Oigo como la alejada voz de mi madre me pide despertar.
“Tyana abre tus ojos, no duermas más”
“Hija, has un esfuerzo para despertar de esta pesadilla”
Esas palabras me hacen comprender, que esto, todo lo que me ha estado pasando, no es real, si no tan solo un producto de mi imaginación, una pesadilla que pronto irá a terminar.
“¡YA DESPIERTA ABRE LOS OJOS!”
Ese grito de alguna manera me ensordeció, e instantáneamente abro mis ojos, nerviosa. Me toma unos segundos darme cuenta de en donde me encuentro.
Es de noche, me imagino yo son como las cuatro y cuarenta y cuatro de la madrugada, hace frio y hay muy poca luz de la luna, pero eso no me impide saber qué este lugar es el escondite, eso significa que me encuentro todavía aquí, en este extraño sueño.
Mi aturdimiento se desvanece poco a poco, y mientras más me despierto, más caigo en cuenta que estoy atada a una silla de madera.
¿Qué rayos es esto? ¿Por qué estoy atada?
“Veo con mucho gusto que ya has despertado”
Cuando oigo esa voz, levanto rápidamente mi cabeza, para ver la figura oscura de una persona saliendo de entre las sombras.
“Claramente se nota que ya recuperaste la conciencia, y me imagino que todos tus sentidos volvieron a su estado normal”
Cuando dice esas palabras puedo entender de a que se está refiriendo. Mis sentidos si volvieron a la normalidad, puedo ver bien como desde un principio, oír bien como desde un principio, y ya mis piernas no se sienten tan pesadas como antes.
“Veo que no hablas mucho, pero bueno, si ese es el caso, yo puedo hacer que hables”
El personaje misterioso, sale de entre las sombras, y se para a una distancia considerable de en donde yo me encuentro.
Lo veo de pies a cabeza, y no lo puedo creer.
Intento hablar, pero es como si mi garganta estuviese tapada, y no pudiera articular ninguna palabra, y menos un sonido, por la impresión.
Qiang se acerca cada vez más en mi dirección, cuando ya está lo suficientemente cerca de mí, se detiene.
Me encuentro atada como en esas películas en donde secuestran personas, mis brazos están atados del reposa brazos, y mis piernas están atadas en las propias patas de la silla, el material que Qiang utilizó para inmovilizar mis brazos y piernas es cinta industrial, y arriba de eso hay un alambre con un muy extraño color rojo.
¿Pero que dem…?
Él se inclina cada vez más cerca, para apoyarse coloca sus manos en la parte descubierta de mis brazos atados, y acerca su rostro alarmantemente.
Qiang se detiene, queda a tan solo tres centímetros de mi rostro, de pronto mueve su cabeza hasta mi oído, y siento como su aliento frio pega de mí oreja.
Un olor que emana de Qiang arremete repentinamente en mi nariz, es como un olor metálico, lo huelo más a fondo y me doy cuenta que ese olor se trata de sangre, lo cual hace que me asusté mucho, ya que en él no noto ninguna mancha de sangre.
Para mí, es como si se hubiera puesto una colonia con esencia a sangre.
“Di algo o, ¿Es que acaso no me reconoces? princesa, ¿o tal vez un gato te comió la lengua?”
Extrañamente, las palabras salieron de mi boca tan natural como si ya desde un principio las hubiese practicado.
“Claro que se quién eres, el único ser humano que me dice “Princesa” eres tú y no, ningún gato me ha comido la lengua”
“Mmmm ok, buena respuesta. Me imagino, que sabrás porque te ate a una silla sin ninguna razón”
Sus palabras fueron secas.
En realidad le quiero decir, que no, no sé qué rallos hago aquí atada sin ninguna explicación.
El terror se posa en mí, (como cuando una mariposa decide descansar su frágil cuerpo en una rosa), asiéndome temblar, y repentinamente pienso en Mine, todavía no puedo entender a sien si a cierta que paso con mi hermana, ese comportamiento que ella tuvo no es natural. ¿Y Xen? ¿Qué se supone que paso con él? Según recuerdo, la última vez que lo vi, fue cuando lo deje detrás de mí.
Intento unir todas las piezas que me ofrece este absurdo rompecabezas, pero lamentablemente no las puedo unir, este juego está a favor de mi contrincante sea quien sea.
Mi cabeza en estos momentos está en una total oscuridad, no puedo entender nada de lo que está pasando.
Ya no sé quién es el malo, tal vez sea Xen, Qiang, o Mine.
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Editado: 27.10.2018