Los preparativos para el baile de fin de año me tocaban a mi, pues al ser del comité estudiantil teníamos ciertas obligaciones y derechos que no me parecían del todo.
Los bailes no eran precisamente lo mío, pues realmente no sabía socializar bien, creo que casi siempre sueno pasiva-agresiva en mis contestaciones aunque en mi cabeza suene de otra manera.
—Entonces renunciaste a la fotografía.
—Tuve que hacerlo o de otra forma estaría fuera de la familia.
—Preferiría estar fuera de mi familia a no hacer lo que amo, entonces ¿De que sirve vivir sin amor?
—Lo dices desde tu privilegio.
—¿Es un privilegio ser pobre?
—No me refiero a eso Carlos, sino que... A que tu familia no te presiona, al menos tenemos suerte de ir en la misma Universidad, así la vida es menos miserable.
¿Que sucede cuando tu amigo cirujano dentista no es tan inteligente como parece?
Pues... la mayor parte de tiempo tenía que salvar a Carlos de todos sus problemas que pudieron a ver sido evitados
Su sentido del humor no a todos les gustaba, era muy amigo con un grupo de personas de dudosa procedencia y había otro grupo que jamás regreso a su consultorio,bueno,al consultorio de su padre.
Desde que el obtuvo su título técnico y monto su consultorio he ido a arreglarme los dientes ahí. Ahora tengo brackets pero yo creo que no los necesitaba tanto, quizá solo me utilizo para practicar.
Carlos y yo somos muy amigos desde hace bastantes años, y al mismo tiempo tuvimos relaciones amorosas que nos dejaron sin ganas de conocer a Alguien . Aunque a él casi nunca se le notaba triste era bien sabido que corazón herido, soldado caído y pues reprobó varias materias, sus papás eran de nivel medio-bajo económicamente y la universidad le asignó una buena beca de la cual me daba un 20% para tomar un curso a las afueras. Él me llevaba y me recogía, siempre estaba ahí para apreciar mis fotos, había varias de ellas en su consultorio y sus pacientes también las admiraban.
Sin Carlos yo que haría.
—Te quiero contar sobre alguien.
—Ay no que estrés, ¿Sobre el toño otra vez?
—Claro que no, y no se llama toño se llama...
—Si claro, ahora dime ¿cuantas veces necesitas que alguien te rompa el corazón para que entiendas que no te merece?
—Pero puedo hacer algo con esas grietas, florecer o no se. —Alcé los hombros y agache la cabeza, proseguí. —Es un chico lo conocí en el funeral de mi abuela, es alto de cabello castaño, ojos claros, de bonita sonrisa.
—Bueno al menos tienes un nuevo galán, significa que estas avanzando.
—Me arrestaron por ir con el a la feria.
—Siempre te pasan cosas random pero aquí lo que importa es que regreses a los cursos de fotografía, eres maravillosa captando colibríes.
—Todos me dan opiniones negativas que he llegado a creer... Yo no sé si pueda seguir haciéndolo.
He llegado al punto de creer que todos los comentarios y opiniones tienen razón
Sin embargo no he querido hacerle caso.
En la vida se vale, pero si eres de dinero entonces tienes que dar un buen ejemplo siempre.
He estado haciendo planes para el baile pero no tengo pareja aún y por la tarde iré a recoger mi vestido.
—¿Ya tienes pareja?
—Así es.
—¿Es en serio? —lo miré sorprendida. —¿Quien es la afortunada?.
—Será un secreto.
—Entonces no valgo nada...
—Yo creo que tu si vales y mucho como todos, pero en el amor quizá los dos somos un fracaso. Iré con la nueva, jaja, así que busca pareja, amiga pelirroja, o el vestido precioso será en vano.
—Creo que no necesito ir, si no fuera por mi ego que creo que me veré espectacular
—Esa es la mar que me agrada, ahora ayúdame a recoger y cerremos qué ya es tarde y tengo que ir por flores para mi cita.
—¿Desde cuando me ocultas cosas?
—Ay niña, soy todo un ser misterioso.
—Ahora veo que si.
EL DÍA DEL BAILE
—Ya estoy lista papá puedes ir a recogerme más tarde.
—Te hablan en la puerta supuse que ya tenias pareja, es un buen modelo de coche.
Estaba un increíble auto negro parado frente a la casa y de el bajo un apuesto hombre vestido de negro,
<Que guapos se ven vestidos de negro>
—¿Estas lista?. —preguntó Joan invitandome a subir al coche. —Te tengo una sorpresa..
Tome su mano y subí, me cautivo la sorpresa.
No hable mucho durante el camino, no era necesario, las miradas decían bastante..