Mientras tanto en la muralla todos los guardianes junto a los Líderes pelean con los enemigos, Samantha lanza su bastón de oro derribandolos, mientras Hunter atrapa al adversario con un lodo espeso que al contacto endurece e inmoviliza al oponente.
Siendo la batalla ganada a favor de la sección, capta la atención de todos que unos guardianes salen proyectados por los aires como muñecos de algodón a causa de una serie de explosiones que barren con todo el campo de batalla. Samantha sube sigilosamente en la muralla, buscando desesperadamente al culpable de esta masacre, Hunter le señala hacía el cielo, en medio de unas nubes de polvo, se visibiliza a una mujer con un traje blanco, una máscara del mismo color con franjas naranjas que tapaba absolutamente todo su rostro, incluyendo los ojos, montada sobre un pájaro aguileño hecho de papel de fridro, un papel hecho de maíz, la enmascarada eleva los brazos, tiene unas cartas hechas con el mismo papel con unas líneas geométricas dibujadas.
La mujer las tira hacia el cielo comenzando a flotar, giraban y salen más papeles, miles, que se juntaron para hacer unos pequeños pájaros gorriones.
Este espectáculo con cientos de pájaros que rodeaban a la enmascarada, capta la atención incluso desde los guardianes dentro de la sección.
La enmascarada apunta con su brazo a Samantha y con ellos todos los pájaros hechos de papel.
Los guardias huyen del campo de batalla, esos no son simples figuras de origami, una de las aves toca el piso explotando, y como ficha de dominó, desencadena una serie de detonaciones, como una ola que arrasa con la orilla del mar, guardianes masacrados o sus restos caían en los edificios de la sección.
En medio de este cataclismo, los pocos guardias con vida dentro de este desastre, gritan: ¡Bestias!, Como el canto de las ranas en un lago en lluvias. Samantha agudiza los sentidos, su parálisis de miedo le hace contraer cada músculo, escucha unos pasos como el trote de un toro yendo a clavar sus cuernos al jinete.
Hunter ve como unas sombras monstruosas aumentan de tamaño en cada segundo, unos cuernos se asoman, junto a un osico ancho hechando un humo blanco, unas bestias hachas de papel en forma de toro, de tamaño descomunal, toman el campo de batalla, y antes de llegar a la muralla estallan, la onda expansiva avienta a Samantha y cae sobre un edificio.
Todo era polvo con sangre, gritos, lamentos, llantos, que armonizaban esta batalla que parecía ganada.
Un gorrión de fridro se posa frente Samantha, reacciona e intuitivamente salta fuera de la muralla para buscar a Hunter. Ve entre el humo a 6 personas pelando contra una sola y era él, gravemente herido, ensangrentado, Samantha vence a los enemigos de un dos por tres, Hunter la mira y casi con su último suspiro de vida, le dijo que corriera, ella no le hizo caso hasta que se vio rodeada de puros gorriones de fridro acercándose lentamente a explotar sus vidas, Samantha no le queda más que huir y con lágrimas apenas logra despedirse con una mirada muy fugaz mientras escapaba de aquella muerte inminente.
Corre por la muralla toda empolvada se topa de frente a la tipa de la máscara parada como araña.
-Tú eres la Líder, no te escapas de morir.- Después de esas palabras, la enmascarada estalla en las narices de Samantha con tanta fuerza que provoca un gran hoyo en la muralla de hierro y con el, el cuerpo de Samantha carbonizado cayendo sobre una calle de la sección.
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Kuitzimoto se queda inmóvil después de acabar con esos gemelos, al parecer sentía un poco de tristeza por acabar esas potenciales máquinas de poder, pero era su trabajo, no tenía opción.
-¡Gorila! Grita una voz femenina grave, es Camila, la líder, con su típico chongo de color azul rodeando a Kutzimoto con una gran cantidad de agua que parecía que traía con ella el océano completo.
-Creo que tu estrategia de entrar solo aquí sin nada más que tu inútil presencia es estúpidamente errónea, mataste a mis alumnos, no eran mis amigos, pero ¡mi orgullo me dicta matarte con todo!-
Camila sumerje la humanidad del grandulón con toda esa agua a presión, imposible era salir de ahí, eso sabía Vanessa, su maestra es una leyenda, ese gorila era especie extinta.
A los pocos minutos una pequeña mancha blanquecina se aprecia en medio de toda esa trampa a presión que poco a poco fue creciendo hasta llegar a la superficie, saliendo una gran cantidad de vapor y con el, Kuitzimoto. Camila no se sorprende eso esperaba de su antiguo enemigo. Kuitzimoto corre como la velocidad de un rayo a cortar su cabeza , ella inmediatamente eleva todo ese manto de agua al cielo junto con Kitzimoto.
El manto se va compactando para formar una esfera enorme, La famosa Bola Profunda, una prisión que se asemeja a nadar en lo más profundo del océano, el poder más conocido de Camila , sin embargo logra salir, difícilmente, para atacar a Camila en el aire junto con una impresionante cantidad de vapor de agua.
Camila desaparece entre el vapor, Kuitzimoto cuando apenas toca el suelo mojado, se da cuenta que está rodeado por más de 30 de remolinos todos dirigidos por Camila, mientras ese enorme manto de agua cae sobre campo de batalla.
-¡Gran franjeado zonular!- Grita Kutizimoto, una descomunal cantidad de calor comienza a emanar, por muchas murallas de agua que pusiera Camila iba a ser quemada pero para su sorpresa, el ataque no llega a quemarla, el manto de agua del cielo se hizo completamente vapor cubriendo el cielo con una gran nube espesa.
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Editado: 21.07.2020