Capítulo 11

He de confesar, sinceramente, que no estuve para nada a gusto mientras representaba nuestra actuación. No podía parar de pensar en lo que había sucedido hace tan solo unos minutos, y, por las expresiones que veo en las caras de algunos de los chicos, sé que ellos tampoco podían parar de pensar en ello.

Una vez terminamos nuestra canción, bajé prácticamente corriendo por las escaleras. Con la vista busqué tanto a la chica, como a Lee Daniel y a los paramédicos...pero ya no había nadie en aquel lugar.

- ¿Dónde estarán? - habló Changbin en un susurro.

- Ni idea - le respondió Seungmin mientras alargaba su cuello para ver mejor.

Sin pensarlo dos veces, me acerqué hacia un miembro del staff.

- Perdone, ¿puedo hacerle una pregunta? - dije mientras le di un toque en el hombro.

- Si, por supuesto - me respondió este de una manera muy agradable.

- ¿Dónde están Kim Mary y Lee Daniel?

Este pareció mirarme sin comprender de qué hablaba.

- ¿Quiénes son? - preguntó haciendo que me sorprendiera - ¿miembros del staff?

Se supone que, los miembros del staff, se conocen entre ellos y, sobre todo, conocen (nombre y empresa) de cada uno de los idols que se presentan...¿cómo es posible que no tenga ni idea?

Solo pude pensar que era un incompetente. Por esa razón, me dirigí hacia otro trabajador, esta vez una de las chicas.

- Disculpe, ¿sabe dónde están Kim Mary y Lee Daniel?

Una vez más y, al igual que el otro chico, me miró como si fuera la primera vez que escuchara aquellos nombres.

Pero entonces, habló.

- Ah, ¿la pareja de baile extranjera?

Yo asentí algo confundido.

- Se fueron hacia dentro - me señaló el pasillo que conectaba la zona para entrar al escenario con los camerinos. - Al menos, esa fue la última vez que los vi.

- Oh, entiendo, gracias - dije a la vez que hacía una pequeña reverencia y me dirigía hacia aquel lugar.

Recordé el momento en el que los vimos por primera vez, aquel día que hicieron una carrera a lo largo del pasillo...ese sería su camerino.

Me dirigí hacia allí, y toqué a la puerta.

- ¿Se puede? - dije.

Mientras pasaba aquello, los chicos se acercaron hasta mí.

Como no obtuve respuesta, volví a tocar.

- ¿Puedo pasar? Soy Chris.

- Abre - me dijo Hyunjin. - No te están respondiendo.

- Ya per...

- Vamos a entrar - anunció este a la vez que abría la puerta.

Tal y como imaginábamos, no había nadie dentro.

Y aquella era mi verdadera pregunta...¿por qué desaparecían siempre?

Además...si se iban, ya no tendríamos forma de comunicarnos con ellos...

******

Poco después de estar en la sala un miembro del staff llamó.

- Kim Mary y Lee Daniel. - Dijo este mientras leía nuestros nombres en una especie de libreta

- Si - Respondimos a ambos al unísono a la vez que nos poníamos en pie de nuestras respectivas sillas.

- Vuestro CEO os reclama ahora mismo para que vayáis con él a la sala de la parte de arriba de este edificio - nos comentó.

Sin poder evitarlo, ambos nos miramos durante unos segundos y pude ver cómo nos temblaban las pupilas. Normalmente nos lleva directamente a nuestra empresa y allí nos regañan o grita o nos dice todo lo que tendría para decirnos... Pero esta vez no... Esta vez nos reclamaba en ese mismo edificio ni siquiera puso una espera para llegar hasta nuestra empresa sino que tendría que hablar con nosotros ya... Y sabía la razón.

Cabizbajos, ambos caminamos por aquel lugar desconocido para nosotros como si se tratara del paseo de un funeral o como si fuéramos camino a nuestra muerte.

- ¿Qué querrá...? - habló Dan a la vez que cortaba el gran silencio que se creó en aquel tétrico ambiente.

- ¿Tú que crees?

Le escuché suspirar. Obvio sabía lo que era...pero no podíamos aceptarlo, más bien, no queríamos aceptarlo.

- Nuestro último Show en este evento...era donde más deberíamos de brillar y, sin embargo, fastidié lo mejor de la canción...el final. No hice la acrobacia del aro de fuego, cambiamos los pasos del final...de algo espectacular se quedó en algo básico...

- No fue tu culpa - habló este cortando mis palabras.

Me conocía más que yo a mí misma...pero era la verdad...fue mi culpa.

- Pero...

- ¿Acaso te dislocaste el hombro a posta? Porque yo creo que no, además, eso es prácticamente imposible.

- No, pero..

- Nada, solo fue un accidente - habló muy serio.

Y entendía que se molestara. Sé que tiene razón, fue un accidente, pero el CEO va a buscar culpables, no accidentes, y la culpable era yo.

Sin querer hacer esperar más nuestro sufrimiento y agonía, entramos en aquella sala sin dar más rodeos.

- Sabéis por que estáis aquí - dijo aquella voz como si nos apuñalara.

Ambos asentimos mientras mirábamos hacia abajo.

- ¿Creéis que es normal? - preguntó.

- Fue...un accidente... - dije en voz baja, pero lo suficientemente alta como para ser escuchada.

- ¡Me importa una mierda! - gritó a la vez que le dio un golpe al escritorio en el que estaba apoyado. - ¡Sois unos incompetentes! - se levantó de este y se acercó hacia nosotros hasta encontrarnos cara a cara - ¡¿Os parece bien lo que habéis hecho?! ¡¿Para eso os mantengo?!

Obvio aquello era una completa mentira, pero no podíamos quejarnos ahora.

- No fue...a...adrede - hablé

Tal vez no tuve que decir aquello, pues se puso enfrente mía y empezó a darme en el hombro dañado repetidas veces dándome pequeños empujones.

- No me importa - dijo separando las sílabas.

Yo apreté mis ojos a la vez que aguantaba aquel dolor punzante.

- Ya basta - dijo Dan mientras se ponía entre él y yo.

Sin pensarlo dos veces, el CEO le dio una bofetada.

- Deja de hacerte el héroe, cuando no eres nada - enfadado señaló hacia la puerta - No os quiero ver más, en la empresa hablaré con vosotros.