Guardianes de lo secreto

5- La fiesta

Una hora antes empiezo a arreglarme e iba a ponerme el short como había dicho, pero al final me pongo el vestido que me había propuesto Andie, solo que me pongo la chaqueta de cuero arriba con unas zapatillas converse clásicas.
Voy a la sala de armas por una daga pequeña que guardaré en el bolsillo interior de la chaqueta y cuando toco la daga creo que toma forma de pistola, pero fue rápido y extraño y en el momento que vuelvo a mirar es una daga nuevamente y decido tomar otra que me gusta usar.
Salgo del cuarto de armas a las 8:00 p.m. y justo escucho la bocina del jeep de Drake.
Abro la puerta y él está fuera del carro con la puerta del copiloto abierta, esperándome.
Lleva una camisa negra arremangada hasta los codos lo cual hace que se le acentúe aún más el gran físico que es obvio que tiene, lleva unos jeans grises y unas zapatillas negras.
—Gracias —digo cuando subo al carro  
Él cierra la puerta y sube del lado del conductor.
—De nada —dice y arranca el carro.
En el transcurso del camino no hemos hablado nada en absoluto y por fin habla él.
—¿Eres zurda?
—No, ¿por qué lo piensas?
—Eres mejor con la zurda que con la derecha, manos y pies
—Peleo mejor con mi lado zurdo, pero soy diestra  
—Si eres zurda para pelear, ¿por qué peleas con la diestra?
—Porque soy diestra
—No, eres zurda, por lo menos peleando lo cual es una gran ventaja
—¿Ahora me dirás a mí si soy diestra o zurda?
—Sí —dice sin pensar
Río suavemente, estoy empezándome a dar cuenta que Drake es terco.
Llegamos a la casa de Andie y voy a abrir la puerta, pero Drake me detiene.
—Espera —dice abriendo su puerta
Él baja da la vuelta y abre mi puerta.
—Ahora sí —dice extendiéndome su mano —Vamos, serás mi pareja hoy
Sonrío y en el momento que voy a tomar su mano vuelvo a tener la misma sensación como el primer día y mi instinto es retirar la mano de la de Drake, él me mira, agarra mi mano con determinación y me ayuda a bajar del carro.
Entramos a la casa y por lo menos ya hay unas 50 personas más.
Voy a la cocina donde está Andie con Ilan que la está ayudando a llevar unas cosas.
Drake cuando entra sube al baño.
—¿Necesitan ayuda? —pregunto acercándome
—Solo faltan los vasos que están en la despensa—dice Andie
—Está bien
Coloco los vasos en la mesa y me acerco a donde están Andie e Ilan.
—¡Te pusiste el vestido! —dice Andie alegre
—Sí, bueno, pensé que sería bueno un cambio de vez en cuando.
—Te queda excelente, se ajusta bien a tu cuerpo y creo que no soy la única que lo piensa —dice apuntando detrás de mí.
Me doy vuelta y un chico está observándome de arriba hacia abajo.
—Ahora vuelvo, dejé mi celular en la cocina —dice Andie
Cuando ella se va me pongo frente a Ilan.
—Se conocen hace mucho ¿verdad?
—A Andie la conozco desde mi primer año de colegio y a Drake desde que tengo nueve años, ellos son como mis hermanos.
—Protegen bastante a Andie
Él sonríe —Es la más chiquita de nosotros y era la única chica, hasta ahora.
Andie está de regreso y el tema muere allí. Regresa con cuatro cervezas en las manos y las reparte.
—Esta es de Drake —dice con la última cerveza en mano
—Ya viene —dice Ilan
—¿Cómo sabes? —pregunto
—Hailey está mirando las escaleras sonriendo —dice apuntando a una chica de cabello rojizo.
—¿Y Hailey es?
—La ex novia de Drake
Es cierto, Drake está bajando las escaleras y la chica está mirando con una sonrisa cada paso que Drake da.
La noche va súper bien y se pone interesante cuando un grupo de chicos se acerca a donde estamos nosotros, pero solo habla uno de ellos dirigiéndose a Ilan.
—¿Quieres hacer un reto? —le pregunta el chico
—¿De qué estamos hablando? —pregunta Ilan mostrando interés 
—15 shots de vodka
—¿Qué gano con eso a parte de una resaca espectacular por la mañana?
—¿Qué quieres?
—Tu BMW M4 —responde Ilan sin detenerse a pensarlo
—¿Quieres mi carro? —repite el chico sorprendido —Pero ya tienes una moto
—Exacto, tengo una moto, no un carro
—Está bien igual perderás
—¿Qué quieres tú cuándo yo “pierda”?  —le pregunta Ilan haciendo comillas sobre la palabra pierda.
El chico mira todo a su alrededor pensando en qué podrá querer y sus ojos se detienen sobre Andie y sobre mí, ambas nos miramos con cara de “¿Qué le pasa a este tipo?” y regresamos la mirada al frente.
—A tus amigas —dice al final el tipo
—Bueno, como ellas no son objetos de mi propiedad, si llego a perder tendrás que ver cómo logras que se vayan contigo.
—No te preocupes por eso
—Empecemos entonces
Escucho las palabras de Ilan y me tenso por lo que podrá pasar. 
Todos nos vamos a la cocina donde está la botella de vodka esperando.
Le sirven el primer shot a ambos y lo toman sin pensar y siguen uno tras otro, cuando van por el octavo shot, el rostro de Ilan cambia.
—Espero que lo consiga porque si no, juro que acabaré con su existencia —dice Andie y creo que está enojada y la entiendo porque yo me siento igual que ella.
