XXVI

Por un momento me quedé inmóvil, la calidez de su boca y su cuerpo junto al mío causando una combinación de emociones que no pude evitar, así que correspondí el beso, sintiendo sus carnosos labios con los míos y un poco de su lengua, cuando nos separamos, solo me quedó ver hacia el piso, mis mejillas las sentía rojas.

De pronto y como salvación, llegaron varios chicos a saludar a Hassan y se lo llevaron, él solo me vio y me hizo una seña de que ya volvía, solo asentí, mi corazón bombea con todo, la sonrisa en mí no se va, pro primera vez siento felicidad, quiero dar brinquitos de emoción.

Todos reían, tomaban de sus vasos y cantaban, si otra persona de fuera nos viera, dirían que esto no es un lugar para chicos como nosotros, todo parecía tan normal hasta que un portazo nos hizo girar la cabeza a todos.

Ahí estaba él, con la mirada fría pero con una sonrisa de oreja a oreja que no combinaba nada con su mirada, su ropa bien acomodada y su cabello peinado hacia un lado lo hacía ver un poco más humano pero no del todo, estiró sus manos a ambos lados.

-No me perdería de una fiesta de mi hermano, Hassan, claro.

Caminó hacia Hassan bajando las manos, vi cómo Hassan  se puso rígido en todo el cuerpo,  mentiría si decía que yo estaba tranquila, mis manos tiemblan, siento mi estómago inflamarse provocándome incomodidad. Mi corazón está acelerado como mi respiración. Vi cómo Hassan se puso de una manera en que no pudiera verme el invitado pero cuando le da el abrazo, me ve y me sonríe. 

-No esperábamos verte.

Dijo Andrea desde algún lado del aula.

-Mi querida Andrea, no me  perdería una fiesta y menos de mi hermano Hassan, por cierto, discúlpame Hassan, no he saludado a tu novia.

Camina hacia mí, provocando sobre mí todas las miradas de curiosidad, pues acaba de decir que soy novia de Hassan, se acerca a mí y finjo una sonrisa, si quiere jugar así, así será.

-Holaa, Dylan, te habías tardado, qué bueno es verte de nuevo.

Me rodeó con sus largos brazos, no se sentía cómodo el abrazo, sentía que en cualquier momento un cuchillo sería encajado en mi cuerpo, cuando estaba soltándome, talló mi herida de mi costado y se soltó dándome una sonrisa cínica. El escalofrío que recorrió mi cuerpo me dejó fría.

-Yo sé que me extrañaban, no volverán a dejarme de ver. Bueno.-Se gira a ver a los demás- Que comience la fiesta.

 Camina hacia la mesa de botanas y los demás siguen con su plática después de aquél silencio.

Hassan y yo nos quedamos viendo al mismo tiempo, compartimos esa mirada que decía todo, sabíamos que no estábamos seguros ya que se pasea aquí como si nada, sabíamos que era peligroso.

Me acerco a él despacio, tratando de no llamar la atención.

-Me iré Hassan, no puedo estar cerca de ese enfermo,  una vez que esté distraído, me iré.

-No te puedes ir sola. Te acompañaré, te sales y te veré en el pasillo ya casi llegando a los baños, esa es la zona más peligrosa.

Asentí alejándome de él.

Sé que Dylan sentía mis miradas sobre él, porque se giraba y yo disimulaba que no lo estaba viendo, pero no dejo de ver cómo coquetea abiertamente con Mónica a quien ya ningún chico se le acerca, temo por ella pero sé que Andrea no dejaría que algo le pase y menos Hassan.

Después de un rato lo vi dándole la espalda ala puerta y supe que era el momento, le hice una seña a Hassan y asintió, abrí la puerta y cuando la iba cerrando observé que él seguía de espaldas, me sentí aliviada una vez comencé a caminar de regreso.

Llegué al pasillo y sabiendo que Hassan no vendría hasta dentro de unos minutos, decidí adentrarme ahí como una forma de sentirme oculta de cualquiera que viniera, comencé a caminar, la única vela está a punto de acabarse, me agacho porque sentí movimiento afuera cuando la vela se apaga dejándome en total oscuridad pero unos pasos que vienen de afuera me hicieron calmarme y ponerme de pie.

-Ya me iba a...

Sus labios interrumpieron lo que diría, agarró mi cara y me besó con ganas, su lengua entró en mi boca y le seguí el ritmo, aunque sentía sus labios diferentes y más fríos, seguí el beso tan apasionado, su mano comenzó a bajar y me tomó de mis posaderas para acercarme más a él, mentiría si decía que no lo estaba disfrutando, fue así hasta el momento cuando escucho a Hassan decir mi nombre.

Le di un empujón pero no con tanta fuerza porque se acercó a mi oído y riendo me dijo.

-Sé que lo disfrutaste, asesina.

Me empujó contra la pared, mi cabeza resonó en ella y lo vi desparecer por algún lado en la oscuridad. Hassan llegó corriendo las escuchar mi golpe.

-Halia, ¿estás bien? ¿Qué pasó?

Lo agarré de las manos y después lo hice abrazarme, de alguna manera su presencia me daba seguridad.

-Solo salgamos de este maldito lugar.

Dr.Prakash

La noche de fin de semana es cuando descanso normalmente o veo a Halia por las noches como todos los días pero estos últimos meses he tenido que quedarme a hacer guardia en la oficina de Beatriz o llenando papales de salida de las chicas.

Un suspiro salió de mí cuando puse el punto en mi mas reciente carta, sentía que estas ya debían ser entregadas ya que Halia comienza a portarse diferente, miente cada sesión y anda inquieta, camina como si estuviera herida de su cuerpo esa cicatriz de la espalda que se le vio en una de las sesiones me confirmó que algo no está bien.

La puerta se abrió y entró Arcelia, su rojo cabello y el olor a su perfume inundan la habitación como si a un cuadro gris le pusieras una mancha tosca de rojo.

Se sentó sin previo aviso, escondí mi carta bajo en uno de los cajones y la miré, sé que no significan buenas noticias así que me pongo serio y acomodo mis lentes sobre el puente de mi nariz.

-Cómo sabes, sigue perdido el Dolch pero no solo eso, sino que también no encontramos el libro. No sabemos en qué momento sucedió, fui con Beatriz y solo dejaron un libro envuelto en donde estaba ese maldito libro. Tenemos altas sospechas de que fue Halia, mas no podemos comprobarlo al cien porque cuando nos dimos cuenta, todas las chicas estaban en clase. Ya mandé a ponerle el listón negro, necesito todos los ojos sobre esa chica. Necesito que me digas sobre esto y si ha mencionado algo, necesitamos que le saques la información.