Renesmee
-Señorita, señorita, despierte -alguien tocaba delicadamente mi brazo.
Abrí los ojos lentamente. Había una mujer a mi lado. Una azafata.
-Hemos llegado. Ya vamos a aterrizar.
-Muchas gracias.
Enseguida voltee a la ventana. La vista era hermosa.
Que me esperara aquí?
***
Luego de buscar mis maletas fui al área de espera. Enseguida vi a una chica rubia con ropa negra. Y un muchacho alto, entre sus manos tenia un cartel que decía mi nombre.
-Renesmee cullen, la híbrida. -Saluda la rubia.
-Bienvenida -responde el chico- Soy Demetri, y ella es Jane.
-Gracias. Mucho gusto.
-No puedo decir lo mismo -susurra Jane pero pude escucharla.
-Parece ser que alguien carece de modales -contraataque.
Automáticamente sentí una pequeña punzada de dolor que me hizo estremecer. -Basta Jane -le reprendió Demetri, estamos en publico.
El dolor ceso. -Gracias Demetri.
El asintió. -Vamos, nos esperan.
***
Volterra es preciosa, desde la arquitectura de los edificios que forman callejones y callejones donde la gente vive y disfruta de la hermosa Toscana. El palacio esta a las afueras de la ciudad, cercano a una zona muy transitada, pero es hermoso.
Impresionante -pense.
Al entrar, se podría apreciar un pequeño museo.
Supongo que es para atraer presas.
Es decir humanos. Es irónico, Aro desea no levantar sospechas pero mata humanos para alimentarse.
Luego de atravesar unos pasillos nos detuvimos en una puerta que contaba con identificador digital pegado a la pared.
Demetri tecleo la combinación. Y la puerta se dividió dejando ver una puerta negra con el símbolo de los Vulturis.
Entonces, aquí estamos.
Una chica esta sentada en un gran escritorio de mármol.
-Buenas tardes amos.
-Buenas tardes Susan, ella es Renesmee se quedara con nosotros desde ahora. Lleva sus cosas a su habitación.
-Enseguida.
La chica obedeció y se fue con mis cosas.
Entramos por otra puerta mas grande que la anterior. Y ahí estaban. Los lideres del clan Vulturi. Aunque supongo que el del trono mas grande es Aro.
-Mi querida princesa Renesmee -Mis sospechas son ciertas. Aro se para de su silla. -Me alegra que hayas aceptado quedarte con nosotros, ven acá.
Me acerco a el tratando de controlar mis nervios.
-Dame tu mano.
-Mejor deme la suya -respondo.
El logra captar lo que digo y pone su mano fría en mi cara. De un igual manera le estoy mostrando mis recuerdos.
-Asombroso. Asombroso pequeña. Quizás no los recuerdes pero ellos son Marco -señala el señor a su izquierda de pelo negro, un poco mas largo que el de el - y Caius- señala a un muchacho mas joven de pelo rubio. Quien me mira con asco.
Yo lo ignoro.
Escucho una puerta abrirse. -Amos, mil disculpas por... -la voz se para en seco. Esperen, yo conozco esa voz...
Me volteo y ahí esta.
No puede ser.
Alec...
El me mira y por segunda vez hoy quiero llorar. Es que acaso no se puede confiar en nadie?
Miro a Aro. -Si me disculpan, necesito un poco de aire.
Salí rápidamente de la habitación. No quiero hablar con el. La secretaria humana me indica donde están los jardines.
Pero la tristeza que guardo no me deja disfrutar de la belleza que hay a mi alrededor.
Me siento tan impotente. Tan utilizada.
-Renesmee...
-La ultima persona en el mundo que crei que no sería capaz de lastimarme eres tu y mira... me mentiste -respondo con rabia.
Se que esta detrás de mi, siento su respiración.
-Renesmee, Lo siento.
-Todo esto fue planeado? Lo planeaste verdad? Que querías conseguir con esto? Creí que podía confiar en ti. -Me limpio las lágrimas de la cara.
-No te hubieses acercado a mi, si te hubiese dicho quien soy...
-Eres un Vulturi. Querías matarme. Querían matarme.
-Solo es un apellido. Ademas las cosas han cambiado.
-Si querías hacerme daño, felicidades campeón. Lo has logrado.
-Adonde vas? -me pregunta, mientras yo sigo caminando hacia el castillo.
-Lo mas lejos de ti posible.
***
Mi habitación estaba pintada de blanco. Había una cama mediana, un escritorio, una mesita de noche con una lampara. Un balcon. Un closet. Y un baño.
Cuando huí de Alec esta tarde pedí que me llevaran a mi habitación. Y desde ahora estoy aquí.
Ya es de noche y las estrellas iluminan el cielo. La brisa remueve mi cabello. Extraño Forks. Quizá demasiado... Pero esta sensación es agradable.
-Buenas noches hermosa.
El chico rubio de facciones elegantes aparece a mi lado.
-Buenas noches, Demetri.
-Como te sientes? Estas bien?
-Si, si.
-Te veo algo triste Renesmee.
-Sanar un corazón roto no es sencillo. -el me miro confundido y de inmediato cambie el tema- querías decirme algo?
-Nos esperan para cenar. Aunque también Aro quería que conocieras a los otros miembros del Clan.
-En un minuto voy.
Demetri me acompaña al comedor.
-Querida Renesmee, te estábamos esperando. -Aro sonrie, al parecer complacido de verme. -Gracias por traerla Demetri.
El asiente y se retira a sentarse.
-Ven sientate con nosotros querida. -sugiere Marco.
Yo tomo el único lugar disponible entre Demetri y un muchacho fornido quien me recuerda a tio Emmett.
Lo peor? Alec esta delante de mi.
-Bien -Aro se para de su silla. Para los que no lo sepan, ella -di e señalándome y continua- es Renesmee Cullen. La hija de Edward y Bella. Se quedara con nosotros desde ahora. Así que presentense con ella.
-Soy Renata -dice la chica al lado de el fornido.
-Soy Felix. Un gusto. -Dice el mismo fornido a mi lado.
-Chelsea -saluda la pelirroja con voz irritante al lado de Alec.
-Soy Santiago. -Saluda un chico alto y moreno con trenzas.
-Jane. Ya nos conocimos. -Dice la pelirubia.
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Editado: 25.05.2025