A través delas cámaras pudimos observar como, Lee Daniel y Kim Mary, reorganizaron todo el lugar, limpiaron y colocaron cada cosa en su sitio. Tras eso, entraron a ducharse, siendo ella la primera.
- ¿Por qué no van a casa a hacer todo esto? – preguntó Changbin mientras observaba con total detenimiento.
- Ni idea – respondí a la vez que le daba un sorbo a mi té recién hecho – Tal vez les sea más cómodo ducharse en la empresa...nosotros lo hemos hecho a veces.
- También es verdad – respondió este a la vez que continuábamos viendo aquello.
- Yo creo que por hoy ya es suficiente, pues ya mismo se irán del lugar.
Íbamos a cerrar el ordenador y, con esto, terminar con la sesión del primer día, pero su repentina conversación nos llamó la atención y, por eso, continuamos viendo.
- Dan, ¿crees que me está demasiado grande? – escuchamos la voz de Kim Mary mientras salía del baño.
Realmente, la ropa que llevaba, le estaba bastante grande. Y eso es un detalle que se nos pasó durante el día, pues, si no recuerdo mal, la ropa que llevaba para ensayar también era ancha para ella. Pensé que era porque ese es su gusto y prefiere llevar la ropa unas tallas más grandes, al igual que algunos de nosotros...solo es una cuestión de preferencia, pero, al realizar aquella pregunta, mis dudas comenzaron a aparecer.
- Mary... - la voz de Dan llegó a preocuparnos.
¿Por qué la nombró de aquella forma como si algo malo estuviera pasando? Vale, perder tanto peso no está bien, pero Mary parece saludable...dentro del mundo artístico en Corea, claro.
En mitad de nuestra charla, Lee Daniel entró al baño, seguramente a ducharse, mientras que Kim Mary se quedó en la sala danzando, no era ensayo, si no paseaba por la sala con movimientos suaves y elegantes.
Tras aquello, Lee Daniel se dirigió hacia la despensa y sacó lo que parecía ser un par de mantas y, detrás de él, fue Kim Mary a la vez que hablaban de temas triviales, y sacó un par de cojines.
- ¿Qué piensan hacer? – pregunté automáticamente.
- Pues si llevan mantas y cojines...supongo que irán a dormir – habló Han de manera obvia.
- ¿Ahí? – dije.
Ante mi pregunta, mi amigo se encogió de hombros. Seguimos observando y pudimos ver como extendían las mantas y ponían los cojines sobre esta. Tras eso, Kim Mary entró de nuevo en la despensa para sacar una manta aún más fina que las del suelo y cerró la puerta para, seguidamente, echarla encima de la especie de cama que habían construido.
- Hora de dormir – dijo esta a la vez que se tumbaba y se tapaba con la manta.
- Buenas noches, pequeña – le habló con dulzura a la vez que le daba un beso en la frente dejándonos algo pensativos.
- ¡Buenas noches! – respondió ella animadamente a la vez que le abrazaba por la espalda al chico, poniéndose como koala con su brazo y pierna sobre este.
Tras esto...cientos...miles de preguntas, revoloteaban por mi cabeza.
Creo que mañana será un día de interrogatorio.
Hasta aquí el capítulo de hoy ¡Espero que lo hayáis disfrutado muchísimo!
¡Muchas gracias por todo el apoyo! ¡Nos vemos en otras historias!
AUTORA DE: Kaori, la esfera mágica.
EDITORIAL: Ediciones Arcanas.
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♡¡Hasta pronto!♡
Editado: 07.03.2024