Granate

cap 14

En el momento en el que oí la palabra "princesa" supe de inmediato que era Qiang. ¿Qué rayos hace el chico del bosque sentaddo en mi pórtico, y a estas horas de la madrugada?

La impresión se posó en toda mi cara, no sé que decirle, el corazón raramente me late a cien por segundo, bueno por lo menos eso es lo que siento.

No puedo creer poder sentir tal cosa hacia Qiang, él es algo que para mí tiene que ser sio si insignificante, ese sentimiento por él tiene que morir de alguna manera.

El muchacho se para lento, finalmente se quita la gorra, se la guinda en el pantalón y, me extiende la manoen señal de saludo.

"Hola princesa"

No le extiendo la mano y, cuando él se da cuenta de que yo no le devolveré el saludo, la baja.

Empiezo a suponer que estoy siendo un poco odiosa con él, y quiero pedirle disculpas por eso, pero rápidamente lo reconsidero y vuelvo a mi posición de chica ruda la cual no tiene piedad con chicos como él.

"Solo pasé por aquí para saludarte. Voy camino a una reunión muy importante dentro de un rato, y pensé que sería muy agradable verte antes de que me presente, ya sabes, para que tu me des más fuerzas y no tenga miedo o pánico escénico. ¿Cómo has estado? que gusto volver a verte de nuevo. ¿Me extrañaste?"

"C-claro que no te extrañe, ja, ¿Quíen extrañaria a alguien como tú?  ¿Qué haces aquí? no pensé que te v-volvería a ver de nuevo, ni de esta m-manera, ¿cómo sabes en donde vivo?"

¡GENIAL!, qué vergüenza, no poder evitar el tartamudeo me irrita mucho. Tal vez mi posición de la chica ruda no está resultando como yo lo espere.

“Si, bueno, veras lo que pasa es que, como te dije antes, yo quería verte de nuevo antes de ir a mi reunión y se me ocurrió la magnífica idea de pedir dirección a unas cuantas personas, y ellas supieron decir en donde vives ¿Sabes? no me fue tan difícil conseguir tu dirección, solo ustedes y unas pocas personas viven en este lugar tan poco poblado”

Tanimoto me ve de los pies a la cabeza con atención, lentamente se le va formando una pequeña sonrisa en su boca.

“Ese atuendo que llevas puesto es digno de una princesa”

Cuando dice eso, instantáneamente empiezo a sentir como el calor sube por mis mejillas, rojas por el alago, yo sé que él lo notó porque se ve en su cara.

Lo malo de mí en esta situación, es que mis mejillas suelen ponerse coloradas cuando siento pena o cuando alguien me sabe alagar, y en esos casos rápidamente las personas notan como lentamente mis mejillas se van poniendo rojas, tan rojas como una pumalaca.

Rápidamente me acuerdo que tengo un pijama puesto que solo consiste de unos chores y una camiseta, todo de color rojo, mi color favorito. Para rematar como quería estar cómoda antes de dormirme en la noche anterior, decidí no ponerme el sostén, pero gracias a Dios tengo puesto mi suéter negro, de inmediato me intento cubrir por completo, pero eso solo empeora todo, por supuesto me puedo cubrir la parte superior la más importante, pero la parte inferior no. Es un total desastre.

En que estoy pensando al salir de la casa con esta pinta. ¡Qué vergüenza!

“Mi atuendo no tiene importancia en este momento, de todas formas no puedes estar aquí. Ya vete”

Frunce el ceño, extrañado de que le diga tal cosa.

“Estoy feliz de verte, pensé que tú te pondrías igual de contenta que yo. ¿Es que acaso me borraste de tu memoria? aunque siendo sincero no lo creo, ya que soy imposible de olvidar”

Este chico sí que tiene el ego por las nubes.

Pone una sonrisita que me empieza a irritar mucho.

“Deja de llamarme así, quieres”

Tanimoto se está acercando hasta el punto de ponerse en mi espacio personal, lo cual no me gusta para nada y decido retroceder un paso, pero él sigue acercándose cada vez más, y más. En mi retroceso mi espalda toca la pared y no sé qué más hacer. Su rostro está a tan solo unos tres centímetros del mío.

Sus ojos azul intenso me resultan conocidos, siento que ya los e visto en otra ocasión, en mi interior se posa esa sensación de un déjà vu.

¿En dónde más he visto estos ojos? sé que los he visto en otra parte, ¿pero en dónde?

Note ese ligero olor a colonia de hombre, y me volví loca por dentro, ya que me encanta ese olor. Su cara es tan perfecta como la de un ángel, pero a la vez proyecta miedo, una ligadura muy extraña, en lo personal le queda bien ese estilo. Sus labios son totalmente besadles, que hasta me dan ganas de hacerlo. Pero no lo hago, claro está.




Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.