Hada de hielo 2

Rasgos similares

–¡¡Lyna!! – Grité mientras que a su vez corrí rápidamente hacia el enemigo.

–¡Entendido! – Voló detrás de Even preparando una lanza de hielo.

El enemigo retrocedió ligeramente para acto seguido preparar con ambas manos lo que parecía ser una esfera de energía.

–¡No te dejaré hacer nada!

Inutilicé su ataque congelando rápidamente el suelo, esto provocó que sus piernas se congelaran y perdiera el equilibrio por un breve instante evitando que completara tu ataque de energía, sin duda alguna mi entrenamiento me hizo mejorar mis habilidades a distancia, ya no tenía la necesidad de patear el suelo para congelarlo, ahora podía hacerlo con la simple aura helada que desprendía a mi alrededor.

–¡Eres muy molesto!

–¡Gracias por el cumplido!

Me acerqué rápidamente aprovechando que estaba inmóvil, él por su parte al verme muy cerca me lanzó un puñetazo a la desesperada, mientras que yo solo lo esquivé agachándome y propinándole un puñetazo sumamente fuerte en el estomago acompañado de una bomba de hielo cerca de su abdomen. Este ataque provocó que su cuerpo saliera disparado dando varias vueltas en el suelo.

Lyna aprovechó el momento, desde el aire empezó a cargar un ataque realmente poderoso.

–¡¡Estocada, mil lanzas de hielo!! – Gritó Lyna fuertemente mientras lanzaba su ataque.

Este ataque atravesó su cuerpo con cientos de lanzas de hielo afiladas dejándolo completamente inmóvil e incapacitado, era el momento, sin decirle nada Lyna retrocedió para que yo me encargue de darle el golpe final.

–¡Ataque concentrado! ¡Bala de hielo!

Concentré en la punta de mi dedo una especie de esfera sumamente pequeña hecha de hielo la cual, al disparar, impacta con la suficiente potencia como para dejar el terreno destruido y congelado. Así fue, mi ataque perforó su cuerpo volviéndolo pedazos, sus extremidades salieron volando y el terreno se destruyó a la par de que se congelada. Creí que ese ataque fue lo suficientemente fuerte como para evitar que se regenerara, pero tal parece que no fue tan potente como creí, solo conseguí destruir toda su parte inferior empezando desde el pecho, el resto de su cuerpo como su cabeza, aun estaba intacto.  

–Eres más resistente de lo que creí.

–Es una de las ventajas que tiene nuestra raza– Dijo mientras regeneraba su cuerpo al completo velozmente –Yo soy una especie desarrollada de mi raza.

–¿Desarrollada?

–Si, por general todos son unos primitivos sin razonamiento alguno, solo se guían por el deseo de asesinar, sin embargo, unos pocos consiguen dejar ese deseo como algo secundario, evolucionando en el proceso.

–Que raza más extraña.

–Somos conocidos como ANREDS, una raza que muchos otros consideran prehistórica.

–Ya veo, sin embargo… ¿Por qué me cuentas todo esto? – Observé fijamente con seriedad –No es como si me importara.

–……– Sonríe de una manera perturbadora –Ganar tiempo por supuesto– Responde con una voz rasposa.

–Ganar… ¿Tiempo? – Dije mientras me percataba de una cosa importante –No me digas que…

–¡Así es, mientras nosotros estamos aquí luchando, mis esclavos están terminando su parte del trabajo! – Ríe a carcajadas –¡Mientras te detenga aquí y consiga debilitarte, la humanidad estará perdida! – Pasa su lengua rápidamente por sus labios –Pronto todas esas hadas serán de nuestra propiedad.

–¡¡MALDITO!!

–¡Even tranquilízate! – Dijo Lyna –Tenemos que derrotarlo primero antes de ir a ayudar, tienes que confiar en Tala quien seguramente se encuentra en la ciudad, además… nuestros amigos ya deben de haberse percatado de la situación, seguramente irán a ayudar, no te dejes llevar por tus emociones.

–Ya lo sé…– Apreté el puño intentando controlarme –Aun así, debemos acabar con esto pronto, además… Daryl se encuentra inconsciente… esa patada parece que fue demasiado fuerte para él.

Interrumpe el monstruo.

–¿Ya terminaron de conversar? – Dice tronándose el cuello –Creo que es momento de pelear en serio… ¡Ven, representante de la humanidad!

–Si… va siento hora, monstruo del emperador– Dije frunciendo el ceño.

Mientras tanto Melisa e Irene….

–¡¡Regresemos!!, ¡¡Papá está en peligro!!, ¡¡Por favor regresa, debemos ayudarlo!!– Grita Irene.

–“Bien… llegamos a la cabaña que mencionó Even”– Pensó Melisa mientras bajaba a Irene de sus brazos –¡Escúchame Irene! – La sujeta fuertemente –Tu padre es muy fuerte, ha estado entrenando todo este tiempo para este momento, debes saberlo mejor que nadie.

–¡¡Yo también estuve entrenando muy duro!!, ¡Demasiado!, ¡¡Seguí muchos consejos de Papá y ahora soy más fuerte!!

–¡¡Irene tú!!… tu no posees un hada– Respondió con la cabeza agachada –¿Por qué crees que no puedes usar Soul?

–¡¡Mentirosa!!… ¡¡Eres una mamá mentirosa!!, ¡¡Papi me dijo que tenía un poder extraordinario oculto, si entrenaba mucho seguramente algún día despertaría!!... debo ir a ayudarlo ¡¡Antes de que sea tarde!!– Llora mientras hace lo posible para zafarse.

–¡Escúchame por favor! – La sujeta temblando.

–¿Mamá?

–Si vas ahora mismo… tu padre no podrá pelear con todas sus fuerzas y probablemente al verte… esté muy decepcionado de ti por no haberle hecho caso.

–Pero…

–¡No hay excusas!, si vas morirás Irene– Lagrimea –Esto no es un juego… ¡El destino de nuestro planeta depende de esta batalla, depende de la victoria de Even! – Abraza a Irene –Así que por favor mi niña… si de verdad quieres tanto a tu papi… quédate aquí esperando nuestra llegada, cuando esto termine vendremos a buscarte, solo por hoy, te lo suplico… ¿Sí?

Irene no pudo contener sus lágrimas y aunque su desesperación por ayudar al que es su padre seguía latente, entendió lo que significaba entrometerse en su pelea, por lo que, sin más opciones asentó la cabeza y lloró en silencio. Entró a la cabaña y desde la ventana observaba a su madre marcharse con la esperanza de que venga a por ella tal como se lo prometió.




Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.