinco pasos cuando vuelven a tocar, abro de nuevo pero está vez salgo y pateo una caja que estaba en el piso.
Dos cajas estaban allí una azul y otra verde, en la tapa decían el nombre de a quien le pertenece.
Alzó las cajas y entro de nuevo a la casa.
- ¡Chicos, miren!
- ¿Más regalos Grace?¿Cuánto gastaste? -pregunta Liam.
- Estas cajas no son de mi parte.
La intriga de saber quién mando las cajas nos invade a todos en este momento.
- ¿Y si son bombas? -pregunta James
- ¿Tu crees? Ya hubiese explotado cuando Grace lo movió. Imagínate llevar su ataúd, me rompería la espal...
- Liam si sigues diciendo tonterías seré yo la que lleve tu ataúd. ¡Ahora abre la caja!
Liam abre la caja y saca una cajita aterciopelada de color azul, dentro de él ahí un hermoso reloj dorado, también saca un sobre blanco.
- Para Liam de Papá -mi mente está apunto de explotar al oír que ese regalo viene de parte de mi padre - Liam, hijo sé que por mucho tiempo no he estado al tanto de tu desarrollo, ni el de tu hermano y mucho menos de Grace. Sé que desde que deje la casa jamás recibieron una llamada de mi parte preguntando cómo están ni nada parecido, y estoy muy arrepentido de eso y todo lo que he hecho. Hoy tu y James están cumpliendo dieciocho años¿recuerdas que me dijiste cuando eras pequeño? Me dijiste que querías que te regalará un auto y que lo escogieramos los dos, lastimosamente no voy a poder cumplir tu deseo del todo. Estado ahorrando durante estos diez años para poder cumplir tu deseo de poder comprarte un auto, por favor acepta esos cien mil dólares de mi parte por todo los años, navidades y año nuevo que no he pasado al lado tuyo, aceptalo. Te deseo un muy feliz cumpleaños hijo, te quiere, papá.
- ¿Esto es una broma? -digo de manera muy agresiva - ¿Cree que el dinero recompensará todos esos años? Ni siquiera dio la cara ¿A ti también te dio lo mismo, James?
James abre la caja y es casi exactamente lo mismo, pero en la carta dicen cosas muy diferentes.
- ¿Lo van aceptar?
Ninguno de los dos dice nada, miro a mamá que está con los ojos cristalizado.
- ¿Mamá dejaras que acepten ese dinero?
- Yo...yo diría que lo mejor sería devolverlo pe...pero conociendo a tu padre insistirá en que se lo queden.
- Grace este dinero nos serviría de mucha ayuda, sabes que próximamente iremos a la universidad y eso nos costará mucho -dice James - No podemos depender de mamá siempre, no pienses que este dinero será como una disculpa sino que más bien es como un deber de todos los años que nos tenía que dar la manutención. Sabes que mamá solo le hizo la denuncia de alejamiento, ya era hora de que él vea por nuestra necesidades no solo mamá.
Mis ojos me pican y dejó caer unas lágrimas, pero no lloro de tristeza, lloro de la rabia que siento al recordar todo lo que tuvimos que pasar como familia. Sé que James tiene mucha razón en lo que dice, pero aunque tenga o no tenga razón yo no aceptaría nada que venga de parte de Mark.
- Grace sé que tú fuiste la que más amaba a papá y también sé que fuiste la que más decepción sentiste al tener que ver a papá en ese estado -Liam se levanta de su asiento y viene directo a abrazarme - Todavía duele recordar todo eso, pero hoy no es día de recordar cosas que te hacen llorar. Tu el único día que tiene que llorar es cuando nosotros nos graduemos, pero no tienes que llorar de tristeza si no que de felicidad ya que no nos tendrás que aguantar más.
Liam trata de hacer que el ambiente triste y rencoroso se vaya.
- Sabes que los voy a extrañar muchísimo, son mis hermanos y los amo aunque siempre molesten.
Todos sueltan un "Awwww" de ternura, no siempre suelo ser tierna con mi familia, pero la verdad es que los amo un montón y recordar todo lo pasado me pone muy sentimental.
- Bueno niña mocos -dice Liam y suelto una carcajada porque es la verdad, estoy hecha un desastre - Ve a mojarte la cara que tenemos instituto y luego una fiesta que organizar.