Capítulo 3

Al día siguiente escuchó el cantar de un gallo, este sonido es tan fuerte que tengo que taparme los oídos con la almohada, es como si tuviera un altavoz en la garganta, sin más remedio me levanto de la cama de mal humor, al mirar por la ventana noto que apenas está amaneciendo, de pronto mi estómago me recuerda que no he comido nada desde el almuerzo del día anterior. Luego de una media hora estoy aseada y cambiada por lo que bajo a prepararme algo para comer, pues no creo aguantar sin comer nada hasta la hora del desayuno.

Al bajar a la cocina me sorprendo al encontrar a la señora Mila preparando el desayuno.

_ Buenos días

_ Buenos días señorita, siéntese para servirle la comida.

_ Gracias,  acaso la hora del desayuno paso, oh…

_ Oh; no, aquí no hay hora del desayuno, cada quien dependiendo de lo que tenga que hacer se levanta temprano o no y cuando lo hace vienen por su desayuno, a menos que yo esté aquí.

_ Ah entiendo, supongo que los demás están dormiendo.

_No, Thomás salió temprano, Leo debe de andar por ahí trabajando y tu abuela de seguro baja en unos minutos _dice mientras me sirve el desayuno.

_Ok

_ Sí quieres más me dices, de seguro debes tener mucha hambre _ asiento mientras ella me regala una sonrisa. 

_ Buenos días _ dice mi abuela mientras entra a la cocina y se acerca a darme un beso en la cabeza.

_ Buenos días _ decimos la señora Mila y yo al unísono.

_ ¿Cómo te sientes Madi? ¿descansaste bien?_ me pregunta mi abuela mientras se sirve su desayuno.

_ Sí

_ Que bueno, supuse que estabas muy cansada así que no te desperté anoche _ al decir esto se sienta a comer junto a mi.

_No pasa nada.

Tras esa charla ambas mujeres se ponen a hablar de lo que se hará de comida y de otras cosas más las cuales no presto atención por estar enfocada en mi plato de comida.

_ Por cierto madi, tengo que hacer unas diligencias por lo que no estaré en toda la mañana, si quieres puedes explorar la casa _ dice mi abuela

_Oh,  si quieres puedes ir con Leo al pueblo _ sugiere ahora la señora Mila.

_ Sí sería una buena oportunidad para que conozcas el pueblo y a algunos amigos.

_ Está Bien.

_Ah madi, no vayas al bosque sola.

_ Ok, lo tendré en cuenta.

Al terminar de comer me despido de ambas, subo a mi habitación y me cambio de ropa para después ir a buscar a Leonardo. De camino al pueblo me di cuenta de dos cosas, la primera que tendríamos que caminar mucho hasta llegar al pueblo, ya que la casa está muy apartada de este, y lo segundo que Leonardo era digno hijo de su padre, tan conversador como él, algo no tan bueno considerando que no soy de mucho hablar con las personas, supongo que esto último el ya lo ha notado pero al parecer quiere ignorar este hecho.

_Así que eres de New York

_uju

_Y te gusta leer_ Tras mi silencio agrega _ Es que te vi observando mucho el librero y te veías emocionada y eso que no has visto la biblioteca de tu abuela_ Al ver que lo observo continúa hablando_Es una habitación enorme, con muchos estantes llenos de libro de todo tipo, tus abuelos lo coleccionan.

_Oh, no lo sabía.

_Lo supuse, ¿qué clase de libros lees?

_La mayoría son de fantasía.

_Fantasía, interesante y ¿de qué tipo?

_El que estoy leyendo trata de hadas.

Cuando dije esto último Leonardo me miró de una forma que no logré descifrar, sin embargo no agregó más y continuamos el camino en un agradable silencio. Después de casi 1 hora de camino comencé a divisar el pueblo,luego de unos minutos llegamos a la entrada del pueblo, la cual tiene en el centro de la calle una gran fuente en forma de ángel, las casas son muy pintorescas, algunas de ellas están rodeadas de lianas y flores y casi todas tienen grandes jardines frontales al igual que el de la abuela, a medida que íbamos caminando fui notando algunos locales y áreas de recreamiento. Al pasar las personas nos miraban atentamente o más bien a mí, supongo que no todos los días conocen gente nueva, otras personas nos saludaban amablemente lo que me confirma las palabra de Leonardo.

Siento como si me estuvieran observando y cuando busco con la mirada, veo un par de gemelas que no nos quitan la mirada de encima, cuando notan que las estoy viendo se acercan a nosotros.

_Vaya, vaya pero, ¿a quién tenemos por aquí?_ pregunta una en tono engreído.

_Hola Leonardito _ dice la gemela 2

_Hola Elise_ responde Leonardo algo incómodo por la situación_ Madison ellas son Elise y Lily, chicas ella es Madison la nieta de Elena.

_Hola_  Responden las dos al mismo tiempo.

_Ya decía yo que te parecías a alguien_respondió Lily_ Y dime querida que te trae por aquí.

_Estoy de vacaciones

_Y cuanto tiempo te quedarás; digo si se puede saber_ Leonardo al notar mis expresión se adelanta y habla por mí _ Bueno chicas tenemos unos pendientes por resolver, hasta luego.

_No espera Leo, podemos tomarnos un café aunque claro ahora no, cuando esté menos ocupado.

_Talvez después Elise.

Después de unas horas compramos  todo lo de la lista y emprendimos el camino a casa.