—Lo hará, él va a ganar —dice Drake con seguridad y confianza en su amigo.
Llego a pensar que Ilan va a vomitar, pero lo que sale de él es un eructo.
Con el décimo shot el chico que retó a Ilan vomita y yo suspiro aliviada, ahora solo le faltan cinco a Ilan y todas las personas en la fiesta empiezan a contar cada shot que Ilan se toma. 
Ilan se toma los 15 shots y tiene una sonrisa maliciosa en el rostro.
—Johnny, las llaves de mi carro, por favor —dice Ilan dirigiéndose al chico que está sentado en una silla sin poder con su propia vida —Te habría dicho que te quedaras el BMW, pero apostaste a mis amigas.  
El chico lo mira, suspira y le entrega el llavero del carro.
Ilan aun sonriendo se voltea a vernos, cuando su mirada llega a nosotras, su sonrisa de victoria se le borra en menos de un minuto y se acerca a nosotros.
—Lo siento —se disculpa
—¡¿En qué rayos estabas pensando?! —le grita Andie
—En ganarme un carro —dice encogiéndose de hombros
—¿Y nosotras qué somos?
—Sepan que nunca hubiera aceptado el reto si no estuviera seguro de que iba a ganar, no jugaría así con ustedes —habla hacia nosotras
—¿Cómo estabas tan seguro? —pregunto
—En toda la noche Johnny estuvo mezclando todo el alcohol que encontraba en las mesas y sabía que más alcohol no le caería bien —hace una pausa —Créanme lo estuve observando.
—Ilan tiene razón —sale en su defensa Drake —Aparte de que él no está tan loco para hacer eso sin saber si ganará o no, porque entonces ustedes no son las que le pegarán, seré yo por él estar haciendo estupideces.
—Exacto, Drake —apoya Ilan 
—Bien —dice al final Andie  
Mi celular comienza a sonar, ya es pasada medianoche y es Jessie.
—¿Hola? —respondo extrañada, no es normal que Jessie llame a esta hora.
—Leona —dice y percibo alivio en su voz
—¿Qué sucede?
—Necesito que me vengas a buscar
—¿Dónde estás?
—Iba caminando de regreso a la casa, pero afuera una camioneta negra conducida por Cole y tres hombres más empezó a perseguirme y me regresé al supermercado, no puedo pelear con ellos cuatro yo sola.
Andie, Ilan y Drake me observan atentos, por lo que no puedo decir mucho.
—Está bien, ya voy
—Gracias
Suspiro y me pongo frente a todos.
—Necesito que me presten un carro —digo —Mi hermana necesita que la pase a buscar y bueno yo no vine con carro.
—Te prestaría el mío, pero esta obstruido por dos más —dice Drake
—Usa el BMW —ofrece Ilan
—¿Estás seguro?
—Sí —dice extendiéndome el llavero 
—Regresaré pronto
Salgo de la casa en dirección al carro y justo cuando abro la puerta del conductor el tal Johnny se acerca.
—¿Qué crees que estás haciendo? —pregunta medio enojado medio borracho
—No sé, quizá usar el carro —digo con sarcasmo
—Es mi carro
—Perdona, pero es el carro de Ilan —le recuerdo
—No lo usarás —dice él serio
—¿Perdón? —digo, más que estoy apurada este tipo tiene ganas de molestar.
—Sí, lo que escuchaste
—¿Sabes qué?, no te haré caso y me iré.
Voy a subir al carro y Johnny me detiene.
—¡¿Qué quieres?! —le grito enojada
Él sonríe —Mi carro y a ti
—Dos cosas que no tendrás —dice Ilan detrás de él 
Johnny se da la vuelta para ver a Ilan.
—No estoy hablando contigo —dice Johnny 
—Tú no, pero yo sí 
—¿Quién te crees que eres?
—El dueño del carro —dice Ilan serio —Brooke, sube al carro y ve.
Hago lo que Ilan me dice y salgo del estacionamiento.
Llamo a Jessie y pongo el altavoz.
—¿Sigues dentro del supermercado? —pregunto cuando ella responde.
—Sí 
—Bien, ya voy
El supermercado tiene una buena distancia desde la casa por eso que yo voy en carro, pero a Jessie desde siempre le ha gustado caminar y mucho, no le importa la hora si quiere salir lo hará. Estoy segura que solo fue por un helado o chocolates.
Llego al supermercado y diviso en la esquina siguiente la camioneta negra de la que Jessie hablaba.
La llamo —Estoy afuera, ven 
Jessie sale del supermercado con un helado de galleta y dos chocolates, tal y como lo pensé. 
Sube al carro.
—Gracias —dice suspirando aliviada
—Tengo que regresar a la fiesta para devolver el carro, después nos iremos a casa.
Empiezo a conducir y la camioneta negra nos comienza a perseguir si llegamos a la casa de Andie no harán nada por la cantidad de personas, pero no puedo arriesgarme a que sepan donde vive Andie.
Damos vueltas por la ciudad casi por una hora hasta que los perdemos, fue extraño, pero nunca intentaron nada solo se cansaron y se fueron. 
Nosotras regresamos a la fiesta, le entrego el llavero a Ilan y busco a Andie para decirle que ya nos vamos, Drake que está con ella escucha y se ofrece a llevarnos e Ilan le presta el BMW.
 



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En el texto hay: secretos familiares, amor, poderes magia

Editado: 24.02.2019

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