Cada minuto que paso al lado de él me convenzo de que este hombre no sé quién sea, pero estoy segura de que el chico educado, dulce y que me trataba como una Reina no es, ahora parece un patán que se cree en realidad el rey del mundo, debemos besar el piso por el que él pasa, está realmente mal de la cabeza, no sé cómo, pero lo voy a bajar de esa nube de golpe.
—Te está diciendo que no quiere bailar, suéltala Raymond, deja de ser un patán—siento como soy sacada de sus brazos para ser envuelta en los brazos de Emma, que no me deja ver la cara de Raymond, pero que estoy segura, no está para nada contento
—Tú no eres nadie para decirme como debo tratar a mi mujer, ahora suéltala
—Pues no pienso hacer eso, no está cómoda contigo—levanto la mirada del pecho de ella y observo como Raymond me observa fijamente de una manera que me produce un escalofrío en todo el cuerpo
—Eso no importa, estábamos bailando cómodamente, no sé por qué tenías que venir a dañar todo como siempre, suéltala, no pienso repetirlo—Siento como Emma me toca la frente y luego se aleja de mí para mirarme al rostro con el ceño fruncido
—Estás ardiendo en fiebre niña—niego, porque aunque me he sentido mal no puedo decirles lo que realmente me está pasando
—Debieron ser las dos copas que me tome, se me subieron muy rápido a la cabeza, el alcohol y yo no somos muy buenos amigos—ella arruga la cara y sé que no me está creyendo nada, pero no puedo decir la verdad
—Pues parece que no es solo un subidón de alcohol, se siente diferente
—Ya te dijo que era eso, deja de molestar y lárgate
—No pienso irme a ningún lado, esta pobre mujer está enferma y tú eres el único estúpido que no se ha dado cuenta de eso—Raymond aprieta con fuerza las manos y sé que en realidad está muy enojado
—No sé qué estás viendo tú, pero como siempre estás viendo cosas donde no las hay, lárgate con tu prometido y déjanos en paz—siento como al lado nuestro llega Jackson rápidamente
—Estás haciendo un espectáculo y todos los están viendo.
Observo a mi lado y es verdad, estamos llamando la atención de todas las personas que están aquí a nuestro lado, lo que tanto quería evitar al final está pasando, porque estos dos no pueden comportarse.
—Sí, por favor tranquilícense, estamos llamando la atención de todas las personas—Raymond parece no importarle porque me jala del brazo para que vuelva a su lado
—Me importa poco lo que la gente diga o piense, ven ahora mismo
—Deja de tratarla como si fuera tu mascota, ¿qué rayos pasa contigo?
Quiero besar a esa mujer y que juntas lo golpeemos.
—Deja de molestar Emma y En serio suéltala, es mi esposa, ¿o acaso ahora te gustan las mujeres?
Jadeo por las palabras de él y veo como la chica a mi lado está enfurecida por las palabras de Raymond y luego como empiezan a forcejear conmigo de por medio.
Intento por todos los medios hacer que deje de hacer eso, porque todo el mundo nos está mirando, pero a ellos eso parece no importarle
—Eres un cretino, no sabes ni tratar a una dama, no sé cómo alguien puede estar a tu lado, pero claro, me olvidaba que nadie quiso hacerlo y por eso tuviste que comprar una esposa—cuando termina de decir eso me siento más mal de lo que ya estaba porque nunca lo había visto de esa manera. —Lo siento nena, pero sabes que es verdad—me suelto como puedo de ellos sintiendo como la ira recorre mi cuerpo
—¡No soy una muñeca!, solucionen sus problemas y a mí Déjenme en paz —ambos me observan sorprendidos, pero siguen como si nada pasará
—No creo que tú puedas hablar de eso, estás en mi misma posición. Eres una hipócrita—vuelven a forcejear fuertemente
—¡Eso es ridículo, en serio que sí. Por favor dejen de pelear por una vez por todas¡—creo que estoy hablando en otro idioma porque ellos están tan enojados que no les importa nada ni nadie
—Tiene las mejillas rojas y eso no creo que sea porque está borracha—aleja la mirada de él para colocarla en mí —estás enferma nena—sigo negando a la palabra de la chica porque no quiero que nadie note que me estoy muriendo ahora mismo
—Te dijo que no tiene nada, deja ya de molestarla y suéltala
—Están llamando la atención de todos, dejen la discusión ahora mismo—asiento a las palabras de Jackson.
—Pues dile a él que deje de comportarse como un cretino, la pobre chica le está diciendo que se siente mal y que no quiere bailar con él y parece no importarle.
—Pues es porque no me importa, y a ti tampoco debería de hacerlo. Ahora deja él trama y no nos sigas dañando la noche—suspiro porque en realidad ellos no están entendiendo la magnitud del espectáculo que ahora mismo están dando.
Todo el mundo regreso a sus cosas, pero puedo ver disimuladamente como no quitan la atención de nosotros en ningún momento.
Intento hacer que se detengan de una buena vez y en el forcejeo un poco de vino de la copa que tenía ella en la mano, mancha mi vestido, y por él tira y jale de ellos, pierdo el equilibrio haciendo que me vaya de para atrás y caiga sobre el cuerpo del Jackson que me toma fuerte de la cintura
Aprieto con fuerza los ojos porque esto cada vez se pone peor, el dolor de mi pie y ahora esto, es lo más horrible que he tenido que vivir.
Espero y ruego a que nadie se dé cuenta de esto. Nunca había tenido que pasar algo como esto, siempre fui de las mujeres que pasaba desapercibida y mi trabajo me lo exigía, soy la mejor hackear del mundo y eso es gracias a mi discreción, pero últimamente estoy llamando la atención de más y no me gusta, nunca me gusto hacerlo.
—¿Estás bien, Bonita?
Niego reteniendo las ganas de llorar porque esto es bochornoso y no me siento bien no solo por lo que está pasando a mi alrededor sino porque me siento usada, humillada y todo lo demás.
—No, no me siento bien—sus manos me aprietan y yo solo quiero levantarme y salir corriendo de este lugar sin mirar a nadie, no quiero saber ni ver a nadie.